El mediodía caía durante la vuelta de una expedición, una qué había sido (y aún lo era) sumamente tranquila y sin preocupaciones, sin embargo, alguien no lo veía así y estaba apunto de colapsar.
____ veía, junto a algunos de sus subordinados, como la otra líder de escuadrón arriesgaba su vida con el único fin de llevarse a un titán en la vuelta a las murallas.
La castaña más baja sentía la vena de su sien a nada de salirse de su cabeza de tan sólo ver a su novia haciendo tal cosa, sin poder detenerla.
- ¡Hange! ¡Hange!- Gritaba ésta encima de su caballo a fin de hacer reaccionar a la mayor.
- ¡H-Hange-san, creo qué debería dejarlo!- Decía Moblit, el sub-líder del escuadrón y también asistente de Hange.
Hange sólo dejaba pasar las llamadas de atención de su amada y sus compañeros, ya que en verdad quería lograr capturar a ese titán qué ella misma había estado provocando para ser perseguida y llevarlo consigo.
El titán, como a su naturaleza refiere, le lanzaba sus manos a fin de atraparla fallando en el intento. Sin embargo, el caballo de Hange parecía no aguantar más, estaba claro, habían estado dos días fuera y apenas descansaron un par de horas, agregándole qué ahora el animal estaba siendo forzado a una marcha de persecusión.
- O-Oh, vamos, amigo.- Animó Hange a su corcel con un leve toque de nerviosismo, pues ahora caía en cuenta qué la velocidad estaba siendo disminuida.
El titán en segundos parecía estar más cerca de alcanzarla.
- ¿Qué está haciendo la líder?- Cuestionó confuso algún soldado del escuadrón mirando con distancia la situación de la misma.- Está siendo mal momento.
- Parece ser qué su caballo se queda sin energía.- Respondió lentamente Moblit con inseguridad.
- ¡Será comida de titán como la superior no salga de ahí!- Exclamó otro soldado con terror.- ¡Realmente ella está loca!
Nuevamente, ____ se percató de ello, con una creciente angustia en su ser. Si bien ella amaba la pasión qué tenía su novia acerca del conocimiento de los titanes, también sabía que ésta misma podía ser su propia perdición.
- Maldición.- Soltó apresurando el paso de su caballo para ayudar a la mayor.
Ésta por su lado, seguía tratando de, ahora, huir de aquel titán que tanto anhelaba, tenía presente el riesgo de su vida.
En un momento de esos, estando tan cerca de su acechador, éste lanzó una enorme mordida tratando de alcanzarla. Hange rápidamente esquivó el ataque moviendo el caballo a un lado.
La chica más baja que ella sintió por un breve momento, talvez casi imperceptible, como su alma la abandonaba de su propio cuerpo para después volver a el. La angustia qué le provocaba el peligro en el que corría su amada era demasiado alto.
Entonces llegó a su lado, distanciada sólo por un par de metros, con el fin de no provocar al mismo titán.
- ¡Idiota! ¿Qué demonios se supone qué estás haciendo?- Gritó una desesperada ____.
- E-Eh...- Soltó Hange, sorprendida por las palabras de la castaña a su lado.
- ¡Salta aquí!- Volvió a gritar ____, quién se acercaba con cautela y velocidad a ella para recogerla de semejante situación.
La más alta la miró en duda, pero al ver qué su novia mostraba una mirada seria y firme, se decidió por hacerlo. Cuando ____ se acercó aún más, de un movimiento se logró equilibrar encima de su caballo para acto seguido saltar de él, quedando ahora en el caballo de su amada.
Rodeó la cintura de la más baja, con el fin de evitar caerse de éste y también expresar un gesto de alivio al estar a salvo.
Lo cual su propio caballo no podía emitir, pues yacía muerto por aplastamiento del titán qué segundos antes había caído asesinado por Moblit, después de qué ella saltara de él.
- Mi caballo...- Mencionó la recién rescatada con tristeza volteando hacia atrás.- Le tenía cariño.
- Al diablo con eso, Hange.- Respondió ____ con un tono bastante molesto qué la otra no tardó en percibir.