Capítulo 29

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Kyuhyun's POV

Abrí los ojos lentamente mientras sonreía, no me hacía falta recordar dónde estaba pues me acordaba perfectamente. Sophie yacía hecha un ovillo bajo las mantas con un poco de pelo hecho un desastre sobresaliendo, eso era todo lo que veías de ella. Yo estaba con la ropa que me puse anoche antes de venir a verla de nuevo. Tenía pensado dormir en mi casa, pero Sophie me prohibió salir porque era muy tarde. Se preocupaba por mí, ¿no era bonito? Casi se me salió el corazón cuando lo dijo.

Bajé de la cama y la rodeé hasta llegar al lado de Sophie. Por aquí se veía que había dejado un poco de cara al descubierto para respirar. Estaba tan tranquila, tan llena de paz...me daban ganas de volver a ponerme a dormir a su lado pero quería aprovechar esta oportunidad de observarla sin que me preguntara que qué hacía.

Decidí ponerme manos a la obra y me dirigí a la cocina, no era bueno con la comida pero haría mi mejor esfuerzo para prepararle un desayuno especial para que cuando despertara, lo tuviera todo a su gusto.

Pero claro, como el desastre que era, al final solo hice chocolate y tostadas con mantequilla, encima no se me quemaron de milagro. Eyael vino a mi encuentro y se encaramó a mí como queriendo distraerme.-Lo sé, este desayuno es tan desastroso como yo pero vamos a llevárselo a tu dueña. Menos mal que no te reirías de mí en caso de que me tire la bandeja a la cabeza. O sí, a lo mejor en tu mente perruna piensas "Los hombres humanos son estúpidos, es más fácil ir a olerle el culo a la hembra".

Me reí solo mientras caminaba por el pasillo y abría la puerta de la habitación con un pie. Para mi sorpresa Sophie no estaba en la cama como antes, sino que estaba sentada y con el móvil.

-Buenos días-dijo sin apartar la mirada de la pantalla-. Celine me ha deseado feliz Navidad y me ha preguntado por el baile, ¿crees que debería contárselo ahora o cuando vuelva?-preguntó girando la cabeza hacia mí y yo mientras dejaba la bandeja en la mesita de noche- ¡Oh! ¿Eso son tostadas?

-¿Porqué lo preguntas? ¿Tan mal las hice que no lo parecen?-contesté.

-No, señor agradable-dijo con una mueca-. Es que tengo hambre y quería asegurarme de que fuera algo comestible.

-No pongas esa cara, era broma. Estoy más orgulloso de estas tostadas que de las anteriores. Ah, y feliz Navidad.

-Feliz Navidad-contestó- ¿Cuántas tostadas hiciste?

-No muchas, así que no te preocupes que no te he gastado todo el pan que tenías en la cocina.

-Tampoco me hubiera importado mucho-dijo acercándose a por el desayuno. Pero antes de que cogiera algo para comer la agarré con suavidad del brazo y la miré. Tenía pensado comprobarle la fiebre pero estuve paralizado más tiempo del necesario por culpa de su maravilloso aspecto de recién levantada. El pelo hecho una nube alrededor de su cabeza, los labios y las mejillas rosadas...notaba como me iba acercando cada vez más solo que en vez de tomar rumbo a su frente, mi boca anhelaba encontrarse con la suya, tanto que dolía, como si fuera una necesidad y ahora que la tenía tan cerca de nuevo...

Pero no sé que hice o qué me dio de repente porque directamente posé los labios en su frente.

Sophie rió. Aquel sonido tan característico que no se podía comparar más que con la fresca sensación de un nuevo amanecer o de las gotas de lluvia al caer sobre tí, llevándose todo lo malo y llenando tu cuerpo de felicidad. Esa risa era música para mis oídos. Sin poder contenerme la abracé. Noté cómo se tensó debido al gesto pero en seguida se acomodó y me correspondió.

-¿Estás...estás bien hoy?-pregunté. Ahora estaba incómodo porque me daba vergüenza estar así.

-Creo que esa pregunta debería hacerla yo-dijo-. ¿Te ocurre algo?

-Creo que no podría estar mejor-dije separándome de ella a duras penas-. ¿Qué quieres que hagamos hoy?

-Por lo pronto quiero desayunar-dijo cogiendo una tostada antes de que pudiera detenerla.-Y después ver una película.

-¿Otra vez?

-¿Qué quieres? No puedo salir, estoy enferma y no pienses que te voy a dar clases de cocina hoy, no tengo ganas.

-Es que yo quería jugar...-dije haciendo un puchero.

-¿Xbox otra vez?

-Xbox otra vez-repetí.

Lo meditó unos segundos y me miró.- Vale, pero antes vemos una peli.

Suspiré y asentí.-De acuerdo, ¡pero no Frozen!

Ella rió y se atragantó con un trozo de pan por lo que bebió un trago de chocolate.-Ya la veré con Leeteuk.

***

Estaba esperando a Sophie en el sofá. Ella se estaba duchando y de repente llamaron a la puerta así que fui a abrir.

-¡Feliz Navidad, cuñado!-gritó aunque lo de cuñado lo dijo bajando la voz.

Kyu u are the one(Kyuhyun Fanfic)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora