48.

930 34 0
                                    

Estoy en mi período. Lo cual odio porque cada maldita parte de mi cuerpo simplemente duele. Mis pechos, la parte inferior de mi espalda, mi abdomen, mi cabeza, absolutamente todo. Apesta. Ademas, soy demasiado perezosa para hacer algo porque durante los dos primeros días, el flujo de sangre es increíblemente fuerte.

Y como soy demasiado perezosa para hacer cualquier cosa, simplemente me quedo acostada en mi cama mirando disney o buscando algo nuevo para ver. Como justo en este momento. Estaba pensando ver algo de Marvel, aunque ya he visto todas las películas que existen. Además, no hay muchas películas de superhéroes. Mis únicas opciones son Marvel y DC, y también he visto todas las películas de DC.

De todos modos, tengo mi período y todo me duele tanto que me merezco descansar todo el día y básicamente no hacer nada hasta que los calambres se detengan. ¿Por qué los hombres no pueden tener períodos también?

Decido ver Ant-man and the wasp, que es una película demasiado subestimada en mi opinión. Sin embargo, no es noche de cine hasta que hay algo para comer y como me da pereza levantarse, llamo a Harry, mi novio.

—¡Haaaaarry!— grito, él aparece en la puerta casi de inmediato.

—¿Si, nena?

—Estoy en mi período y tengo calambres y no quiero levantarme y todo me duele y tengo hambre. ¿Podrías ser un bueno chico y traerme las papas de la alacena?— digo dulcemente, batiendo mis pestañas. Harry sonríe ante mi pedido.

Hemos estado juntos durante más de un año y él sabe lo mal que me pone el dolor de ovarios. Me ha sugerido que vuelva a usar las pastillas anticonceptivas, pero yo no quiero porque me hacen subir de peso.

—Está bien, bebé— él sonríe y yo le agradezco pronunciando un "te amo" mientras desaparece para ir a buscar la comida.

Cuando regresa, tiene lay's en la mano, un paquete de m&m's, agua y una almohadilla térmica. Harry me entrega todo y luego se sube a la cama y descansa a mi lado.

—Gracias, H. Eres tan dulce conmigo. Te amo demasiado— me aferro a él y dejo besos en su cuello y mejilla. Luego le beso los labios repetidas veces.

Harry es tan bueno conmigo. Solo le pedí las lay's, pero él consiguió otras cosas que podría querer y necesitar. De todos mis novios anteriores, él es el mejor. Los demás ni siquiera se comparan. No podía entender por qué el amor era tan diferente con él hasta que descubrí que no había sido amor con nadie más.

Solo hemos estado saliendo durante más de un año, pero estoy segura de que él es el indicado.

—Lo sé, cariño. Te amo más. Ahora, ¿qué estamos viendo?— él agarra las papas y las abre, metiéndose una cuantas en la boca.

—Ant-man and the wasp, porque está subestimada y Paul Rudd es el amor de mi vida— respondo.

—¡Oye! ¡Acabas de decir que me amas!— Harry hace pucheros, fingiendo ofensa.

—Es broma, sabes que eres el único— le toco los hoyuelos y volvemos nuestra atención a la película

Aunque se que no ayuda a aliviar el dolor, coloco la almohadilla térmica sobre mi estómago. Pasan unos minutos y como siempre, la sensación no cede. Aprieto las piernas y me enrosco en posición fetal. El cambio repentino atrae la atención de Harry.

—¿Qué pasa? ¿La almohadilla no funciona?— pregunta, la preocupación es evidente en su rostro y asiento en confirmación— ¿Qué puedo hacer, Blaise? Dime amor— habla mientras se agacha para poder ver mejor mi rostro.

—Nada, H. Tal vez solo necesito dormir un poco. Eso generalmente funciona— digo encogiéndome de hombros.

—O tal vez... ¿podemos tener sexo?— sugiere, sonriendo.

𝘩𝘴 • 𝘪𝘮𝘢𝘨𝘪𝘯𝘦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora