«"Ella es devastadora, si supiera lo loco que me vuelve con una mirada, jamás dudaría de lo que siento por ella"»
Samantha Sánchez consiguió un trabajo como secretaria en una empresa prestigiosa, con los fantasmas de su pasado tocando a su puerta s...
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Flash Back
Estaba en mi escritorio firmando algunos papeles para después llevárselos a Ethan, estos 2 meses que llevo trabajando para él han sido excelentes me siento súper cómoda con él y no le tengo que decir Sr. Jonás a cada rato porque se siente raro decirle a alguien casi de tu misma edad Sr.
Cuando ya están listas las hojas, me levanto de mi silla, salgo de mi oficina y me voy hacia la de Ethan, cuando llego toco la puerta y espero el pase, entro a la oficina y lo veo entretenido en la computadora escribiendo algo, cuando cierro la puerta detrás de mí él alza la mirada de lo que estaba haciendo para mirarme.
- ¿Ya están listos los papeles? –pregunto Ethan alzando una ceja sin dejar de mirarme, ok no sé lo que le está pasando, pero es muy raro que él me esté hablando así.
-Si aquí los tienes-dije entregándole los papeles en la mano-bueno eso era todo ¿puedo irme ya? -le pregunto ya que no quiero irme sin saber si me necesita o algo así.
-No, aun te necesito aquí-dijo tajante Ethan volviendo a ver su computadora, eso hizo que me tomara por sorpresa la manera en cómo me hablo.
- ¿Qué necesitas que haga? –le pregunte con timidez sin dejar de verlo, el solo dejo a un lado una carpeta que contenía más hojas para firmar, solo pude soltar un suspiro para después ir hacia donde estaba la carpeta, lo agarre y cuando me dispuse a irme, me quede un momento ahí pensando en si le preguntaba que le pasaba.
-Oye ¿te sucede algo? –dije volteando a verlo con confusión, necesito saber lo que le está pasando, estos dos meses han sido excelentes con él, pero ahora no sé qué pasa.
-Tú ya deberías de saber eso o ¿no? –dijo de forma seca sin voltear a verme, eso hizo que tragara en seco y me quedara más confundida de lo que ya estaba.
-La verdad no sé de qué estás hablando-dije con nervios, puede ser que ya sabe porque vine a este país o no sé, eso hace que me ponga a un más nerviosa.
-Por favor Samantha no te hagas, después de la vergüenza que me hiciste pasar con esos reporteros ¿crees que te seguiría hablando de la misma forma que antes? –dijo de forma sarcástica y seca, pero si él me dijo ese día que todo estaba bien que no tenía por qué preocuparme por lo que hice que no fue mi culpa.
-Pero tu dijiste que no me tenía que preocupar que no fue mi culpa-dije tratando de que mis lágrimas no salieran, creo que esto no terminara bien para los dos y más para mí.
-Pues no tuve que haberte dicho eso, gracias a ti ahora los paparazis rondan por mi casa-dijo el muy enojado logrando que me sobresaltara en mi lugar-y gracias a eso, tendré que decirle a mi padre que habrá una treguan entre la familia Masson porque mi secretaria le dijo a una reportera que estábamos planeando dejar nuestra rivalidad con ellos-bien esto fue suficiente no puedo hacer que me deje en ridículo tratándome como si fuera una tonta y no tuviera sentimientos.
- ¡Ok! Ya entendí, hice mal en decir eso, pero si no lo hacía descubrirían que en esta empresa le está yendo mal económicamente, debería de agradecerme en vez de estar reclamándome algo que se puede solucionar fácilmente pidiendo perdón-dije soltando todo lo que tenía retenido desde el momento en que empezamos a hablar sobre el tema.
-Sí y te lo agradezco, pero ahora tengo este problema enzima al cual no sé cómo hacer gracias a ti-dijo con frialdad haciendo que m e estremezca en mi lugar, pero trate de que no viera que me afecta-asique no te iras de aquí hasta que los papeles que te di que son los asuntos importantes de los Masson esté terminada-y eso fue lo último que me dijo para después yo salir de ahí con rapidez.
Después de todo lo que he hecho por el me trata mal, grandioso ahora tengo a un jefe que me odia y para completar este sufrimiento tengo que terminar los papeleos por él, no me puedo quejar porque esto lo cause yo sola y yo sola tengo que corregirlo.
Cuando llegue a mi oficina me dispuse a comenzar a trabajar en esos papeles, no media el tiempo en la que me pasaba corrigiendo, escribiendo y firmando, hasta que mi alarma de las 12 sonó con una música de feliz cumpleaños, genial pasare mi cumpleaños metida en esta oficina terminando mi problema.
¡Feliz cumpleaños a mí! el 22 del 4 fecha en la que nací, debería de ir por lo menos a buscarme un cup cake y cantarme feliz cumpleaños, pero soy detenida al ver como Isabel entra en mi oficina con uno en sus manos, eso hace que mi noche sea un poco más feliz.
- ¡Feliz Cumpleaños Sami! Pide un deseo-dijo con emoción Isabel mientras que le regalo una sonrisa y le soplo a la vela.
-Gracias Isa no tenías que haberlo hecho te quiero demasiado-dije dándole una sonrisa tierna y ella soltó una risa mientras se encogía de hombros.
-Si era necesario eres mi mejor amiga y cumples años, te meres esto y más eres la mejor-dijo sin dejar de sonreír para después abrazarme.
-Por eso te adoro demasiado-dije sin deshacer el abrazo mientras reíamos sin parar.
Y así fue como la pase toda la noche con Isabel entre bromas y cupcakes hasta terminar de hacer el papeleo, también le conté como su primo me trato el día de hoy, logrando que ella quisiera ir hacia su oficina y darle una paliza, pero le dije que lo dejara así y que solo iría yo a entregarle los papeles, solo entre en la oficina de Ethan le di la carpeta con los papeles y me fui de ahí con una sonrisa para después en mi casa seguir en la charla con Isabel.
