A Punta de Espada//Ralicia

[13]

[Raquel]

Sentí que todo mi estómago se revolvía cuando la vi, no dije nada, simplemente la observé, seguimos por unos segundos el juego de miradas que había sido interrumpido por aquella situación, me acerqué levemente sin ninguna mala intención, sentía la necesidad de ver su rostro más de cerca, pasé mi mirada por todo su rostro, tenía sus ojos maquillados, un tono celeste pero no le quitaba el protagonismo a sus ojos verdes, que me miraban, me analizaban. La pregunta era: ¿Por qué me había seguido hasta aquí?. Su respiración era tranquila, cómo si supiera lo que estaba haciendo, pude ver por último sus ojos antes que se enfocarán en la puerta. era Mónica llamando a esta, suspire frustrada, sin saber que hacer pero Alicia simplemente lleno su botella de agua y abrió la puerta, para salir por esta, Sin ninguna explicación o palabra. -Raquel, vi todo eso, ¿estás bien?- Dijo Mónica acercándose a mi preocupada. -Si, si, sólo me tomó por sorpresa y no supe cómo reaccionar- Solté y fui hacia el lavabo, pude ver una mueca de Mónica a través del espejo. -Alberto te está buscando por todas partes- Dijo Mónica, no sabia que decirle. -Le pediré tiempo, para pensarlo, ¿si?- Dije no tan segura. -Cómo quieras, yo te apoyaré- Dijo Mónica con una sonrisa serena.

No quería encontrarme a Alberto, no quería hacerlo sentir mal al frente de su grupo de amigos y pensar que tal vez cada vez que me invitaba a salir el quería hacerlo a solas. Todos los pensamientos estaban atormentado mi día y tenía que estar bien porque además de tener examen a la última con Alicia, tenía que seguir estudiando después de todo esto.

Pero el no ver a Alberto duro poco y antes de entrar al salón me tomó del brazo discretamente. -Hey, no pensé que te lo ibas a tomar así- Dijo Alberto hablando primero, cómo siempre. -No, no, está bien, Alberto yo- Dije y pude ver su rostro lleno de entusiasmo -Dame tiempo- Solté y un suspiro salió de aquel hombre -Para pensar bien- Dije por último con una sonrisa algo forzada. -Esta bien, pero no me hagas esperar toda la vida- Dijo Alberto entrando al salón, no lo iba hacer pero estaba tan confundida, todo era algo nuevo para mi, entre seguidamente detrás de el y fui a mi lugar, estaba exhausta y aún faltaba la última clase, con Alicia.

Pude sentir cómo entraba al salón dejando la puerta esta vez abierta, ¿Será por el calor? o tal vez se le olvido, quizás era la única loca que se fijaba en ese detalle así que intenté restarle importancia. Alicia entregó los exámenes paso por mi lugar cómo si nada hubiera pasado.

[Alicia]

No sabia que estaba por hacer pero lo hice, tal vez fue la preocupación que le estaba dando a una estudiante, la seguí, fue el impulso más repentino que he tenido, algo me decía que lo hiciera y tal vez eso la ayudaría o en el peor de los casos lo empeoraría. Después de aquella situación era más que claro que fue la segunda opción.

Me senté a rellenar aquel papel de asistencia de la clase, hasta que me detuve en aquel nombre tan llamativo. Raquel Murillo, resonó en mi cabeza, levanté la mirada curiosa por lo que aquella alumna hacía. Siempre estaba concentrada, le iba bien en casi todas las materias y su esfuerzo se veía constantemente. vi cómo levantó la mirada y tiró su cabeza lentamente hacía atrás, se le veía cansada. Baje la mirada y intenté seguir rellenando la asistencia.

[Raquel]

Los pensamientos perturban mis ganas de terminar aquel examen, la cabeza me dolía y en el pecho tenía una sensación pesada. Deje de mirar aquella hoja que me estaba aterrorizando y intenté ordenar mi cabeza rápidamente, un leve suspiro salió de mi boca, me sentí un poco aliviada cuando mi mirada se fue hacia la maestra, aunque uno de mis problemas tenía que ver con ella, mirarla me tranquilizaba de una manera rápida. Me perdí en su perfil, su nariz que para mi era bastante tierna, sus pequeños labios y ni siquiera hablar de su mandíbula, simplemente me perdí en ella.

Salí del trance un poco más despejada y pude seguir con aquel examen, lo terminé de las primeras a pesar de los minutos que perdí viendo a mi maestra. Me levanté algo insegura por lo que iba hacer y fui a su mesa, extendí lentamente el examen y enseguida noté la mirada de Alicia en mi, cerré levemente los ojos y suspire, llevando mi mirada hacia ella, miró lentamente mi examen y levanto la mirada con un pequeña sonrisa. -Puedes irte- Dijo Alicia y miro nuevamente hacia abajo. Dios, sus actitudes me dejaban tan confundida, salí de aquel salón a paso lento. Al llegar iba a repasar cada cosa que había pasado hoy, ni siquiera un detalle se me iba ir a escapar.

Mónica salió atrás de mi. - ¿Le dijiste a Alberto? - Pregunto Mónica, asentí con una sonrisa. - ¿Y qué te dijo? - Dijo por último Mónica, bufé recordando. - Que no lo hiciera esperar toda la vida - Solté, una sonrisa se hizo presente en el rostro de Mónica. - ¿Vas a aceptar? - Pregunto la chica. - Venga, ¿esto es un interrogatorio? - Dije y solté un risa nerviosa, no sabía que decir, ni siquiera sabía a que estaba esperando para aclarar mis ideas.

perdón por lo corto, es que no quería dejarlxs sin capítulo hoy=[