26. Es verlo a él

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Sus brazos me rodean con demasiada fuerza, como si no quisiera soltarme jamás o como si tuviera miedo de que de pronto me alejara de él

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Sus brazos me rodean con demasiada fuerza, como si no quisiera soltarme jamás o como si tuviera miedo de que de pronto me alejara de él. Apoyo la cabeza en su pecho y me refugio en él, el calor que emana su cuerpo me hace olvidar la lluvia a pesar de que continúa cayendo sobre nuestras cabezas. Me concentró en el latir de su corazón contra mi oreja, desesperado, como un cabello de carreras.

Estoy con él.

Estoy bien.

Estoy a salvo, de algún modo.

Siento su respiración en mi cuello, inhala profundamente y luego suspira abrazarme más fuerte. Aparto mi cabeza de su pecho cuando siento una punzada en las costillas por las heridas y no puedo respirar por la fuerza con la que me abraza. Saco la cabeza como puedo de entre nosotros y busco tomar una bocanada de aire.

— Damon – susurro palmeando su hombro.

Parece que mi voz empeora todo, me abraza con muchas fuerza y no puedo evitar jadear. Lo golpeó en el hombro como puedo.

— Me estas asfixiando.

Reacciona y se aleja de mi lo suficientemente para dejarme respirar, tomo una bocanada de aire y trato de ignorar el dolor punzante en mis costillas. No le digo nada sobre el dolor, solo le sonrió de medio lado. Sus manos están sobre mis hombros y me recorre de arriba abajo con la mirada asegurandose de que soy real.

Su mirada se detiene en mi rostro y no me lleva mucho entender que es lo que está mirando cuando su expresión pasa a una de desconcierto, como si acabará de ver una persona morir brutalmente... Bueno, no es la mejor referencia pero algo es algo.

— ¿Que te a pasado? ¿Donde has estado? – susurra.

La frustración se hace presente, quiero decirle todo, donde estuve, lo que vi y lo que escuché pero con tantas personas mirándonos no puedo hacerlo, las preguntas no tardarán y pronto todos estarán encima de mi o creerán que soy una de ellos.

Tomo su mano y le doy un apretón esperando a que entienda que no puedo hablar de ello ahora, frunce el ceño confundido y me mira un momento antes de mirar a April y a las demás personas que nos observan.

— Vuelvan dentro, Amber y yo nos iremos – murmura.

April abre la boca para protestar pero Damon no le da tiempo a que logré decirnos algo. Tira de mi en dirección a la cabaña y me encojo de hombros hacia April, nos sigue con la mirada y se mantiene en el mismo lugar. La pierdo de vista cuando me veo obligada a prestar atención a los escalones del porche, subo uno por uno tratando de llevar el mismo ritmo que Damon pero es mucho más rápido que yo y mi pie queda atascado entre uno de los escalones.

Tiro de el y saco mi pie antes de que Damon lo note. Abre la puerta de la cabaña con rabia, como si le estorbara y quisiera entrar a como diera lugar. A penas he puesto un pie dentro de la cabaña Damon me suelta y hace que gire sobre mis pies para mirarlo. Abro la boca pero antes de poder pronunciar algo me besa, su boca se une con la mía y vaciló. No esperaba un beso, no esperaba si quiera que me resiviera con los brazos abiertos, lo que ahora que lo pienso mejor me hace sentir mal.

RESILIENCIA #1 ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora