Romeo Y Julieta {Zayn Malik y Tú}

Capítulo 44 "my part"

Narra Zayn:

Han pasado exactamente tres años desde que dejé a _______ atrás en mi vida, no hay ningún segundo en el que no piense en ella. Mis padres están trabajando, mis hermanas siguen estudiando. Y yo, sigo en mis cosas, finalicé mis estudios y el trabajo es a tiempo completo. No sé qué estudiar. Y estudiarlo acá no está en mis planes. Salgo a fiestas con mi grupo de amigos que he conocido acá  pero nada es lo mismo, sigue el vacío de las personas que dejé atrás. De _________, maldición como la extraño.

Mamá está trabajando junto a una chica, que está tratando de remendar los problemas que ha causado a su padre. Y no encontró nada mejor que dejarla a cargo de mamá. Es atractiva, y mamá quiere que salga con ella. Con Leila. Pero es un asco como persona. Tan vacía y sin cerebro.

Solo intento de alejarme de ellas cuando están cerca, pero es difícil. Está siempre a un paso detrás de mí. Es agobiante.

Estamos de vacaciones, y aún no me han entregado el dinero que me deben de la empresa, solo espero que sea el suficiente.

...

El dinero es más de lo que esperaba. Me alcanza para lo que tengo en mente, compré mi pasaje de ida, debía volver a mi antiguo hogar, y sin dudas me alcanzará para estar varios días allá. Preparé mis maletas, y al momento de irme, mamá interrumpe en mi habitación.

-¿Dónde planeas ir?

-A mi antiguo hogar - tomé mi pasaje y lo guardé bien en mi bolsillo.

-Otra vez con lo mismo... Hijo, olvídate de ella.

-Tengo toda una vida allá, amigos que ver. No he sabido nada de ellos en tres años.

-Háblales por Internet - dijo cruzandose de brazos.

-No es lo mismo.

-Los seguí hasta acá, terminé mis estudios, estoy trabajando, juntaré el dinero necesario para seguir estudiando, hice todo lo que me pidieron por esta familia. Les respondí bien, tengo la edad suficiente para tomar decisiones por mí mismo. Así que sim comentarios. Vuelvo en pocos días. Cuídense.

Tomé mis cosas, el taxi me estaba esperando abajo, pasé por al lado de ella, estaba congelada y no sabía que responder, besé su mejilla. Me despedí de todos y me marché.

Mi vuelo estaba por partir. Estaba ansioso, no eran tantas horas. Pero aprovecharía de dormir. Ya acomodado en mi asiento, puse los audífonos y me dejé llevar por la música.

Pasaron varios minutos, hasta que un mensaje llega a mi celular y me saca de mis pensamientos. 

“Zayn, te extraño ¿Dónde has ido? Tu madre me ha comentado que volverás a tu antiguo hogar ¿Por qué no te pude acompañar? ¿No me quieres?”

Era Leila, era insoportable saber que mi mamá le tenía afecto y cariño. Admito que era hermosa, alta, esbelta, con su cabello claro y ojos verdes, pero era una chica insoportable. No quise responderle, solo ignoré el mensaje y volví a relajarme. Hasta que nuevamente sentí el celular.

-¿Qué quieres? – respondí muy enfadado.

-¿Creías que te dejaría solo? Hey Zayn, somos perfectos, ¿no crees? – escuché en el otro lado del celular.

-¿De qué hablas? – me había preocupado por el tono en el cual me hablaba.

-¿Por qué mejor no te volteas? – escuche la voz aún más cerca.

-¿LEILA? – corté rápidamente el celular al percatarme de que Leila se había acercado y se sentó junto a mí.

-Hola precioso – sonrío con su dentadura perfecta e irónica.

-¿QUÉ HACES AQUÍ? – Leila se encontraba junto a mí con una gran sonrisa y yo apenas podía creerlo.

-Vine contigo, tu mamá me ha comentado y me pagó el pasaje para poder venir contigo – su sonrisa aún seguía.

-¿Mi mamá? – me extrañé.

-Sí, al parecer quiere que estemos más tiempo juntos – me miró a los ojos y comenzó a alzar sus cejas.

-Maldición – fije mi vista nuevamente a la ventanilla que se encontraba a mi izquierda, ignorando completamente a Leila.

-¡Hey! ¿No te ha alegrado la noticia? – golpeó suavemente mi brazo.

-No, tenía planes y cosas PERSONALES – recalqué muy bien la última palabra – que hacer en este lugar, y no necesito la compañía de nadie, ni menos de ti – mire furiosamente a Leila, por lo último me arrepentí ya que los ojos de Leila comenzaron a derramar lágrimas, se levantó y se fue a sentar al puesto del cuál había provenido.

¿Por qué es así? Exagera todo, odia si no hacen lo que quiere. En estos momentos solo la quería lejos de mí, el avión comenzaría a despegar y no podía quitarme de encima los rostro perplejos de los otros pasajeros. Leila había captado la atención de todos, y claro yo era el malo de la película.

...

-Señores pasajeros estamos por aterrizar a nuestro destino, por favor abróchese el cinturón de seguridad para un cálido aterrizaje. Gracias – se escuchó desde unos parlantes que rondaban el interior del avión, desperté y comencé a prepararme.

Abroché mi cinturón y mis nerviosismo y ganas por ver a ______ eran cada vez mayores. 

El avión aterrizó al cabo de unos diez minutos, me bajé rápidamente a buscar mis bolsos e iba a comenzar mi viaje hasta casa. Hasta que percaté a Leila que sostenía su bolso y con su caminar de pasarela se acercó a mí.

-¿No tienes nada mejor que hacer? - Dije molesto.

-No seas así conmigo, corazón. Sé que en cualquier momento te tendré aquí - indicó su mano con su dedo.

-Como quieras - irritado, seguí mi camino. Me seguiría, es como una sanguijuela, no se alejará de mí.

Llegamos a casa al rededor de las ocho de la tarde. Entramos a la casa, que recuerdos... Todo estaba tal cual, solo que más sucio y un fuerte olor a húmedo. Subí hacia el segundo piso y ordené mis cosas en mi habitación.

Tomé ropa limpia y pasé al baño del primer piso, Leila ya había instalado todo en el living, sus pinturas de uña, su maquillaje, accesorios para el cabello, cremas y un montón de cosas.

La ducha logró reconfortarme, ya que estaba muy agotado, me vestí y me fui rumbo a mi pieza, pero era claro que me encontraría con una sorpresa.