Esclava de un dios

Capítulo 7

Son las doce de la mañana y aún estoy en la cama. Llevo despierta desde hace algunas horas. No puedo dormir, demasiadas emociones y recuerdos me atormentan. Simplemente estoy sentada, tapada con las sábanas, con la mirada perdida.

Noto como alguien abre la puerta de la habitación y se aproxima hasta llegar a la cama. Se sienta y me coge la mano.

- ¿Estás bien Aisa?- no contesto.- Vanessa lamenta su actitud de ayer, ya sabes como es, no se lo tengas en cuenta.-

- No estoy molesta por eso Alice.-

- Entonces... ¿qué te sucede?- pregunta.- Me preocupas Aisa, ayer te ví muy afectada y hoy sigues igual o incluso peor...- suspira.- Sabes que puedes confiar en mí.-

- Lo sé...- susurro.- Es solo que...- tomo aire.- Me siento tan estúpida...-

- ¿Por qué dices eso?-

- Durante años he tenido claro mi objetivo y, sin embargo, en estos últimos meses he sido tan idiota como para sentir cierta simpatía por Horus.- confieso.- Me llegué a plantear muchas cosas... No sé por qué pero me siento extraña a su lado...- intento aguantar las ganas de llorar.- Pero después recuerdo todo lo que su familia me hizo y me siento tan estúpida por dejarme engatusar por su físico y sus palabras bonitas.-

Inevitablemente las lágrimas comienzan a salir por mis ojos. Alice se acerca y me da un tierno abrazo.

- Ey, tranquila...-

- Casi lo echo todo a perder Alice...- lloro.

- Aisa no puedes culparte por sentirte atraída por ese chico.- me acaricia el cabello.- Hemos vivido cosas horribles sí, pero eso no quita que solo tengamos 22 años...- suspiro intentando tranquilizarme.- Es normal que si un hombre con aspecto de príncipe te habla bonito tu cuerpo reaccione de esa manera, lo importante es que mantengas la mente centrada y, sobre todo, que tengas claro que es lo que quieres.-

- Quiero vengar a mi familia.- afirmo con seguridad.

- Entonces ya sabes que tienes que dejar la atracción física atrás, centrarte en lo verdaderamente importante, en hacer justicia.-

- Tienes razón...- digo separándome de ella y mirándola a los ojos.- Es solo una cuestión de físico, no puedo dejar que mis hormonas decidan por mí.-

- Exacto, además ambas sabemos que tu corazón está en otra parte.- me guiña el ojo.

Inmediatamente noto como el rubor aparece en mis mejillas. El solo hecho de pensar en él hace que un soplo de felicidad invada mi interior.

- ¿Dónde estará ahora mismo?-

- No lo sé.- responde mi amiga.- Seguro que está bien y que está hecho un bombón.-

- Quizás ya esté casado...- murmuro.

- No si no es contigo.- ríe dándome un empujoncito.

- Han pasado años desde que nos vimos Alice...- suspiro.- Puede que se haya olvidado de mí.-

- Tú no has podido olvidarlo.- sentencia.- ¿Por qué iba a hacerlo él?-

Sonrío mientras abrazo de nuevo a mi amiga. Me encantaría saber algo más de él... Daría lo que fuera por volverle a ver, aunque fuera durante unos segundos... Él fue mi primer amor, el primer chico del que me enamoré y el único del que estaré enamorada para siempre.

***

(Flashback: 10 años atrás, meses antes del asesinato de los Millers.)

El Central Park de Nueva York es impresionante, y más aún si lo han decorado y preparado para la celebración de un evento social de caridad. Es algo muy normal, mis padres y yo solemos ir a muchos eventos de este tipo, aunque este es algo más especial, pues durará tres días.