Una vida para los dos- Larry Stylinson

Cap 5 "Nuestro lugar secreto"

Ambos salieron silenciosamente de la casa. Louis tenía agarrado de la mano a Harry mientras caminaban rápidamente. El lugar a donde iban quedaba a unos minutos de la casa del mayor, era un bosque realmente hermoso.

-Te taparé lo ojos.-avisó.

-¿P-por qué?- dijo nervioso.

-Tranquilo, es una sorpresa-puso ambas manos sobre los ojos del rizado y caminaron unos cuántos pasos más hasta llegar al destino.

-Listo, llegamos -retiró sus manos para dejar que Harry vea el hermoso paisaje que tenía frente a él.

El bosque era maravilloso, el día estaba soleado, había muchos árboles, mariposas, sonidos de pájaros, y un pequeño lago en dónde se podía ver claramente unos peces. La naturaleza en su máximo esplendor.

-Wow, es increíble, es hermoso. -Miraba sorprendido todo el lugar.

-Sabía que te gustaría, por eso es mi lugar favorito, vengo aquí casi todos los fines de semana, mis papás no se dan ni cuenta. -caminó hasta llegar a un árbol gigante. -Ven, sentémonos aquí.

Harry le hizo caso y se sentó junto a él.

Ninguno de los dos decían nada tampoco era necesario, se sentían cómodos, estando juntos. Louis se echó en el pasto con la mirada en el cielo. Harry lo observaba.

-Qué esperas para hacerlo también, se siente de lo mejor ricitos.

-Si tú lo dices- se acomodó para hacer lo mismo que él mayor.

-Me siento tan bien-suspiró.

-Yo igual.

-Gracias Harry -dirigió su mirada hacia éste.

-¿Por qué?

-Por llegar a mi vida, por ayudarme, por estar aquí conmigo-le dio una leve sonrisa sincera que hizo poner la piel del gallina al rizado.

-Yo también tengo que agradecerte Lou, por no burlarte de mi cómo lo hacen los demás.

-Es porque no saben realmente, no saben el gran niño que eres, el mejor.

-¿Te parece que soy un gran niño?

-Lo eres, me enseñaste muchas cosas buenas, créeme.

Harry sonrió acercándose a él.

-Louis ...-murmuró mirándolo fijo a los ojos- prométeme que no nos dejaremos de hablar.

-No pienso hacerlo Hazz, te lo prometo.

El castaño acercó su dedo meñique en señal de una promesa. El rizado hizo lo mismo, ambos ahí, echados en el pasto verde, con unas enormes sonrisas en su rostro.

El sol alumbrando y siendo presente de todo. Luego de unos minutos se encontraban cerca al lago tirando piedras al agua.

-Harry, ¿puedo preguntarte algo?

-Sip, dime.

-¿Alguna vez te ha gustado alguien?.

El rizado lo miró confundido.

-No podría saberlo, no sé cómo se siente. - se encogió de hombros.

-Pues mi abuelo dice que cuando estás con la persona que te gusta sientes como mariposas en tu estómago.-llevó su dedo anular hacia el abdomen de Harry-Justo aquí.

-¿Mariposas?

-Así es- asintió.

-Pues no sé, creo que aún soy muy chico para saberlo.

-Tienes razón- Louis bajó su mirada apretando sus labios.

-Louis.

-¿Sí?

-Tienes una araña en tu cabeza.

-¿Qué? -Se levantó y empezó a sacudirse -Sácamela Harry, sácamela por favor, odio las arañas.

Harry al ver la escena tan graciosa que tenia frente a él no aguantó más y comenzó a reírse escandalosamente. Louis lo miro confundido.

-No me digas que tú...

-Fue una broma, lo siento -seguía sin parar su risa. Louis negó rápidamente.

Le era imposible enojarse con el ojiverde, al verlo ahí sonriendo con sus hoyuelos tan marcados.

-Me vengaré, ya verás -habló entre risas el castaño. Se acercó hacia él y empezó a hacer cosquillas. Sabía que él rizado las odiaba.

-Para Louis, para -no podía contener su risa-Por favor.

-Estás hecho un tomate ricitos.

-Sabes que detesto las cosquillas.

-Te dije que me vengaría.

Se miraron nuevamente.

-Cierra los ojos- dijo Louis rompiendo el silencio.

-¿Q-qué?

-Sólo hazlo. Harry cerró sus ojos.

Louis no estaba seguro de lo que iba a hacer, se acercó al rostro del ojiverde y depósito un beso corto en su mejilla.

Harry al sentirlo, abrió los ojos rápidamente.

-¿Q-qué hiciste?

-Te demostré cuánto te quiero.- le sonrió. Harry seguía sin poder asimilar lo que había acabado de pasar.

-P-pero está mal.

-¿Por qué?

-Porque somos dos niños.-murmuró, bajando su mirada.

-Eso no importa Hazz, mi corazón se siente bien cuando estas junto a mi, ¿acaso no sientes lo mismo?

-Y-yo ... Sí, si siento lo mismo pero- le interrumpió el mayor.

-Pero nada Harry, todo estará bien, sí?

-¿Esto es verdad Lou?

-¿A qué te refieres?

-A lo que me acabas de decir.

-¿Crees que me burlaría de ti?- Harry bajó su mirada, se notaba el miedo en él.

-No quise decir eso, lo siento.

-No lo sientas, está bien Harry, yo no haré daño, lo prometo.

-Gracias Lou, te quiero mucho.

-Yo más ricitos. Se dieron un abrazo, uno que parecía eterno.

Ambos siendo pequeños explorando nuevas cosas, viviendo el primer amor, el que nunca se olvida. Luego se separaron y Harry se acercó a él para darle un pequeño beso en su mejilla derecha.

Louis se sorprendió ante el acto y luego le dedico una sonrisa de oreja a oreja.

Esa tarde jamás la olvidarían..

Louis no lograba conseguir el sueño, en su mente lo único que estaba era el beso que Harry le dio, aún lo sintió.

Dirigió sus dedos hacia su mejilla para darle unos roces suaves con la yema de sus dedos justo dónde el rizado lo había besado. Suspiró.

Y luego de unos minutos se quedó dormido.