Entro a mi habitación, cerrando la puerta detrás de mí. Afortunadamente mis padres están fuera o de lo contrario tendría que escuchar otra conferencia sobre portazos y definitivamente no estoy preparada para eso. Caigo boca abajo en mi cama. Todavía enojado por la discusión que tuve con Harry en la escuela.
*flashback*
—Hola Harry. ¿Vendrás a la fiesta esta noche? Han pasado como 6 meses desde que rompiste con Isabella. Es hora de soltarse— dice Tom.
Harry se encoge de hombros en respuesta.
—No lo sé hombre. No estoy de humor, pero lo pensaré— responde simple.
—Está bien hermano. Espero verte allí, tengo que irme ahora. Adiós— Tom se despide y nos deja solos en los pasillos.
—¿Tu vas a ir?— yo le pregunto. Él niega con la cabeza.
—Creo que deberías ir. Es posible que veas a Chris allí, tal vez entonces no tenga que escucharte quejarte de no tener un chico todo el tiempo— dice molesto. Lo miro con la boca abierta.
—¿Por qué estás siendo tan grosero? Fue literalmente una vez y solo dije que Chris era un chico guapo y parecía realmente agradable. Nunca dije que estaba interesado en él— yo discuto. No sé por qué está siendo así.
—Primero, fue tres veces y segundo, esta mañana solo hablaste de Chris y lo vi mirándote. Definitivamente está interesado en ti— dice, su tono es mucho más molesto.
—Oh, no puedes quejarte. Antes de que salieras con Isabella, mientras salías con ella e incluso después de que rompieron solo hablabas de ella. Todo el tiempo. Nunca me quejé, ni una vez. Hablo de Chris un poco y actúas así— me pongo más y más furiosa a cada segundo. No tiene derecho a quejarse de esto.
—Al menos pude salir con ella, oh, y con Sophia antes. Simplemente no puedes conseguir un chico. Así que esto no se detendrá pronto— me siento a punto de llorar pero mantengo mis lagrimas dentro por ahora. Harry nunca ha actuado de esta manera conmigo. Pensé que nunca lo haría.
No digo nada y me alejo de el.
*tiempo actual*
Suspiro fuerte, pensando en la discusión. Harry y yo nunca hemos tenido una discusión como esa antes, y odio decirlo pero está me esta afectando más de lo que me gustaría admitir. Tal vez porque puede que me haya empezado a gustar durante los últimos meses.
Me levanto de la cama, decidiendo tomar una ducha para sentirme mejor pero me detiene el timbre de la casa. Probablemente sean mis padres, aunque dijeron que hoy volverán tarde.
Camino hacia abajo y abro la puerta sin mirar quien es, Harry esta parado allí con una caja de pizza y dos botellas de cerveza.
—Será mejor que sea una pizza de disculpa y no sólo una estúpida pizza normal.
Casi esboza una sonrisa y mira hacia abajo.
—Es una pizza de disculpas— murmura.
—Bien— abro más la puerta para dejarlo entrar.
—Mira, lo siento por todo lo que dije— comienza mientras tomo las caja y camino de regreso a mi habitación. Me siento en la cama, saco un trozo de pizza y le doy un mordisco, Harry entra a mi habitación unos segundos después, con una mirada triste en su rostro.
—Realmente lo siento Freya. No quise decir nada de lo que dije— dice. Asiento con la cabeza y hago un gesto hacia el lugar vacío de la cama, él viene y se sienta. Agarra la caja de pizza de entre nosotros y la deja a un lado, sentándose más cerca de mí. Comienza a acariciar un mechón de mi cabello— Di algo— habla bajito, un puchero formandose en sus labios.
-Supongo que ahora no hablaré de Chris— respondo, frunce el ceño ante mi respuesta.
—No, no, habla de él, no diré nada. No sé por qué te critique. Sé que siempre me escuchaste hablar sobre Isabella durante todos estos meses, yo no tenía derecho a decir lo que dije. Tu puedes conseguir a todos los chicos que quieras, eres tan increíble, tienes un buen corazón, te preocupas por los demás. Ser hermosa es solo un pequeño detalle en todo eso.
Sonrió feliz cuando termina de hablar. De repente me vuelvo muy tímida ante el último comentario y aparto la mirada.
—Hey hey hey— dice en voz baja, poniendo su dedo debajo de mi barbilla para mirarlo— sé que te vuelves tímida pero realmente eres hermosa Freya— su voz ha bajado un poco y su rostro está peligrosamente cerca del mio.
No tengo tiempo para procesar nada antes de sentirlo inclinándose, coloca un beso a un lado de mi boca. Se aleja solo unos centímetros y el aire que nos rodea se vuelve repentinamente más caliente.
—Realmente me gustas— Harry susurra.
Se me cortan los pulmones con su confesión. Me inclino y sello el espacio entre los labios antes de poder detenerme. Parece sorprendido por mis acciones, pero me corresponde dé todas maneras. Sus manos se extienden para acariciar mi rostro y mi mano sube a su cuello.
Él me acerca más y me besa con más fuerza, cambiamos de posición, quedo sentada a horcajadas sobre él. Sus manos descansan en mi cintura y las mías en su cabello, nos alejamos, sin aliento. Dejo caer mi cabeza sobre su hombro y lo escucho reír mientras envuelve sus brazos alrededor de mi torso y cae de nuevo en la cama.
—¿Eso significa que estoy perdonado?
—Lo estas Harry.