Bienvenidos sean a nuestro juego, se preguntaran que es lo que está pasando y que es este lugar.
Antes de continuar les recomendamos no tratar de escapar de lo contrario morirán, de este pueblo no hay salida a menos que sean el último en pie.
Han...
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Me quedo completamente sola en medio de la nada mirando en dirección en la que desapareció. No entiendo absolutamente nada de esto, no entiendo que tengo que ver yo en todo este juego y por que demonios me quieren. No tiene sentido querer a una joven huérfana sin nada bueno que la rodea. Saben quien soy, quien es mi familia pero no me dicen la verdad, no me dicen de donde vengo, no hacen mas que quedarse callados volviéndome un manojo de emociones. Vine aquí porque me dijo que me diría lo que necesitaba pero en lugar de eso solo logró que me confundiera más, que mi mente creará más preguntas agobiadome.
Suspiro, no se porque me tomo el tiempo de confiar en ellos, no se porque pensé que me diría lo que quería, era claro que no lo haría. Sacó la ropa de la bolsa y la observó delante de mi. Me quito el suéter que traigo puesto, esta manchado de sangre y lo bastante sucio como para hacerse pasar por un trapo de cocina. Tomó la blusa que me ha dado y me la coloco. ¿Por qué darme ropa? ¿Por qué tomarse el tiempo de venir hasta aquí? No tiene sentido.
Me siento en el suelo para quitarme los zapatos, la herida de mi pierna y, brazo tiran pero me acostumbrado al dolor a este punto. Resivo el resto de las cosas que hay en la bolsa y cuando un sonido extraño se escucha dejo de mover la bolsa. Es ilógico pero de entre el pantalón de jean que hay dentro de la bolsa algo brilla. Saco el frasco de pastillas de la bolsa y como puedo trato leer de que es.
Miro a mi alrededor con una ligera esperanza de que él esté ahí, mirándome, pero no es así. Además de ropa me a dado medicamentos para lidiar con el dolor de mis heridas. Abro el frasco tan rápido como puedo y me tomo uno de las pastillas, si no son lo que creo que son no me importa, de todas formas no estaría más morir intoxicada que por un corte en la garganta mientras duermo.
Me inclino hacia el lago y con mis manos trató de tomar un poco de agua para pasar la pastilla que a quedado atorada en mi garganta. Cuando el agua me recorre la garganta siento alivio y me hace preguntarme hace cuando que no bebía agua.
Entonces todo pasa muy rápido y mi cara se surmeje en el agua con fuerza. A penas y tengo tiempo de tomar aire cuando ya estoy bajo el agua, cuando ya una mano me toma del cabello y me obliga a mantener la cabeza bajo el agua. Mi pulso se acelera a una velocidad antinatural y comienzo a patalear para soltarme de mi agresor. Sus manos me sostienen con fuerza contra el agua y mis pulmones queman en busca de aire.
Hecho la cabeza hacia atrás con todas mis fuerzas y estiró mis manos hacia él tanto como puedo pero a penas logro rasguñar sus muñecas. La garganta se me cierra y siento que pequeñas agujas se me meten por los ojos y dedos. Tiro de mi hacia adelante, me impulso hacia el interior del lago y al mismo tiempo tiro de él.
Ambos caemos al agua y cuando ya no siento el peso de sus manos en mi cabello salgo a la superficie tomando una bocanada de aire, no me dura mucho pues él también sale y tira de mi bajo el agua. Pataleo en busca de poder soltarme, la garganta se me cierra y siento que voy a ahogarme en cualquier momento.
