🧡Capítulo 14~Juramentos🧡

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Tras la nueva, pero no desconocida, declaración de amor puberta entre ambos de nuevo habían llevado la expresión de sus sentimientos a lo físico.

Si hacía unos minutos ambos estaban calientes en lujuria, ahora debíamos sumarle el cariño y aprecio a las almas del contrario.

Entre besos fogosos, que cambiaban de caricias de labios lentas a salivas mezcladas y derramadas por querer profundizar más y más la boca contraria. Así llegaron a la gran cama del rubio del norte quién se encargó primero de desnudar su propio cuerpo bajo la atenta mirada del chico del sur tumbado en la cama.

Fue él mismo quien se dedicó también a retirar la ropa de Jeon, deteniéndose a besar cada uno de sus tatuajes incluido el de la marca que indica que pertenece a las víboras del sur.

De la boca de JungKook solo salían jadeos profundos que no pensaba contener porque podía ver el disfrute de TaeHyung cuando lo hacía en voz alta. A la vez, el ex-pelinegro ahora rubio cenizo, tocaba todo a su paso. Acariciaba la espalda, los abdominales y pecho marcado del chico, apretó su duro y redondo trasero entre sus grandes manos tatuadas y degustó demasiado masturbar el pene gordo, erecto, duro y húmedo en presemen del otro rubio.

-Si no entras ya te juro que te violo Kim TaeHyung. -El rubio soltó una gran carcajada al aire y se separó de él lo suficiente como para alcanzar un preservativo de su mesita de noche y colocárselo.

-¿Quieres hacerlo? Yo me dejó violar por ti. -Se burló sonriendo cuadradamente, JungKook fue entonces quién rió y ejerció fuerza para tumbarlo en la cama y montarse sobre él.

-Algo me dice que ha esperabas este momento. -Canturreó volviendo a adoptar su gen altivo, todo aquello a que TaeHyung tuviera preservativos en su mesita de noche. Kim jadeó al sentir su miembro ser mojado por el lubricante natural del doncel, aquello era tan extraño y excitante que no pudo evitar llevar su mano derecha al hueco entre sus nalgas.

-¿Suele ser siempre así? -Preguntó curioso, a fin de cuentas JungKook era el primer doncel que conocía, así que era el primero y esperaba que el último con quién tuviera sexo.

-Sí si estoy muy caliente, si el chico que me va o voy a follar es tan guapo y está tan jodidamente bueno. -TaeHyung sonrió orgulloso, era alargador y no pensaba evitar mostrarlo. Sus dos dedos, índice y corazón, de la mano derecha entraron con una suavidad y facilidad al interior de Jeon haciéndolo soltar un gran gemido levemente agudo y roto por la sorpresa.

-Es...-Comentó TaeHyung sin saber bien que decir mientras movía sus dedos. -Raro, pero delicioso. -JungKook se estaba poniendo nervioso, ansioso más bien, sujetó su muñeca morena y lo obligó a salir de él. Con gracia y rapidez sujetó entonces su pene enfundado en ese preservativo para introducirlo en su interior húmedo y cálido.

-Joder, tan profundo. -Canturreó sintiendo sus paredes abrirse y adaptarse al gran falo de su niño bonito. Mismo niño bonito que creía poder correrse tan solo con la imagen de JungKook auto penetrándose.

-Nene aprietas. -Se quejó con placer, las paredes de él se cernieron más fuerte alrededor de su pene. -Lo estás haciendo a propósito.

-Sí. -Respondió simple y juguetón, sonriendo y comenzando un vaivén de sus caderas hacia delante y hacia atrás.

Los gemidos roncos y agudos mezclados no tardaron en hacerse escuchar. Ambos sudaban y estaban demasiado sensibles, viéndose con todas las luces del cuarto prendidas a la perfección y sin poder elegir que era más placentero.

Su propio placer o el ocasionarlo al contrario.

-Quiero más, más rápido TaeTae. -Demandó JungKook cuando sus piernas comenzaron a fallar al subir y bajar sobre su pene. Las caderas de Kim se elevaban para ayudarlo, pero el ritmo era lento para lo que ellos necesitaban en ese momento.

Hold On; de ricos y pobres (KookTae) (TaeKook) (NamMin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora