El amor es complicado y se que no es la primera vez que lo escuchas, es tan complejo y al final alguno de los dos termina destrozado, generalmente. Cuando estas con alguien por varios meses o varios años no puedes imaginarte una tarde sin verlo, una mañana sin recibir un "Buenos días" o una noche sin abrazos o besos ocasionales. Es difícil soltar, soltar los momentos que significaron mucho para ambos, dejar ir esas sonrisas y platicas hasta la madrugada. Cuando te rompen el corazón es difícil seguir, no puedes creer que esa persona tan especial te haya roto en mil pedazos, pero cuando tu eres quien lo rompe es completamente diferente. ¿Cómo puedes lastimar a esa persona? A esa persona que aun te ama, quien esta dispuesto a nadar mares o subir montañas por ti, quien aun te llama por apodos tiernos, es un horrible sentimiento.
Ambas partes tienen su dolor, uno mas fuerte que otro pero al final siempre sanara. Esa persona que te arrebato lagrimas después la recordaras con una sonrisa, el encontrara a alguien más y será feliz, y eso esta bien porque tu también lo harás.
Mario se fue y la rabia que había dentro de mi se esfumo, ya no existía ese chico mentiroso, solo había un chico que cometió un error que no es justificable, ese chico que estuvo a mi lado en mis días oscuros, ese chico que hizo latir mi corazón. Fue un adiós, pero no para siempre. Lo que hizo no estuvo bien, pero el siempre tendrá un pedazo de mi.
Salió el primero del baño y yo solo seguía sentada en el sucio y frio piso pensando sobre enamorarse de nuevo, da miedo hacerlo después de descubrir un secreto tan fribolo, pero siempre llega alguien mejor. Entregarme a Vinnie es darle la oportunidad de poder lastimarme, de poder tomar mi corazón recién reconstruido y solo pisarlo varias veces, eso asusta pero en el fondo se que no lo hará.
Volver a enamorarme es fácil, pero volver a estar con alguien es lo complicado. Antes de ver a Mario me sentía completamente lista, pero hoy cuando apareció frente a mi me hizo saber que aun no lo estaba. El movió mi mundo por mucho tiempo y no es fácil olvidar todo eso.
Sali del baño cinco minutos después, respire profundo y masajee mi rostro para borrar rastros de lagrimas. Llegue a la cancha y ya todos estaban en posición para recibir el reconocimiento. Debería de estar emocionada, extasiada de haber ganado el campeonato que tanto significaba para mi, pero siento que me falta algo, que me falta alguien. Miro las gradas y mi familia me regala una cálida sonrisa, pero no veo la sonrisa de ese chico rubio y tatuado. La tristeza dentro de mi es bastante grande, el shock de todo lo que paso aún continua en mi sistema. Subo al podio junto mis compañeras y escuchamos las palabras de los presidentes del torneo.
-Es un gran honor presentarles a las ganadoras del torneo nacional de este año-Los aplausos y gritos de apoyo llenan mis oídos.
Sonrío un poco y miro a mi familia, los cuales están mas emocionados que yo, miro a las chicas y sus sonrisas son amplias y sus mejillas rojas son señal de pura adrenalina. Se que si Vinnie estuviera aquí se enojaría conmigo por no vivir en el momento, se que el esta feliz por mi y que debería de olvidarme de todo y solo animarme, solo vivir con la frente en alto.
Nos colocan las medallas y siento como poco a poco la emoción comienza a subir por mi cuerpo. Ganamos, gane el torneo por el cual me mate todos los días, el cual esta lleno de casa talentos de las mejores universidades y no puedo estar mas feliz y orgullosa de mi misma.
-¡Denles un aplauso!
Todo se vuelve una locura, saltos, gritos, aplausos revientan mis timpanos. Yo solo me lleno de emoción y disfruto este momento.
Las fotos con el equipo y el entrenador fueron obligatorias,no me queje al principio pero cuando ya iban mas de veinte fotos mis mejillas comenzaron a doler.
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Take Me ||Vinnie Hacker|| EN EDICIÓN
Fanfiction*Una historia donde pedirás ser la maldita protagonista* Descripción: Cayetana es una chica estudiosa, responsable, dedicada y tiene un corazón enorme. Su mundo es una burbuja tranquila y monótona hasta que conoce a ese chico. El chico que no le im...