30 (parte uno).

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Todo lo que siguió a ese momento, fue totalmente raro e inesperado.

Harry comenzó a sacar las cosas para cocinar lo que sea que haría pero yo dije que tenía que irme, excusándome al decir que tenía que ir a cuidar a Peter, ya que mamá saldría.

Cosa que es totalmente mentira porque Camille siempre estaba en casa.

El lo comprendió completamente o eso espero, la verdad; y me acompañó hasta la puerta sin ningún tipo de expresión en su cara. Monté mi bici sin ningún problema hasta que prácticamente, al salir del campo de visión de Harry, mis piernas comenzaron a formarse de gelatina y me tuve que detener para no caer.

¿Qué estaba pasándome? Oh, no.

Oh.

No.

(...)

-Es que no me importa, mamá. El ya debería estar aquí hace al menos un año. -digo en voz alta mientras termino de alisar mi vestido por enésima vez.

Son las 9 menos cuarto lo que significa de que Harry debería haber estado aquí hace al menos, unos diez minutos para poder llegar bien al instituto. Me paro frente a el espejo y observo mi silueta.

Mi cabello cae perfectamente a un lado de mi cuello. He decidido, bueno, mas bien he sido obligada a dejarlo suelto por mi madre e insistencias peculiarmente raras de mi hermana. El vestido ha resultado encajar perfecto en mi cuerpo y la verdad es que me siento conforme.

Unos golpes en la puerta de entrada me hacen volver a la realidad de inmediato.

Me quito los tacones negros en un segundo que estoy apunto de caer unas tres veces cuando bajo corriendo por las escaleras con los tacones en una mano. Ya frente a la puerta, me pongo lentamente los tacones y me paso una mano por el pelo antes de abrir la puerta.

Harry aparece delante de mi, vestido con el eterno maldito terno negro, una camisa blanca, junto con una corbata delgada negra. Sonríe alegremente y antes de que pueda decir algo, lo tomo por el cuello de la Americana y lo hago entrar.

-El hecho de que te veas lindo hace que no pueda desquitarme contigo. Pero quiero que lo sepas. Estoy furiosa, Harry. -le digo cruzando los brazos.

Harry frunce el ceño y vuelve a sonreír cuando posa sus ojos en mi. Levanta su mirada hacia mis ojos y se pone serio.su ceño se frunce lentamente para luego dar a ver una expresión fatalmente desconocida. Se pasa una mano por su cabello y luego vuelve a mirarme.

-Te ves hermosa, Erin. -dice con una voz suave y mas rasposa de lo normal. Dentro de mi, algo hace que corran escalofríos al escuchar semejante tono en su voz. Pongo los labios en una línea recta pero estos me juegan una mala jugada y hacen que sonría.

Pero afortunadamente, mamá sale de su habitación en el momento perfecto.

-Oh por Dios, ¡Pero si parecen unos ángeles caídos del cielo! -comenta alegremente. Harry se echa a reír guardando ambas manos en los bolsillos de su pantalón. Peter aparece detrás de ella y saluda a Harry con la mano. Este le sonríe y mi hermano se pone a un lado de mamá. -Cariño ve a buscar la cámara que dejé sobre la cama.

-Oh, no. Mamá, eso si que no. -comienzo a protestar pero Peter ríe como un bebé mientras corre hacia la habitación de mamá. Tomo nota mental para enviarlo a China en cuanto llegue a casa.

Peter regresa corriendo y enlaza su mano con la de mi madre al entregarle la cámara digital en su otra mano. Ella sonríe ampliamente y deja ver lo feliz que está. El hecho de que por una vez, cuando no esta trabajando, esté relajada y feliz, hace que yo esté bien.

-Ya. Júntense un poco, chicos. -murmura. Harry me mira de reojo y ambos nos acercamos un paso hacia el otro, dejando las distancias. Lo que pasó ayer de algún u otro modo, ha marcado la diferencia.

Su traje hace que se vea mas esbelto. Su cabello está, si bien no ordenado, tiene aún su toque diario. Su ceño está fruncido mientras escucha algo que le dice mi hermano. Se agacha para escucharlo mejor y suelta una carcajada haciendo que saque las manos de sus bolsillos. Sonrío mientras lo observo.

-Más. Vamos, niños. Por favor. -ruega mi progenitora nuevamente.

Harry y yo nos miramos de frente y no puedo evitar sonreír a la cara que tiene. El da un paso, llegando a tocar mi cuerpo con su costado, pasa una brazo por mi hombro y me estrecha contra el. Puedo oír su corazón desde aquí. Baja su boca hasta mi oído y mi cuerpo se tensa.

-Te dije que me odia, Erin. -murmura. Me alejo rápidamente y lo golpeo en el pecho. El suelta un risa y vuelve a voltearme para que quede a su lado. Ahora baja su mano para posicionarla justo en la curva de mi cintura. Siento que suspira y no puedo evitar hacerlo yo también. Mamá carraspea y ambos moríamos hacia la cámara.

-Dios, se ven tan lindos. -chilla.

-Iugh, no, mamá. -protesta Peter sentándose en la escalera. Yo lo miro y le saco la lengua cosa que el contesta de la misma manera.

-¡Sonrían! -dice. Y todo lo que viene después, es cegado por la luz brillante que sale del aparato.

(...)

En el auto, ya de camino a la escuela, nadie a dicho una sola palabra en el corto trayecto que llevamos. Me he sentado atrás porque he dado la excusa de que quiero estirar mis pies para que descasen previamente antes de la eterna noche.

Pero me he dado cuenta de algo. Si bien siempre creí, que el espejo retrovisor era una especie de adorno inútil en el auto para quienes viajaban y no manejaban; ahora creo que es bastante útil.

Pero lo único que quiero es que desaparezca.

Aquí vamos, y el no puede dejar sus ojos salvajes quietos en la carretera.

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Primero que todo, debo agradecer por todas las nuevas lecturas, votos y comentarios que han hecho. No puedo sentirme más feliz con lo mucho que ha crecido esta historia y obviamente, es gracias a ustedes. Si bien, LMS es una historia, hace que sea una historia gracias a ustedes, los lectores, ya que sin uds, , son solo palabras... ¿No creen?

Okay, 2 cosas. Debo admitir que la vestimenta de Harold en el baile, es mi fantasía americana. Siempre he amando a los chicos que visten con camisa blanca, terno y corbata delgada negra. Y con Hazza... Dios. Y segunda... La última frase me ha llegado al escuchar Style, de Taylor Swift... De ahí va la frase textual extraída de la canción.

¡Gracias de antemano y les primero muchas mas sorpresas de aquí en adelante!

Besos,

Monse.

Pd: pásense por mis otras obras, ji ☺️ coméntenme qué les pareció este capítulo.

¡SEGUNDA PARTE DE ESTE CAPITULO, EL VIERNES!

Leave Me Speechless  (h.s)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora