Cuando llegué a casa ya había anochecido, y apenas puse un pie dentro papá y el tío Rhoy me abordaron.
—¿Dónde estabas? —preguntó papá.
—Estábamos preocupados por ti —añadio el tío Rhoy.
—Estoy bien —les dije a ambos, con mi vestido en su funda y dos bolsas que contenían los zapatos y accesorios. no tenía muchas ganas de hablar por lo que los dejé en la sala y subí a mi habitación.
Mañana sería la graduación y luego la fiesta, por lo que sería un día largo. Me duché para luego bajar a cenar, no sin antes notar el sobre que me había llegado hace unos semanas. Suspire.
(...)
La graduación había sido en la mañana un evento emotivo, en donde se destacaron las lágrimas de algunos padres. Papá, Lilly y el tío Rhoy habían invitado a mis amigos y a sus padres a un almuerzo en el mejor restaurante de la ciudad, al cual Ben se negó a ir y no voy a negar que no me dolió, los chicos me regalaron sus mejores sonrisas y Lilly un apretón de manos.
Y después de lamentarme por dos horas el hecho de que Ben me rechazase en todos los sentidos, decidí levantarme para arreglarme para la fiesta de graduación.
Mi vestido era azul marino con encaje, sin mangas que caía suelto. me peine con una trenza al estilo frozen y me maquille muy suave y aun así el dolor que sentía en el pecho por la ausencia de Ben no se iba, si no fuese porque le había prometido a las chicas asístir, me hubiese tirado en mi cama a llorar, pero sería fuerte, yo sola me había buscado aquello, yo sola salía.
Me coloqué el relicario de mamá y tome una bandolera en forma de sobre en el cual meti mi celular. Baje las escaleras donde papá me esperaba con su videocámara y el tío Rhoy con su cámara fotográfica.
—Muy bien, sonríe —dijo papá. Lo cual hice, aunque me estuviese muriendo por dentro, ellos no tenían la culpa de absolutamente nada. El dejó la cámara de lado— mi princesa que hermosa te ves.
—Tan hermosa como su madre —lo secundo el tío Rhoy.
—Ella estaría muy orgullosa de la grandiosa hija que le tocó —dijo Lilly y mis ojos se cristalizaron. Ellos se acercaron a abrazarme.
—Creo que ya es hora de irme —dije y ellos asintieron, salí de la casa y subí al auto donde ya Peter me esperaba.
La fiesta se celebraría en el salón de eventos en un club muy popular de la ciudad, cortesía de Rhoy Vanderwall. Baje del auto, y apenas puse un pie en la banqueta pude apreciar la decoración, la cual era muy esplendorosa, los chicos me esperaban fuera donde no dejaban de tomar fotografías y de Ben no había rastros, ignore la punzada de dolor.
—Cassy —exclamó Hannah apenas me vio. Ella llevaba un hermoso vestido azul agua o algo parecido, era largo y tenía pedrería en el corpiño y las mangas llegaban hasta las muñecas. En cambio, Sophie llevaba un vestido rosa pálido y Sara uno más provocativo en blanco. Ambos chicos llevaban sus trajes incompletos. Negué con la cabeza, no tenían remedio. Tyler silbó.
—¿Dónde has estado toda mi vida? —preguntó y yo reí— semejante belleza sin igual —exclamó y los demás reímos.
—Venga ya, disfrutemos esta noche —dijo Sophie, guiándonos a la recepción. todo estaba muy hermoso. había un escenario donde un dj mezclaba canción tras canción y lo hacía genial, las mesas repartidas alrededor de la pista de baile y al final una mesa con bocadillos y bebidas. Nos metimos a la pista de baile, los chicos bailaban sin parar demostrando que no por nada habíamos ganado un concurso nacional, mientras reían y tomaban fotografías.
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Los Colores de una Mentira ©®
Teen FictionUna Mentira iniciara la vida de Cassy. Se sumergerá en una burbuja que se inflara cada vez mas. Una nueva identidad. Nuevo color de cabello. Nuevo color de ojos y el mundo debe seguir girando. Amigos, risas, aventuras, competencias y un sin fin de e...