Más de 30 Días Shipp [Mono x Seven]

Día 32

Humano y vampiro
Temática: edad media
Personajes:
-- Mono 18 años
-- Seven ??? Años

[¿Contexto?, mi mamá me hizo ver crepúsculo y bueno le metí edad media así que, ojalá les guste,nomepeguen]

Correr, solo podía correr, ¿de qué huía exactamente?, De lo desconocido, solo podía escuchar como aquella cosa gruñia, soltando jadeos debido a lo mucho que corrió, ingreso a su casa, creyendo que era un lugar seguro, intento calmar su respiración, un viento frío apago cada vela de su hogar, quedo a oscuras, cuando en el segundo piso escucho ruidos, tapo su boca para evitar hacer ruidos, solo gateo a la cocina, ocultándose debajo de la mesa.

Unos pasos rechinantes por su piso de madera, eco de zapatos, Drácula lo había encontrado.

Aún le ardía la mordida en su brazo, joder ardía como si le hubieran pasado una navaja por ella, la sangre dejó de salir hace bastante tiempo ya que corrió como casi media hora del pueblo a su casa.

Los pasos se detuvieron en la entrada de la cocina, Mono quería llorar pero no podía permitirse el lujo de mostrar su ubicación

-- Crei que eras más astuto -- Monroe creyó que su sangre se congeló, algo con una fuerza sobrenatural, levantó la mesa y la colocó a un lado, Mono retrocedió, asustado, enojado, a punto de estallar de la impotencia, impotencia por no poder hacer nada contra ese conde.

La luz de la luna que ingresaba por su ventana mostró a un joven bastante atractivo, piel bastante pálida con traje elegante y esa condenada capa cliché de dracula, la voz de esa criatura era tan melodiosa pero del miedo Mono decidio permanecer firme y no ceder ante el encanto del otro.

-- Eres un humano intrigante, diste pelea, huiste y ahora estás asustado, ¿qué piensas hacer ahora? -- Seven si podía asustar pero sentir curiosidad por el más bajo.

-- ¡No se maldita sea!,¡Lo que haga no cambiará nada!... ¡Matame si quieres me da igual ya a este punto! -- grito con un nudo en la garganta, Seven se estaba aguantando la risa, le era divertido jugar.

-- No pienso matarte, me pareces interesante, digo, eres el primer humano que lucha contra mi sin usar una antorcha o un tridente, usaste tus propias manos y si, me lastimaste -- Toco su propia mejilla donde Mono le dio un puñetazo.

-- ¿entonces qué? -- Seven movió su cabello a un costado para que el humano lo vea a los ojos.

-- No te mataré, ni lastimare, a cambio de una cosa -- Mono sudo frío, cubriéndose el cuello, Drácula río ante ese gesto y negó. -- No tomaré ni una gota de tu sangre, a menos que tu quieras, deseo aprender sobre la ganadería y agricultura, y como eres granjero del pueblo, deseo aprender ese conocimiento. -- Se alejó un poco del pequeño humano quien trago duro y se levantó, Mono cubrió su herida para levantarse, respirando profundo sobre la situación actual.

Enseñar a un vampiro sobre ¿agricultura y ganadería?, tenia que bromear pero le vendría bien una mano extra, tuvo que aceptar.

-- Esta bien, pero el sol --

-- ¿qué posee el sol? -- arqueo la ceja, Noto la herida sangrante de Mono, de cierta forma sintió culpa y hambre pero solo miro el rostro del humano.

-- ¿acaso los vampiros no les lastima la luz del sol?

Seven se quedó callado por un momento, ¿en serio creían esa estupidez?.

-- No, no me lastima, pero al no tener suficiente melanina en la piel solo me coloca la piel roja, no me puede matar, y si piensas que el ajo es un repelente, no es así, solo que poseo un olfato más agudo que de un perro y me lastima su asqueroso aroma como la de una cebolla.

Suspiro aliviado, el vampiro tuvo que quedar a vivir con el humano, vistiendo como un jardinero o campesino para pasar desapercibido por los comerciantes que venían a los terrenos de Mono por sus productos, aprendió bastante en ese tiempo, aprendió a usar un tractor, cosechar, alimentar a los animales, su problema era uno.

-- Vamos Seven, la vaca no te pateara si la ordeñas -- dijo Mono agarrando un balde para ordeñar a su vaca favorito.

-- la última vez no salió bien.

-- ¿quién en su sano juicio se coloca detrás de un toro para ordeñarlo?, Te expliqué que las vacas poseen ubres no un pen-... ¿qué haces?

Seven se había sentado sobre la vaca, más bien flotando.

-- pensando, ¿cuánto tiempo llevo aquí?

-- Llevas apenas 15 días, y al segundo una gallina te picoteo. -- río Mono ante esa imagen.

-- Sabes, no eres tan desagradable como creí que serias -- Dijo Seven con intención de halagarlo.

-- Gracias supongo, ya ponte a trabajar que será hora de almorzar -- Seven no consumía productos humanos, podía pero se negaba hacerlo ya que no lo llenaba, por lo que Mono era su fuente de alimento, y una vez que bebía lo suficiente el pequeño siempre comía y descansaba.

Al final "No tomaré tu sangre a menos que tu quieras" si se cumplió por petición de Mono, Seven bebía su sangre para poder existir.

Ya al terminar su labor, Mono llevo a su "congelador" la leche para evitar que esta se eche a perder, una vez comiendo y bebiendo el jugo de naranja que aprendió hacer su nuevo amigo y compañero de trabajo.

Bajo un poco su ropa dejando su hombro descubierto, ya que allí había mejor circulación de sangre porque estaba cerca de la yugular.

Viendo el hombro de Mono lleno de mordidas se sintió algo mal por el humano ya que se encariño mucho con este, solo cerró los ojos para morderlo y escucho gruñir al contrario.

-- aún duele -- se quejó en voz baja, era como dos agujas filosas en su hombro, cuando termino limpio la sangre que caía para colocar bien su ropa.

-- Sigo sin saber porque te dejas morder, puedo estar sin comer por mucho tiempo.

-- la vida en una granja es muy agotadora en especial que tu haces los trabajos pesados, aparte siempre te quejabas de hambre, evito que mates así.

Ante eso tenía razón, gracias a que Mono logró controlar al conde, la gente podía disfrutar de las noches sin tener que poner hasta trampas para que el vampiro no entre.

Seven acaricio la cabeza de Mono, quien se dejó porque andaba comiendo otro sándwich.

-- Eres un humano realmente lindo -- murmuró para si mismo pero no sabía que el otro le escuchaba.

-- eso sí es un halago -- la química entre ambos fue creciendo bastante, en especial la confianza, cada noche se quedaban despiertos hasta tarde para ver las estrellas, Mono quedaba siempre dormido en el torso del vampiro mientras este seguía viendo el "cielo", un cielo en forma de humano pequeño y extraño.

Sin darse cuenta cayó en las manos del amor, ojalá sea correspondido.

[Me duele la mano, más de 1000 palabras, ojalá les haya gustado porque creo que haré un fanfic fe esto akdkskdj pinche mi mamá que me inspiró bien culero, aparte dibujare una escena de este capítulo, los amo, cuídense, no olviden amarme y viva Tony]