Tonnevill: El legado de los 7. (Condenados 1)

Capítulo 28

"El recuerdo de las cosas pasadas no es necesariamente el recuerdo de las cosas tal y como ocurrieron."

—Marcel Proust. 

Diane Holmberg. 

Era el segundo día de Kaethleen en el hospital y no había ido a verla, cinco días desde que le había deseado morir de una sobredosis y los mismo que Lilieth llevaba fuera. 

Esperaba verla hoy en el instituto o los entrenamientos para disculparme con ella, pero no ocurrió así. 

Ni siquiera River había estado presente en el entrenamiento. 

Sólo éramos Thomas, Carter, Paxton, Emiliane y yo. 

Caleb no nos informaba acerca de la salud de Kaethleen o el por qué había dejado faltar a River y Rixton. 

Realmente daba órdenes y hacía explicaciones de lo qué debíamos hacer.

Se veía cansado, me apenaba su posición, ya que cuando Lilieth llegara y le informara del altercado, se iba a molestar con él y Kaethleen, asumía que no le importaría saber que Kaethleen no consumió por su cuenta. 

—Les dije hace quince minutos que podían irse ¿por qué no se van? — preguntó Caleb. 

Caleb estaba limpiando una daga. 

Hoy había sido un día distinto, en vez de pelear cuerpo a cuerpo como solíamos entrenar, nos enseñó a defendernos mejor con las dagas, disparar y huir. 

Sabía que los cinco decidimos quedarnos porque habíamos creado un vínculo con Caleb, o al menos el inicio de uno.

Me preocupaba su reacción ante la situación, Caleb realmente se dejó llevar por sus impulsos y sus pensamientos, no se detuvo a analizar, no mantuvo la calma, no fue él mismo. 

River había enviado un mensaje de texto en nuestro grupo, pidiendo que también apoyaramos a Caleb, qué no le dejáramos solo e intentaramos cuidarle. 

Siendo Caleb, como él era, para haber reaccionado de esa manera tan agresiva, el ataque hacía Kaethleen debió afectar de sobremanera. 

—¿Estás bien? — preguntó Thomas. 

—Sí, ¿y tú? — respondió Caleb. 

—¿Estás bien de verdad? — preguntó Thomas. 

Caleb asintió con la cabeza sin mirarle. 

—Sabes qué el ser mayor y estar a cargo no significa que debas actuar indiferente con la situación — dijo Carter — Es tu hermana menor, obviamente va a lastimarte Caleb, no debes pretender qué no es así. 

—¿De qué va a servir qué lo admita? — preguntó Caleb — El daño está hecho y Kaethleen debe enfrentarse a las repercusiones de ello. 

Sentía la necesidad de abrazarle, aunque supiera que aquello no arreglaría nada de su carga mental, pero tenía las ganas de hacerlo. 

Me quedé de pie en mi sitio.

—Va a servir para ayudarte a ti — dije — Tal vez no revierta la situación, pero te ayuda a desahogar lo que sientes y quizás puedas ver que nosotros podríamos entender, Kaethleen es tu hermana, es importante para ti, para todos, yo… Yo realmente la quiero ¿Sabes? Es mi mejor amiga y entregaría todo de mí por cuidarla también, dejaría mi orgullo de lado por pedirle perdón, también me duele Caleb, tal vez no como a ti, tal vez a Emiliane le duele de una forma distinta a mí, pero a todos nos importa también y nos importas tú y el cómo te sientes, tus sentimientos son validados.