A Dos Pasos. (TERMINADA).

Capitulo 35: ¡Nunca te olvidaré!.

Narra Juan Carlos

¡Estaba algo cansado, con esto del tratamiento me gustaba mucho dormír, casi no podía establecerme por mucho tiempo despierto!.

Ramiro estaba dormido, yo no podía consolidar muy buen el sueño, pero en segundos ya estaba dormido. Siempre escuchaba ruidos en los pasillos, ella algo muy tenebroso este hospital, no he podido hablar con el detective y contarle sobre la carta y la historia loca de mi descendencia paterna.

— Hijo, sabes que siempre te voy a cuidar “Me levanto y comenzó acariciar mi rostro con una linda sonrisa” — Nunca vallas a cambiar Juan Carlos, siempre tienes que ser como eres tu una persona especial.

— ¿Cómo llegastes aquí?.

— Cumple todos tus sueños, y nunca me olvides hijo. “Me a pechugo y comenzó a cantar una canción de cuna que siempre usaba cuando era chiquito” — Duerme, Duerme es hora de dormir, suela cosas lindas para después venir.

Poco a poco me recostó de nuevo en la cama, esa linda canción que hizo salir lágrimas de mi rostro me volvieron a dormir.

★★★

Estaba desayunando, se que anoche me pasó algo especial pero no me acuerdo bien, cuando pensaba en eso sentía la piel de gallina, pero no sé que pasó. Clarisa entra al cuarto, con la mirada al piso, tenía el rostro algo rojo y triste. Se sienta a un lado de mi y acariciando mi cabello me dice.

— ¡En este momento es cuando más vas a necesitar de mi apoyo Juan Carlos!

—¿Porqué lo dices amor? “La mire algo confundido”.

— Anoche tu mamá me llamo, y me dió la triste noticia que tú Nona había muerto.

Sentí que mi mente giraba, y giraba no podía pensar en otra cosa, si no en los lindos momentos que pasamos juntos; en esos momentos que nada nos faltaba lo teníamos todo, una familia feliz.

¡Cómo siempre lo he dicho, ella era esa madre que me hizo falta cuando niño y la mejor Nona de todas! Nunca pensé que esto pasaría así, no estaba preparado para esto, nunca lo podría a ver estado. Mis ojos no paraban de llorar, Ramiro y Clarisa estaban a un lado de mi mostrándome su apoyo ante todo esto.

¡Al fin me acordé, de esa despedida que tuve con mi Nona! Ella siempre me apoyado con todo, y ahora me pide que cumplan mi sueños y eso es lo que haré. Mi madre debe venir hoy con las senisas de mi Nona, nunca quiso que cuando ella muriera le hicieran un funeral y que no enterraran su cuerpo en una caja bajo tierra, ella solo quería ser libre y que liberarán sus senisas en la montaña que rodeaba la finca, su lugar favorito para distraer la mente.

Ya no podía parar de llorar, estaba algo inconsolable Clarisa tuvo que llamar a una enfermera para quee me inyectaran un tranquilizante y poder descansar.

★★★

Desperté y todos estaban en la habitación, el Detective estaba sentado junto a Clarisa todos tenían una mirada triste, nos dolía mucho esa gran perdida.

«Llamada Entrante»

— Juan Carlos amigo, lamento mucho tu perdida.

— Gracias amigo, es muy duro, tu sabes lo mucho que amo a mi Nona

— Lo sé, y por eso te estoy llamando.

— Gracias amigo, gracias por siempre estar hay.

— Lo siento por no poder ir, pero e estado pasando por algunos problemas y no puedo salir.

— No te preocupes, solo estaré aquí en el hospital, mi Nona nunca quiso que le realizarán un funeral.

Estevan como les dije es mi mejor amigo de la universidad, el siempre a estado al pendiente de mi y yo de el, nos llevamos muy bien aún que hemos estado separados todo este tiempo.

Clarisa, se acuesta a mi lado, meando mi cuello y abrazándome muy fuerte, que haría sin ella.

— ¡Mi más sentido pésame Juan Carlos!. “Dice el Detective mientras tenía el pensamiento lejos”

— ¡Hay detective, siento que mi corazón se destrozó!.

— No te preocupes, recuerda que estaremos juntos para todo lo que venga Juan Carlos.

— Después que pase esto, tengo que contarte algo.

— ¡No te preocupes, ya habrá tiempo!.

★★★

En la tarde nos dieron de alta a Ramiro y a mi, el detective tuvo que dormir dos días más en el hospital. No teníamos a dónde ir porque no la finca estaba invadida, Clarisa sugiere quedarnos en la casa donde vivía con sus supuestos padres.

¡Lo pensamos, y me pareció buena idea. Mi madre viene hoy junto a Estefanía y las senisas de mi Nona! Aún estoy muy dolido, Clarisa condujo hasta la casa, acomodo a Ramiro en una habitación y yo me acosté en la de ella. Después de unos minutos ella entra con una bandeja que tenía consomé de pollo y un jugo de Guayaba para mantenerme estable.

Después de comer, me recostes hasta que llegó mi madre con Estefanía, estaba muy cansado y no podía pensar en muchas cosas. Mi madre junto a Estefanía estaban inconsolables, no reunimos todo en la sala y tratamos de no llorar mientras mirábamos el cofre dónde estaban las senisas.

— Cuando iremos a exparcil las senisas “Pregubra Estefanía mientras está recostada del abdomen de Ramiro”.

— La verdad que tendremos que esperar que atrapen a tu padre, no podemos entrar a la finca y mucho menos estarán en la sábana solos.

— Tienes razón “Le dije muestras la abrazaba” — Recuerda que el detective aún sigue en el hospital.

— ¡Claro que me acuerdo, mañana voy Temprano! “Hace un gran bostezó” — Estoy muy cansada.

Todos no acostamos, no teníamos ánimos para nada, solo con pensar que ya mi Nona no estaba con nosotros me partía el corazón.

★★★★★

Aquí otro capítulo, es un poco triste pero después de esto, podremos disfrutar de muchos sentimientos más.

Espero que les allá gustado, no olviden comentar y decirme que piensan sobre la familia de Juan Carlos.

Esto fue...

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