Kyu u are the one(Kyuhyun Fanfic)

Capítulo 15

Kyuhyun's POV

No sé porqué hice lo que hice pero cuando me quise dar cuenta ya tenía su suave mano cogida, supongo que respondí a una pequeña parte de lo que quería hacer con Sophie. El enfado que tuve tras haberla visto junto a Siwon se me pasó en el momento en el que ella le dejó de lado y me prestó atención a mí. Después me puse aún más contento porque la hice reír y yo había sido el causante. Pero ninguna sensación se podía comparar a tenerla de la mano.

-¿Qué ha sido eso, Kyu?-Kyu...me encantaba cuando me llamaba así.

-No sé, quería salir ¿tú no?

Se encogió de hombros.-Me daba igual pero me lo pudiste haber dicho en vez de sacarme así.

-¿Estás enfadada?-le pregunté con una sonrisa.

-No-contestó mirando hacia otro lado.

Sin soltar su mano un segundo, aunque ella tampoco se había quejado de eso, me acerqué a ella y le aparté el flequillo de la cara. Con el viento todo el pelo se le había puesto delante.

-¿Qué haces? Kyuhyun, hay algo que se llama espacio personal y parece que no estás al tanto-replicó intentando hacer una mueca de disgusto con sus hermosos labios.

-El viento te había tapado toda la cara...-le respondí tras quedarme unos segundos en blanco-.

Arqueó una ceja.- Bueno, yo tengo que irme a mi casa, en dos horas será momento de comer y seguramente mi hermano venga así que tardaré un poco en cocinar-dijo soltándome la mano. En el momento en el que lo hizo no solo sentía la mano fría sino que noté como una parte de mí se desvanecía. Ese vacío...ese vacío y mucho más sentiría si la dejaba ir ahora.

-¡Espera!-la cogí suavemente del codo. Se giró para mirarme con curiosidad- ¿Vas a encerrarte ya en tu apartamento hasta mañana?

-¿Y tú que sabes si no voy a salir más?-replicó molesta. Dios, si que se enfadaba rápido esta chica.

-No puedo decir que te conozco para saber eso porque efectivamente casi no te conozco, pero estoy casi seguro de que vas a entrar a tu casa y no vas a querer poner un pie en la calle.

-¿Y qué quieres que haga? Tengo más cosas que hacer en casa que aquí fuera.

-¿Cómo que no?-me señalé con la otra mano-. Estar conmigo es una cosa importante.

-Claro. Venga, adiós-contestó poniendo los ojos en blanco y girándose para irse.

-¡Vale, vale, vale! ¿Y si...te acompaño al centro comercial? ¿O vamos por alguna calle llena de tiendas?-no se me ocurría nada más y si se iba me iba a dar cabezazos contra una farola por tonto.

-¿Se puede saber porqué insistes tanto?

-Porque...hmm ¿me aburro?-mentí. No podía decirle que era porque necesitaba tenerla conmigo.

-Kyuhyun, es Londres. Hay cientos de sitios para divertirse solo.

Auch. Eso dolió.

-Y también para divertirse con alguien, por favoooor-pedí con una carita de cachorro un poco exagerada, pero al parecer resultó.

-¡Está bien! Con tal de que pares te acompaño, ¿a dónde quieres ir?

-Me da igual-dije encogiéndome de hombros y era la verdad.

-Pues vamos, ya sé yo a dónde ir. Y si no te gusta te aguantas-me dijo y comenzó a andar. Quería cogerla de la mano o de la cintura pero no me atreví a hacerlo por si esta vez me negaba el contacto. Maldita la hora en la que inventaron el "espacio personal"

***

Al final me llevó a una tienda en una de esas calles que aún conservaban el encanto del Londres antiguo. Era una tienda de antigüedades de todo tipo, desde collares victorianos a la ropa extravagante de los años 70 y 80. La chica de la tienda tenía el pelo azul claro y saludó a Sophie como si la viera a menudo, y probablemente era así.

Sinceramente no me costaba imaginarme a Sophie en un sitio como este o en una biblioteca antigua. Ella tenía su esencia juvenil con un toque de nostalgia, se movía entre las antigüedades como si fueran viejos amigos a los que llevaba tiempo sin ver.

-Venga, vamos-me dijo al cabo de un rato. Se despidió de la chica y salimos.

-¿No has comprado nada?-le pregunté porque se había fijado en varias cosas, sobretodo en un reloj de bolsillo antiguo.

-No, me gusta mucho la tienda pero no suelo comprar porque son buenas antigüedades y caras. Vengo muchas veces a ayudarles a catalogar algunas cosas-me explicó.

-¿Sabes sobre esas cosas?

-Hice un curso cuando llegué a Londres.

Claro, porque tuvo que dejar sus estudios en Holanda...

-¿A dónde quieres que vayamos ahora?-le preguté de manera dulce.

-De verdad Kyuhyun, quiero irme a a casa-contestó ella con tono suave.

-Está bien-suspiré resignado-. Solo quería que pasaras un buen día.

-Te prometo que te contaré mis secretos para pasar un buen día-dijo con una sonrisa.

-Me siento como si fuera una chica y me fueras a contar el último gran rumor-comenté, y la volví a hacer reír.

-No hace falta que te cuente nada ¿ves? Ya me haces reírme como una foca retasada.

Imité a una foca retrasada lo mejor que pude consciente de que para el resto de la gente parecía un bobo pero me daba igual, porque ella era feliz, feliz conmigo.-¿Me dejarás al menos acompañarte a casa?

-Bueeenoo...como te has portado bien te dejaré.

Sonreí y pusimos rumbo a su apartamento, esta vez caminé más cerca de ella pero sin agarrarla por ningún lado. Igualmente estar lo más cerca de su "espacio personal" era suficiente para sentirla un poco cerca, pero solo un poquito.

El camino fue corto, demasiado corto y cuando me fijé ella ya se estaba despidiendo de mí en el portal del edificio.

-Oye, ¿me estás hechando sin ni siquiera haber entrado a tu casa?

-Lo tenías planeado ¿no? Venir conmigo hasta aquí y luego usar tus trucos para subir.

Me puse la mano en el corazón con un poco de dramatismo.-No puedo competir contra una mente tan privilegiada como la tuya, me destrozas los planes así como el corazón.

-Anda bobo, sube y ya quédate a comer-dijo mientras subía las escaleras. La seguí.

-¿Necesitas que te ayude?-le pregunté.

-Ya veré, depende de lo que tenga pensado preparar-respondió.

Llegamos a su puerta y sacó las llaves, mientras abría se oían los ladridos de Eyael anunciando la llegada de su ama.

-Colega cállate o la vecina se va a quejar y tú no quieres eso ¿no?-le preguntó al perro-. Qué demonios, tú ni te enteras. O sí y lo haces para fastidiarme.

-¿Sophie?-preguntó una voz un poco conocida desde la cocina. Cerré la puerta y en la entrada apareció el hermano mayor de Sophie. La última vez no me había fijado pero seguramente sería mayor que yo y también notaba algunos rasgos que compartían los hermanos.

-¡Teuk!-exclamó ella y corrió hacia él. Pensé que iba a abrazarlo pero en lugar de eso le desordenó el pelo-, ¿te acuerdas de Kyuhyun?

Él asintió.-¿Cómo olvidarme? Es un gusto, yo soy Park Jung Soo pero todos me llaman Leeteuk y a veces ella me llama Jung Soo pero solo cuando se enfada-me dijo sonriendo. Al parecer Sophie no solo se molestaba mucho conmigo.

-Yo, bueno como ya sabes yo soy Kyuhyun-le contesté. Esta mañana pensé que debería hacerme amigo del hermano de Sophie y al final no me hizo falta ni buscarlo, ¿podía salirme algo mejor hoy?