ANNIE LEONHART ! アニ・レオンハート (2/2)

3.6K 292 140
                                    

advertencia: contenido sugerente.

La tarde de ese día cayó, ya te habías duchado y ahora estabas en una mesa en el comedor junto a Ymir, Reiner y otros más.

Hasta ese lapso de tiempo no habías visto por ningún lado a Annie, por lo que esperabas ansiosamente qué entrara por aquella puerta del lugar.

— ¿Es a Annie a quién esperas, dulzura? — Cuestionó Ymir juguetona, notando tus movimientos. Ambas eran amigas cercanas, así qué no le prestaste atención al cómo te nombró.

— ¿Uh? Sí, quiero decir, no la he visto desde el entrenamiento. — Respondiste tranquilamente. — ¿Sabes dónde está?

Ymir hizo una sonrisa maliciosa mientras pasaba un brazo por tu hombro.

— No realmente, pero quizá podría estar en la habitación qué comparto con ella... — Soltó despreocupada. — Esperando una noche de sexo de reconciliación.

— ¡Dios, Ymir! — Regañaron Christa y tú al unísono mientras Reiner empezaba a reír abruptamente.

Estabas con el rostro visiblemente rojizo por aquel comentario tan desvergonzado de la más alta y estabas por formular respuesta alguna cuando la puerta del comedor se abrió dejando ver a Annie entrando.

— O talvez no. — Ymir soltó una carcajada soltándote con su brazo.

Sólo te limitaste a mirarla con una ligera molestia a la par en qué te levantabas de tu lugar dirigiéndote a donde tu rubia novia estaba sentada.

Cuando llegaste hasta la mesa qué Annie compartía junto a otras chicas, qué siendo sincera, realmente no conocías de mucho pero eso no te importó en lo absoluto; te sentaste a su lado y la miraste.

— Annie. — Saludaste acomodándote para comer.

Ella ni siquiera te devolvió la mirada, realmente sólo hizo un ruido dándote a entender qué te había oído llegar.

Suspiraste sin saber qué decirle, y es que lo cierto es qué aunque lo supieras, no podías decírselo en ese momento en donde estaban junto a los demás, ya que lo más probable es qué no te prestara atención o no te diera respuesta alguna.

Empezaron con la cena tranquilamente pero no tenías mucha hambre por lo qué dejaste de hacerlo después de comer una ligera porción; bajaste la mirada sumida en tus pensamientos, siendo qué al instante notaste una de las manos de Annie dentro del bolsillo de su sudadera.

Acercaste una de tus manos allí, ingresándola en el pequeño espacio y tomando entre tus delicados dedos la mano de ella, entrelazándola.

Tu amada te miró sorprendida por la acción pero pareció no importarle porque volteó su vista nuevamente hacia las chicas de la mesa qué mantenían una charla amena a la qué tú no le ponías atención.

Sentiste un pequeño avance pero eso era lo de menos; la cálida sensación de tener sus manos unidas te resultaba muy cariñosa y amabas mantenerlas así.

— ¡Annie! Esa técnica del entrenamiento de hoy fue muy buena, ¿quién te la enseñó? — Escuchaste qué preguntó una chica pelirroja.

— Mi padre. — Respondió sin más.

— ¡Vaya qué es genial!

— No tanto como ella a punto de enfrentarse a Mikasa, ¡yo no podría hacerlo! — Soltó una pelinegra. — ¿Porqué lo hiciste tú?

— Nada en particular. — Articuló tu novia mientras soltaba tu mano y alejaba la suya recárgandose con ella en la mesa.

Sentiste el vacío de su bolsillo por lo que sacaste tu mano de ahí algo entristecida.

GIRLS ! SHINGEKI NO KYOJINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora