OBEY - [HaruKyu]

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— ¡Si no nos hubiéramos ido del castillo, nada de esto estaría pasando! — gritó Junkyu dándole la espalda a Jihoon.

— ¿Me vas a echar a mí la culpa? ¡Lo único que hice fue protegerte! — respondió Jihoon. — ¡Estaríamos muertos ahora, igual que papá y mamá!

Junkyu relajó su semblante al escuchar lo último.

— No, espera. Junkyu, perdón, no sé porque lo dije... — Jihoon se acercó dándole un abrazo que no fue correspondido.

— Tengo miedo. No quiero perderte. — susurró.

— No me perderás. Lo lograremos, ya lo verás. — respondió Jihoon con una sonrisa en sus labios.

Y finalmente el menor correspondió a su abrazo.

Después de un rato, finalmente ambos se separaron. Jihoon tomó asiento sobre su cama. El estrés que sentían en ese momento era impresionante, desde mantener oculta su verdadera identidad, hasta el miedo de ser encontrados. Sentían que todo se les estaba juntando.

Junkyu se acercó frente a él y le brindó una cálida sonrisa.

— ¿Qué te parece si te preparo un té especial? — propuso Junkyu.

Jihoon sonrió ligeramente.

— Vale. Seguiré buscando mi espada y el mapa entonces. — respondió.

Jihoon siguió con lo suyo, mientras tanto Junkyu salió de la habitación rumbo a la cocina.

Camino tranquilamente, pues se suponía que todos deberían estar dormidos o al menos dentro de sus habitaciones; sin embargo, no era así. Se detuvo al escuchar un crujido.

En ese momento alguien lo tomó por espaldas tapando su boca.

— No hagas nada. Sólo sígueme. — susurró Jeongwoo.

Junkyu se separó forcejeando, pero Jeongwoo seguía tomando sus brazos con fuerza haciéndole imposible huir.

— ¡No voy a ir contigo a ningún lado! — gritó forcejeando. — ¡Sueltame!

— Creo que no sabes lo que dices. Vendrás conmigo si no quieres que todos se enteren de tu secreto... Majestad.

Junkyu se puso pálido al escuchar aquello. Dejó de forcejear y no dijo nada más.

En ese momento un tercero se unió. Y es que los gritos de Junkyu habían llamado a Haruto, que su habitación no estaba muy lejos de ahí.

Haruto se interpuso justo en medio. Jeongwoo soltó al otro, mientras que ambos alfas se enfrentaban.

— ¡Te voy a matar si eres capaz de ponerle un dedo encima! — gritó Haruto restregando a Jeongwoo contra la pared.

Aquellos gritos despertaron al resto qué salieron a ver lo que sucedía.

Yoshinori se metió entre ambos, y junto a Mashiho lograron sostenerlo y evitar que volviera a irse contra él.

Junkyu reaccionó mirando a Jeongwoo. Nadie podía saberlo. Se acercó a Haruto intentando separarlos, pero fue inútil.

— Haruto, de verdad no pasó nada. Sólo me asusté y... — decía Junkyu intentando dar una explicación a lo sucedido.

— No fue lo que yo escuché. — interrumpió Haruto nuevamente. — Gritaste diciendo que no irías con él a ningún lado ¿Qué te dijo?

— ¿Qué sucedió aquí? — preguntó Jihoon miranos a Junkyu.

Junkyu miró a Jeongwoo de reojo y volteó nuevamente con los demás.