Capitulo 23: ¡Aún que no sea lo esperado!

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¡Este capítulo será narrado por Juan Carlos y mi persona!.

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Después de una larga noche tormentosa, aún el frío se sentía en el ambiente, seguí lloviznando y yo me quedé acostado junto a Clarisa, abrazados, cubiertos por las sábanas mientras nuestros cuerpos se frotaban uno al otro con clases y amor, el frío que nos cubría nos hacía pegarnos más y provocar estar cada vez más juntos.

Después de unos segundo la puerta sonó, provocando despertar de golpe, la impresión me hizo esconder a Clarisa en el baño ya que no sabía quién era. Al estar ya escondida le dije que pasará.

— ¡Hermano, lo siento pero ya Ramiro me dijo todo! “Se sentó en la cama con el seño fruncido”.

— yo te lo iba a con.. “No dejó que terminara interrumpiendo mi oración”

— ¡No pero como vas a permitir que esa mujercita te esté chantajeando así, quien sabe de quién es ese mocoso, y claro te lo mete a ti para sacarte dinero!.

¡No paraba de gritar, y regañarme, se molestó y daba vueltas en el cuarto de un lado a otro!.

— ¡Dónde está que la voy a matar, que se largue, ella no puede arruinar tu vida!.

— ¡Estefanía! Cálmate “La tome de brazos” — ¡Ella no está aquí, después hablamos de eso!.

— Y que ni se le ocurra aparecer por qué vera quien soy yo, ella dijo se lo meto a este imbécil.

¡Imbécil!

— Siéntate aquí que lo importante es otra cosa “La senté en la cama junto a mí” — A mi Nona se la llevaron de emergencia para una clínica en la capital.

— ¿Como? “Se levanta” — Y cuando tú esperabas decirme eso, ¿Como está? ¿Has hablado con ella hoy?

— No pero tú lo puedes hacer por mí, “Me levanté” — ¡No tengo el valor de hablar con ella!.

— ¡No, claro que lo voy hacer! Aquí mismo.

— No hermana, hazlo en tu habitación, tranquila “Abri la puerta” — ¡Pero no le cuentes a mi padre nada de esto!.

— ¡Está bien Juan Carlos! “Salio de mi habitación” — ¡Después te cuento que pasó!.

¡Al salir de mi habitación y serrar la puerta me senté en la cama, con las manos en la cabeza en el tipo de persona que ya era, jamás pudiera haber actuado de esta forma, y menos cuando se trataba de la salud de mi Nona!.

Clarisa salió del baño lentamente, con la cara un poco avergüenza por lo sucedido, y acariciando mi espalda me dice:

— ¿Por que no me habías contado lo que ocurría con tu Nona?

— ¡Pensé que no te iba a importar! “Dije con un tono bajo, y lágrimas en mis ojos”

— ¡Claro que me importa Juan Carlos, todo le que pase con Tigo y a tu al rededor me importa!. “Lecanto mi cabeza y comenzó a besar me”.

¡Está era la mujer que yo estaba buscando, ella era esa mujer, mi mujer!

¡Después de estar unos minutos con Clarisa, decidí salir y ir en busca del desayuno aún que me tenga que encontrar con Lucrecia, en realidad siempre estaba ella su madre nunca está en la cosina las beses que yo voy! Mientras caminaba, sentía que alguien me perseguía, era una de esas sensaciones terribles que tu mente te hace sentir, es algo malo por qué sientes la presencia de algo y muchas veces pueden ser espíritus. Y si son los padres de Clarisa, bueno ellos no lo son, que vienen a vengarse de mi. No Juan Carlos deja de pensar idioteces y ve por algo de comer.

La cosina afortunadamente estaba solo, y al parecer nadie había cosinado, tome un pan y lo caliente con un poco de margarina y queso llanero, y tome un vaso de jugo de naranja y camine a mi habitación, antes de que alguien me viera. Cuando voy llegando a la puerta me sorprendo con Lucrecia que estaba esperando que saliera para hablar con migo, me hizo entrar algo estraño. Y con una cara de tristeza me dice:

— ¡Juan Carlos! Sé que tú ya no sientes nada por mi y también ya tienes a una mujer a tu lado, que en verdad la amas “Me tomo de la mano” — Pero quería decirte que me voy para dejar el camino libre y no seguir estorbando te.

— Por qué dices eso Lucrecia, aún que esté con Clarisa tu significastes y todavía sigues siendo y perteneciendo en mi corazón. “Seque sus lágrimas” — ¡No llores que la verdad me harás llorar a mi también!

— ¡Me salió una beca en la universidad de Palermo en Buenos Aires-Argentina, y quieto aprovechar para progresar y proporcionarle un futuro a mi mamá!.

— ¡Pero que buena noticia Lucrecia! Es algo extraordinario una gran oportunidad! “Coloque la bandeja en la abracé” — Seguro triunfaras allá.

— Gracias Juan Carlos, espero que me llames.

— ¡Claro que lo haré! Sabes tengo un amigo que estudia allá, si quieres el te puede ayudar allá con todo eso.

— ¡Si claro! Sería de mucha ayuda.

Secó sus lágrimas y comenzó a reír, ambos reímos, luego me despedí con un beso en su mejilla y camine a mi habitación.

★★★

¡Las horas se fueron volando y la mejor oportunidad para poder salir de la finca y poder seguir con nuestro plan es ahora!.

Nos reunimos en mi habitación, y Clarisa aprovecho el momento para decirle a Ramiro en forma de burla.

— Ramiro que le distes a Estefanía, estaba muy furiosa “Conenzo a reír”.

— Solo hice lo que ustedes me pidieron.

— ¡Pero te fuistes con todo no! Eres un buen actor oye.

¡Comenzamos a reír y no fuimos a caballo, para la finca de Verónica, y así poder ejecutar nuestro plan!.

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¡Espero los comentarios de todos lo que leyeron este capítulo, que le pareció espero su comentario!

Esto fue.....

#ADosPasos.......

A Dos Pasos. (TERMINADA).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora