Bajé rápidamente las escaleras del metro, si ni lo cogía rápido iba a llegar tarde a trabajar.
En cualquier otro momento me hubiera dado igual tener que esperar al siguiente tren, incluso mi jefa lo hubiese entendido, pero en época de Navidad una librería no podía perder un segundo cerrada.
Corrí entre el mar de gente, apenas me quedaba tiempo. Tenía tanta prisa que choqué con alguien, pero solo me dio tiempo a murmurar una disculpa y a recoger las dos carpetas que llevaba y se cayeron por el pequeño impacto.
Y con un último esfuerzo entré al tren.
Normalmente no tardaba tanto en salir de mi casa, pero al parecer mi despertador estaba de vacaciones.
Miré el interior del vagón y por supuesto no había ningún asiento libre, nunca lo había, así que estuve de pie todo el trayecto.
Al llegar, salí tambaleándome. Los transportes siempre me dejaban algo aturdida, sobretodo cuando iba de pie. Pero al salir al aire libre respiré un poco y me recompuse. Si hubiera estado en otro lugar, habría tomado una profunda bocanada de aire, pero en Londres eso no era posible.
Caminé a paso ligero hacia el lugar donde trabajaba, a parte de que iba muy justa de tiempo temía que se pusiera a llover de repente y me mojara. Llegué y Celine me saludó desde donde estaba, para mi sorpresa no estaba tras el mostrador. En ese lugar estaba mi hermano Leeteuk.-¿Teuk? ¿Qué haces aquí?
-Tu jefa me llamó esta mañana preguntando dónde estabas, asumí que te quedaste dormida y vine a cubrirte un rato. Ya sabes que yo vivo cerca.
-¿Y no me avisaste? No me habría pegado esta carrera...
Mi hermano mayor me dio un capirotazo en la frente.-No quería que llegaras muy tarde, tontita. Y no te quejes tanto que voy a quedarme contigo toda la mañana.
-Vaya por Dios, menuda ayuda.-Bromeé mientras dejaba mis cosas. Tras eso busqué a Celine.-Celly, te dejé bajo el mostrador una carpeta amarilla, una amiga me pidió que te dejara el curriculum.
-Tranquila Sophie, lo leére cuando pueda. Por ahora prepárate que la librería empieza a llenarse de gente.
-Sí, por cierto, ¿llamaste a Leeteuk por mí o por otra cosa?-. Pregunté alzando las cejas. A pesar de ser dueña de una librería, Celine no era para nada como podías imaginar. No era una mujer de cuarenta o cincuenta años, tenía unos años más que yo, y yo tenía 25. Normalmente no llevaba maquillaje, porque con sus ojos verdes y su pelo castaño era suficiente para hacerla bastante atractiva.
-No digas bobadas y muévete.-Contestó riendo.
-Vale, vale ¡Pero aún no me explico que Teuk quiera quedarse a ayudar!
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Kyu u are the one(Kyuhyun Fanfic)
AcakEsta es la historia de cómo dos completamente desconocidos se conocen por un malentendido que les cambia la vida. La historia de un amor navideño que durará todo lo que mi imaginación y la vuestra quieran ;)