14.

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Es el maldito Jake.

El estúpido, imbécil, desgraciado, mal nacido, y puto de Jake.

De un impulso de mi interior nace cerrar la puerta de inmediato. Apoyo la espalda contra la prieta y me tapo la boca con las manos.

"Jake..."

Tomo aire profundamente y vuelvo a abrir la puerta. Levanto la mejor de mis sonrisas y me arreglo el pelo con una mano.

-Había una araña, lo siento... -me disculpo. Mi hermana me mira con una ceja enarcada y el chico sigue sonriendo. Está vestido con una camiseta negra de manga larga, unos pantalones apretados también negros y unas Vans negras.

¿Algo más, señor?

Me sonríe ampliamente con ambas manos dentro de los bolsillos de su pantalón. Tengo que apoyar una mano en el umbral y la otra en la puerta para aguantarme las ganas de empujarlo y que se caiga por las escaleras del porche. -Pasen.

-Se me han quedado las llaves en mi habitación anoche. -se disculpa Camille cuando pasa a mi lado rápidamente. Espero que Jake pase cosa que lo hace lentamente y todo el tiempo mirándome. Hago una cara de asco y cierro la puerta.

-No pudiste haber elegido un mejor momento para olvidarlas. -digo y empiezo a caminar hasta las escaleras pero la voz de mi hermana me interrumpe.

"cállate de una vez, por dios"

-Jake me ha dicho que va en tu clase, ¿por qué nunca me comentaste de el?

Enarco una ceja y miro al chico. Por go los brazos en jarras y me dispongo a contestar pero el me interrumpe.

-No está a mi nivel, bonita. -se acerca a mi y me pasa el brazo por mi cuello. Me encojo de hombros y guardo la cabeza entre ellos para aguantar la respiración. -Se hubiese enamorado de mi si tan solo me dirigiera la mirada alguna vez.

-Pero ahora estás con ella -digo con la voz alta. Me despojo rápidamente de sus brazos y comienzo a subir las escaleras de espaldas. -Mamá debe de estar durmiendo o algo... Adiós!

Corro hasta mi habitación lo más rápido posible. Escucho a mi hermana decir algo de que no tome en atención lo rara que soy. Jake se ríe y eso me hace levantar del suelo y correr hasta la ventana. La abro y tomo aire. Saco mi celular y marcó el numero de Harry.

-Erin, ahora no... -dice el al segundo tono pero lo interrumpo.

-Jake está en mi casa. -digo y boto todo el aire que estaba conteniendo de hace mucho tiempo. Pasan unos segundos cuando el contesta lo que dije.

-¿Qué?

-El está aquí, por dios. Es como un ácido, te apuesto que cuando baje las escaleras el piso de la sala estará derretido y habrá un agujero gigante en el suelo. -digo rápidamente. Me siento en medio de mi habitación y observo la puerta. Detrás de ella está la a abominación mas grande del mundo.

-Debes matarlo. -contesta Harry cortante. Se cuánto lo odia porque yo lo hago de la misma manera.

-No puedo, está... -hago sonido de arcadas. -está con mi hermana...

-No puede ser... -comenta el con aire dramático y a la vez desilusionado.

-Pero lo es. -digo suspirando otra vez. Me hecho al suelo y cierro los ojos. debe haber algo que pueda hacer. Piensa, Erin.

-Humíllalo frente tu hermana. -suelta Harry. Siento su respiración rapida y me imagino que habrá salido a hablar a un lugar mas calmado. Me levanto y comienzo a caminar de un lado a otro. -Siéntate con ellos y hazle la tarde imposible, por no mencionar la vida.

Leave Me Speechless  (h.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora