La puerta de su habitación fue abierta despacio, pero con una confianza que lo desconcertó. TaeHyung, desde su cama, observó con su ceño fruncido al nuevo integrante en su cuarto. Una figura alta y fornida totalmente cubierta por ropa negra, esa inconfundible cazadora de cuero y un gorro de lana del mismo tono donde ponía en su frente bordado "Bad Boy".
-¿Kook? -Preguntó poniéndose en pie para su encuentro mientras él cerraba la puerta.
-Hola niño bonito. -Saludó con una amplia sonrisa.
-¿Qué...? -Él mismo detuvo sus palabras analizándolo. -¿Cómo has entrado?
-Por la puerta, tus guardias han reconocido mi moto y me ha dejado pasar. -La sonrisa en su angelical rostro no desaparecía. -Te echaba de menos, hoy no has venido al estudio. -Tae sonríe al fin, siendo consciente de que él realmente había ido a verlo porque lo extrañaba. De nuevo se sintió importante por tener parte de la atención de JungKook.
-Hyuna quería que le acompañara de compras hace semanas, dice que le gusta la ropa que yo le elijo. -Empezaba a decir sosteniendo las caderas de Jeon para acercarlo a él. -Pero como me he negado tantas veces hoy me ha hecho una encerrona en casa con el diseñador. -JungKook rió divertido por su "desgracia". -Me ha tocado quedarme para no enfadar a mi padre.
-Bueno, que ella confíe en tu gusto para la moda no está mal, ¿no? -Cuestionó ladeando su cabeza.
-¿Ella te ha visto? -Inquiere rápido él. -Estaría cenando.
-Creo que no, Jessie sí me ha visto y me ha pedido que suba en silencio. -La calma volvió al cuerpo de TaeHyung.
-Tendré que darle una paga extra este mes a Jessie por ayudarnos entonces. -Sonríe de lado, JungKook rodea su cuello dando caricias en su nuca.
-Sí, esa mujer me agrada. -Susurra terminando, al fin, con la distancia entre ambos para dar inicio a un beso. Uno corto e insignificante para las ganas que se tenían teniendo en cuenta que son interrumpidos por el golpeteo en la puerta y esta misma siendo abierta segundos después.
-Señor Kim, como no ha bajado a cenar he supuesto que tendría hambre y le he traído... -El odioso rubio joven del otro día, HyunJin, detiene sus palabras al verlos abrazados en mitad del cuarto.
-No, no tengo hambre. -Sentencia rápido TaeHyung sin soltar a JungKook, todo lo contrario, hunde su rostro en el cuello pálido de él. -Kook, ¿tú has cenado?
-He comprado hamburguesas de camino aquí. -Tae frunce su ceño, no se había dado cuenta de que había traído una bolsa. Besa su cuello y le da una ligera lamida con la punta de su lengua.
-¿Acaso piensas que el señor Kim va a comer de esas cosas? -Y ahí estábamos de nuevo, esa voz creída y fastidiosa interrumpiendo su momento y además creyendo ser más que JungKook. El chico del sur suelta una alta carcajada alejando de Tae para encarar al chico con la bandeja de comida en mano.
-¿Acaso es necesario que vuelva a recordarte tu lugar? -Cuestiona llegando a él para arrebatarle la bandeja y dejarla sobre el mueble más cercano. -Porque parece que lo olvidas fácilmente.
-El señor Kim es mi jefe, a quien le debo respeto; no a ti. -Demanda el chico con confianza, levantando incluso su mentón, JungKook sonríe como si fuera el mismísimo diablo.
-¿Sí? -Inquiere sin esperar respuesta. -Dime una cosa, ¿te gusta? -A pasos y movimientos lentos va arrinconando al chico contra la pared lateral a la puerta del cuarto, JungKook lo intimida con su mirada gélida y sonrisa torcida. -¿Es eso? ¿Te gusta mi chico? -Con delicadeza acuna el rostro del rubio con su mano izquierda, con la derecha lo obliga a colocar una de sus manos en su trasero y otra en uno de sus pechos. Todo bajo la atenta mirada de un curioso y excitado TaeHyung. -Pues déjame decirte que no lo comparto si yo no estoy incluida niño. -Lo susurra tan cerca de la boca de él que HyunJin puede sentir su aliento a tabaco perfectamente.
-Yo no... -Tartamudeó, JungKook se acercó más a él chocando sus narices. -Con permiso. -Demanda soltando esas zonas del cuerpo de Jeon para deslizarse por la pared hasta llegar a la puerta y marcharse.
-Ese mocoso irrespetuoso no me hablaría así si supiera quien soy. -La voz de JungKook sonaba molesta, pero tanto él, como TaeHyung que comenzaba a conocerlo más que a sí mismo, sabía que estaba feliz. -¿Qué pasa? -Le pregunta cuando siente los fuertes brazos de él rodear su vientre y acercar su espalda al pecho ancho y fornido de él.
-¿Por qué has hecho eso? -Susurra soplando a propósito en el oído de Jeon. -Ahora tengo un problema. -Al instante siente la presión de algo duro en su trasero. JungKook sabe que es una fuerte y agradable erección.
-¿Te ha puesto caliente verme tocarlo? -Susurra de vuelta, haciendo la fuerza necesaria para girarse y encararse; pero él no le deja.
-No, me ha puesto ver cómo él te tocaba e imaginar que era yo quien lo hacía. -JungKook suelta una carcajada, TaeHyung lo gira de golpe hacia él y vuelve a apresarlo entre sus brazos con fuerza. -Porque yo puedo ser tu niño bonito; pero tú eres mi niño rudo.
Su voz, aunque sigue siendo grave y excitada, suena con matices de cariño y dulzura. Sin pensarlo mucho más se lanza a su boca degustando esos maravilloso labios aterciopelados. Una batalla de sus lenguas da inicio y por ende la temperatura en sus cuerpos incrementa.
Las manos de JungKook se cuelan bajo su camiseta ancha y recorren su marcado abdomen con vehemencia; las de él trepan por toda su curvilínea figura hasta llegar a su cabeza. Retira el gorro de lana de ella para poder apresar así su cabello y jalar de él.
Pero entre sus pestañas, gracias a sus ojos semi abiertos, cuando el pelo de él cae libre de ese gorro ve algo que lo detiene de golpe hasta el punto de separarse por completo del beso y de su cuerpo.
-¡Sorpresa! -Grita entonces JungKook recolocado su cabello y con una sonrisa genuina.
-¿Qué te has hecho? -Susurra TaeHyung absorto en la largura de eso espeso cabello ondulado destacando en él que ahora no es de esa maravillosa y brillante negrura natural azabache, ahora un tono rubio pálido enmarcan su rostro angelical.
-¿Te gusta? -Pregunta acercándose de nuevo a él que parece estar en una especie de shock. Obvio le gusta, todo lo que sea JungKook le gustará. -He pensado que hasta que tú sigas siendo rubio para encajar, yo voy a ser rubio para hacerte compañía. -Tae no podía dejar de ver esa deliciosa boquita moverse enmarcada en esas ebras rubias. -Lo cierto es que me asustaba un poco la idea de hacerme rubio completamente, pero creo que me queda bien y... -JungKook calló abruptamente al sentir de golpe las manos cálidas y suaves de TaeHyung enmarcar su rostro.
-Eres lo vas bonito y sexy de este mundo. -Por primera vez Tae presenció y ocasionó lo que él denominaría un milagro de la creación; las mejillas de JungKook ser coloreadas por un tenue rosa. -Te quiero, lo juro.
-Yo también te quiero TaeTae.
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Hold On; de ricos y pobres (KookTae) (TaeKook) (NamMin)
FanficDe ricos es ser indiferente y egoísta; ser feliz pero muy serio y estirado; ser derrochador y nada trabajador. De pobres es ser desinteresado y empático; ser desdichado pero sonreír y positivo; ser tacaño y muy trabajador. ¿Cuántos de estos estigmas...