Romeo Y Julieta {Zayn Malik y Tú}

Capítulo 42 "love, zayn"

Ha pasado más de un mes, y en clases va todo igual, Liam sigue siendo mi mejor amigo junto con Kim, y sin olvidar a Alison y Hannah. Aunque no hay nadie más honesto que Liam, es el único en el que puedo confiar.

En mi interior sigue el espacio que dejó Zayn. El aún está en mi memoria, no será tan fácil olvidarlo.

-¿Entonces? Te pasaremos a buscar a las ocho – dijo Liam junto a las chicas.

-Claro – cerré la puerta de mi casa dejando de verlos.

Subí a mi cuarto, saqué los cuadernos de mi mochila, debía ordenarla, hace mucho no lo hacía, comencé a sacar los cuadernos unos papeles, lápices y cosas así. Hasta que de un cuaderno salió un sobre que no reconocí.

Me extrañé, al tomarlo aparte las cosas de mi cama y me senté para saber el contenido. Era un sobre blanco un poco arrugado, al parecer llevaba tiempo dentro de mi mochila. Lo abrí inmediatamente contenía muchas hojas dentro con escrito. Tomé la primera y comencé a leerla:

“Se que te parecerá algo extraño todo esto, pero no me atreveré a contarte todo frente a frente. Todo comenzó el día que mis padres llegaron al hospital, para saber de Safaa. Y si no hubiese sido por ti y tu apoyo para hacer las pases con ellos, no me hubiese enterado de nada. Comenzaré.

Cuando fui a la cena que por cierto tu me lograste convencer que fuera, mis padres hablaron de los problemas que tuvieron allá, no podían transferir dinero ni cosas así, ya que estaban empezando una vida nueva se les hizo difícil no estar junto a nosotros, al explicarnos esto, nos arreglamos inmediatamente, logramos reunirnos como la familia que alguna vez fuimos. 

Las chicas siempre le hablaron a mamá de ti, de lo maravillosa que eres, y de lo bien que la pasaban contigo. Aceptaron en invitarte a comer, para que por fin te pudieran conocer, pero ese día, te marchaste, sin dar excusa, sin el permiso ni agradecimiento hacia ellos, yo comprendo el por qué lo hiciste. Y no podía ponerte obstáculos.  Claramente a mis padres les molestó mucho. Se sintieron pasados a llevar.

Mamá desde ese día, me convencía de que no eras la mujer que debía tener a mi lado, solo quería aue terminara contigo. Evitaré las ofensas y motivos que me dio para dejarte, no es algo agradable, y no las comparto. Ellos no te conocen como yo.

Un día, les comenté tu situación, el problema que tenías con tus padres, pero no lograron quitar el enfado que te tenían. Solo aceptaron con mala gana.

Un día los escuché charlando en su habitación y estaban comentando que querían irse pronto para volver a trabajar, no estaba en sus planes el llevarnos a todos. Pero mamá no quería que siguiera junto a ti. Intenté hacer todo lo posible para evitar que esto pasara. 

Pero fue inútil, desde la vez que me encontraste en el casino he estado muy mal, no sabía cómo contarte todo esto. No quería hacerte sufrir, por lo que intenté mantenerme lo más alejado de ti por muy difícil que fuera. No podía pasar un día sin saborear tus dulces labios. Pero como vez, volvía a ti cada vez que tenía oportunidad. Es difícil estar sin ti.

Las conversaciones con mis padres cada vez se convertían en nuevas discusiones, yo hubiera seguido las discusiones pero intentaba calmarlas solo para que mis hermanas no estuvieran presentes ante una nueva crisis familiar, era un caos. 

Marc era el único que sabía todo esto, quizás tu amiga Alison no te lo contó porque le pedí a Marc que no le contará nada, era yo el que tenía que decirte todo esto.

Ahora te estoy escribiendo, antes de ir al colegio a hablar con el director, mis padres ya han hecho todos los trámites y hoy solo tengo que ir a buscar unos papeles, por lo que será el momento indicado para decirte.

Aún no sé como reaccionarás, espero tener las fuerzas suficientes para contarte  porque sé que te romperé el corazón, y no sé si tenga las agallas para verte llorar. Pero será difícil irme sin despedirme de ti.

Haré lo posible por encontrarme contigo de nuevo, princesa. Apenas llegue allá trataré de venir lo más pronto, porque ya no me puedo imaginar la vida sin ti a mi lado. 

Espero que no te enfades con Marc porque él no tiene la culpa, él ha hecho llegar esta carta hasta tu bolso, soy un idiota no tengo las fuerzas suficientes para poder decirte todo esto a la cara, pero esto es tan difícil ya que dejar al amor de mi vida, es muy difícil.

Pequeña, gracias a ti, he cambiado, me has hecho creer en la vida, en que las personas pueden cambiar, en que los distintos gustos y distintas situaciones económicas no tienen nada que ver con el amor, he vuelto a ver lo hermoso de esta vida, me sacaste adelante. Sé que no eres la primera novia en mi vida, se dicen que el primer amor nunca se olvida, pero yo lo olvidé, ahora tú eres el amor de mi vida, y siempre lo serás. 

Quizás cuando te vuelva a ver estarás casada con un esposo muy guapo y muchos hijos preciosos al igual que tú, quizás no me reconocerás, pero yo sí. Y me arrepentiré de no haberme quedado a tu ladobporque soy un idiota que no pudo seguir luchando para quedarse junto al amor de su vida.

Pero lucharé cada día, y me esforzaré para no ser ese idiota. Espero que nunca me olvides, porque yo no lo haré. Siempre tendré tu memoria, tu hermoso rostro. Y en mi corazón todo el amor y felicidad que me brindaste. 

No olvides quién fui, por favor. Que yo nunca lo haré, y no te quedes sola solo por mi causa, necesitas a alguien a tu lado.

Te ama, Zayn. “

Al terminar de leer esto las lágrimas ya inundaban mi rostro. Mi corazón comenzó a doler de nuevo y un grito de mi interior salió. Comencé a golpear mi cojín y luego taparme con él para que mi llanto no se escuchara. No puedo creer lo que acabo de leer. ¿No lo podré ver más? ¿Cuándo esté casada? ¿Qué quiere decir todo esto?

Mis lágrima seguían cayendo por mi rostro y mis cosas seguían sobre mi cama las horas pasaban y pasaban y yo seguía hay tirada leyendo una y otra vez esos trozos de papel con la tinta ya corrida por las lágrimas que cayeron sobre él. Era una tortura leer cada párrafo. 

Hasta que el dolor logró hacer que me durmiera por completo.

-¡Hey! – escuche que abrían la puerta de mi habitación, y se escuchaban muchos pasos.

-¿Por qué está durmiendo? – escuché otra voz que provenía de más lejos.

-No lo sé ¿Le habrá pasado algo? – era la tercera voz distinta que escuchaba.

No lograba abrir los ojos, hasta que siento que toman mi hombro y lo comienzan a mover.