Capitulo 26: ¡Si tú estuvieras aquí!

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NARRA JUAN CARLOS

¡Estaba desesperado, aún no recibía respuesta de Clarisa, desde que le escribí no me avisó nada, solo estoy aquí con Ramiro en este granero pero nada, ya me estoy asustando!.

¡Comencé a dar vueltas de un lado a  otro, ya estaba desesperado, no soportaba más estar aquí sin tener información de nada de lo que estaba pasando!.

¡Comencé a oír unos pasos, me quedé en silenció acercándome a una rendija para ver quién era, esa fue la sorpresa mayor!.

¿Que estaba haciendo mi padre aquí?.

¿Y si las dudas que tenía el detective eran ciertas?.

¿Que él está cómplice o cargo de este secuestro?

¡Inlogico, y con poca coerencia realmente!

Pero esa eran la incógnitas que por mi mente pasaban en este momento, trate de acercarme un poco más para poder oír la ver no escuchaba mucho, estaban hablando con una especie de código la verdad. Pero si pude oír y lo que ellos decían era que hasta aquí seguían con ésto, ya no lo podían tener más tiempo ocultó.

¡Aún si les digo la verdad no sé que pensar por qué mi padre termina la frase, comienza a besar a Verónica y tocar sus nalga dándole seguidos apretemos y poco a poco recostarse de la pared de madera donde yo los estaba espiando!.

¡No puedo argumentar que ellos tienen secuestrados a mi madre y el detective, pero si puedo decir que está relación no es buena ellos ocultar muchas cosas y espero que no traiga terribles consecuencias!.

★★★

Ya después de unos minutos de tanta espera que se fueran de hay para poder hablar y pensar que íbamos hacer, tome a Ramiro del hombro para en un rincón poder decirle que íbamos hacer, estaba demasiado nervioso por qué no sabía bien si esperar o tomar un decision, por eso plantie una propuesta.

— ¡Ramiro yo no sé que pueda estar pasando hay! “lo mire seriamente” — Pero algo si te aseguro, Clarisa no está bien.

— ¡Pero recuerda que no podemos dejarnos ver con Verónica!.

— Pero tampoco podemos esperar que maten a Clarisa, y nosotros sigamos esperando.

— ¡Tienes razón! ¿Que vamos hacer?.

— Le voy a mandar unos 500 mensajes a Clarisa “Literalmente” — Y si el 15 minutos no responde, vamos a buscarla sea como sea.

— Pero no podemos llegar entrar y ¡Dónde Clarisa no a muerto aún!

— ¡No yo sé que no!

— ¡Por Dios Juan Carlos, tenemos que pensar bien que vamos hacer, a este ritmo los próximos muertos podemos ser nosotros!.

— Tienes razón, le enviaré los mensajes para pensar bien que iba hacer.

★★★

NARRA EL DETECTIVE.

Encerio esto ya llegó a un extremó muy extraño, ya yo tengo 15 días secuestrado y sin pensar en lo que lleva la mamá de Juan Carlos, que en este momento tan duro emos estado muy unidos y mostrado el apoyo mutuamente pero son cosas que más adelante podré contar.

Estaba asustado por lo que podría pasar, Esperanza estada recostada en mi pecho, mientras nos recostabamos en una esquina de la habitación, nunca pude ver a Verónica frente a frente, y menos a seguramente asociado que nunca lo e descartado en todo esto, que el señor Máximo, padre de Juan Carlos.

El secuestro no se podía entender, y para mí era un tipo de trauma sicológico y rencor, ya que no era por dinero, solo se quería hacer sufrir y nada más éso. El celular de Clarisa no paraba de sonar, mire a Esperanza diciéndole con la mirada para tomarlo.

Ella seguía tirada en el piso por el impacto recibido en la cabeza, me levanté y con ayuda de Esperanza la acostamos en la cama.

— ¿Quien es ella? “Dice Esperanza”.

— ¡Es la novia de Juan Carlos!.

—Al parecer está embarazada “Dice tocando su barriga” — Juan Carlos se moriría si algo le pasa a su novia.

— La verdad el la ama, soy testigo de eso.

— ¿Y como se llama? “Dice acariciando su cabello rubio” — ¡Es muy linda!.

— ¡Se llama Clarisa! “Digo tomando su celular”.

Por suerte el celular no estaba bloqueado así que no me costó mucho entrar para ver qué mensajes tenía o por qué sonaba. La verdad me sorprendió mucho lo que leí.

MENSAJE.

¡Clarisa nececito respuesta, me estoy muriendo del miedo aquí donde estoy, solo dime si estás buen y si ya encontraste o sabes dónde tienen a mi madre con el detective!.

Responde por favor....

—Esperanza creo que tienes que venir a ver ésto. “Digo mostrándole el celular”.

— Estamos libres, es mi hijo, tienes que decirle que esto nos aquí “Dice con una hermosa sonrisa”.

— ¿Que le digo? “La miro”.

—No se, pero especificale dónde estamos “Comienza a dar vueltas” —¡Y háblale de esta ventana claro!, Con una escalera podemos salír.

— ¿Y Clarisa, está desmayada?

— ¡No te preocupes, yo me encargo solo escribe el mensaje por Dios!.

Esperanza estaba muy contenta, y la verdad la comprendo ya ella tiene casi un mes aquí, y parte de el sóla, sin conexión al mundo exterior, ya era hora de salír.

¡Solo le pido a Dios que todo salga bien, y podríamos salir libre de todo esto!.

★★★★★

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Esto fue.......

#ADosPasos........

A Dos Pasos. (TERMINADA).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora