Las primeras misiones solían ser un rollo; llevaban las nuevas incorporaciones con un supervisor que observaba como trabajaban, cuál era la dinámica y si de verdad estaban hechos para aquello.
Emma había tenido su primera misión con una chica que se llamaba Olivia Parker; esta tenía dos años más, y la relación que tenía con Emma no había sido nunca algo más que cordial. Habían hecho un pésimo equipo juntas, y de no ser porque Clara López se la llevó a otra y aseguró que Emma tenía un gran potencial -que salió a la luz con los años-, probablemente no estaría ahí, ya que aunque jamás lo había leído, el informe de Parker fue todo cosas malas según ella.
Emma iría de la manita con los tres revolucionarios veteranos de guerra, y aunque les quería mucho, no podía decir que estaba entusiasmada en absoluto; odiaba tener que andar detrás de la gente, y siendo nuevos como eran, sabía que no le iba a quedar más remedio.
-Vuestra misión es, dentro de lo que cabe. -Emma alzó una ceja. -sencilla.
En la pantalla que había dentro del despacho, Román mostró las imágenes de un retrato real del siglo XIX. Emma bufó sonoramente, sin esconder su disgusto y molestia, llamando la atención de sus compañeros.
-Con Isabel II no, por Dios.
-Con Isabel II sí. -zanjó Ambrosio. -Isabel II fue la reina de España desde mediados del siglo XIX, hija de Fernando VII, que ese os sonará más. -dijo, dirigiéndose a los novatos. -Ese de ahí es su marido, Francisco de Asís.
-La Paquita. -comentó Emma. -Todo el mundo le decía la Paquita.
-¿Por qué? -cuestionó un atento Combeferre.
-Por ser homosexual. -Ambrosio hizo un ademán restando importancia al asunto. -Nos han llegado preocupantes noticias de palacio: Isabel y Francisco se niegan rotundamente a la unión, y se supone que deben casarse pasado mañana. No tenemos ni idea de que puede haber pasado. Vuestra misión es descubrirlo y aseguraros de que el enlace se produce. El destino de la historia está en juego. Puerta número 349. Buena suerte, patrulla.
Emma se levantó de su asiento, con el calor pegándose en su piel nada más salió del despacho con aire acondicionado. El resto de chicos seguían sus pasos de cerca, con cierta quietud y un aire de tensión y estoicidad. No tenían ni idea de que hacer, así que solo la siguieron.
Emma ya había ido a la corte de Isabel II, solo que unos años antes, cuando esta era solo una joven de trece años, recién coronada reina. Tuvo que permanecer con ella mientras su madre volvía a España, y casi le da una bofetada una vez; su majestad tenía muy mala uva, y se mezcló eso con que Emma no soportaba ni a los niños ni a la monarquía.
En el departamento de Caracterización, Emma se dedicó a explicarles un poco por encima el reinado de Isabel II, porqué un gran número de jóvenes españoles sentían una profunda aprensión hacia ella (su tema del último curso de instituto era bien largo), y como iban a proceder.
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E P I F A N Í A ||Les Miserables (enjoltaire)
Ficção Histórica1832, París guarda silencio tras el último disparo que resuena en el Corinto, marcando el fin de la revolución de junio. Cuatro amigos de la llamada sociedad del ABC despiertan en un entorno desconocido, y Emma Olivares, la responsable de su salvac...