La cima

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La noche parece durar muy poco, hundidos en la felicidad del momento que me aparta de las pesadillas habituales. Al despertar tomo un baño rápido, le doy desayuno a Nadia y luego Peeta y yo vamos a dejarla a casa de Haymitch para ir a la cita con la ginecóloga. Aun no les hemos dicho la nueva noticia, queremos esperar hasta regresar de la cita.

- Buenos días, tengo una cita para las 9am. –le digo a la recepcionista-

- Sra. Mellark, buenos días. Si, tiene una cita para una ecografía. –me sonríe- por favor espere sentada allí –señala la pequeña sala de espera- le llamaremos un unos instantes.

- Gracias. –ella asiente y nosotros tomamos asiento-

- Estas emocionada? –Peeta me pregunta-

- Solo quiero asegurarme de que todo esté bien, no te lo había contado pero hace dos días tuve un sangrado, pensé que era, ya sabes mi periodo pero eso no puede ser posible. –su rostro se torna preocupado-

- Debiste haberlo dicho –tensa el rostro- le preguntaremos a la doctora. –yo asiento-

- Sra. Mellark, la doctora Sia la espera. –una enfermera en su uniforme blanco aparece y yo me levanto de la mano de Peeta, ella se adelanta para indicarnos el camino y cuando llegamos, nos recibe la doctora-

- Katniss, que gusto verte de nuevo y oh, trajiste a tu esposo.

- Insistió, espero no haya problema.

- Claro que no, ya lo sabes. –se pone de pie y se acerca hacia mi- Bueno, ya sabes que hacer. –me señala la cama- Sr. Mellark, puede tomar asiento aquí. –le señala una silla junto a la cama y Peeta lo hace- Esta vez se puso un vestido ha? Muy inteligente. –me levanto el vestido y ella me cubre con una sabana de las bragas hacia abajo- Bien, esto estará frio. –con rapidez me pone el gel en el vientre y luego comienza a mover el aparato sobre mi- Uhm, si, aquí está tu bebe. –yo sinceramente no identifico nada, solo un pequeño bulto negro- Tienes alrededor de 4 semanas… sabes, encuentro fascinante que no notaras tu embarazo.

- Bueno, es que con el sangrado que tuve… me confundí.

- Apropósito de eso… -comienza a hablar Peeta, quien estoy segura no se alegrara de ver a nuestro bebe hasta que se asegure que no hay nada malo-  Porque pudo ser que ella tuviera eso? Me refiero a que si no puede ser que haya algo malo con el bebe?

- Los sangrados en las primeras semanas del embarazo son normales, y hay muchas razones para tenerlos… puede ser por tener relaciones sexuales, una infección, incluso puede haber sangrado cuando el ovulo fecundado se implanta en el útero, pero en todo caso, es normal, siempre y cuando no sea algo mayor. –oh bueno, entonces ahora ya sé porque fue-

- Oh! –dice Peeta y creo que el también sabe porque fue- entonces todo está bien?

- Absolutamente bien. –la doctora captura la imagen de nuestro bebe y la imprime- Ya sabes, debes tomar el acido fólico, vitaminas, bueno… esta de mas decirte todas las recomendaciones que ya sabe. –me entrega la foto y yo la contemplo antes de limpiarme y ponerme de pie- 

- Doctora, tengo una duda. -le digo cuando ya me he bajado el vestido y ella voltea a verme- La vez pasada tuve una cesárea de emergencia, es que no podre dar a luz naturalmente esta vez?

- Pues, eso depende de lo que diga el cirujano que la atendió. Cuál es su nombre?

- Ahm, no… no lo recuerdo.

- Ryan, Ryan Buckland. –dice Peeta-

- Gracias, yo consultare con el su caso y en su próxima cita le informare. Ya sabe, debe venir dentro de un mes. Y recuerde tomar sus vitaminas.

- Gracias doctora.

- Gracias –Peeta estira la mano hacia ella y ella la acepta-

- De nada, los veo aquí dentro de un mes, agendare la cita Katniss.

- Perfecto, adiós. –salimos y vamos a recepción a pagar-

Pasamos el recorrido a casa hablando sobre lo que nos ha dicho la doctora, tengo el sentimiento de que este embarazo va a ser más fácil de llevar, porque ya se las cosas que antes desconocía por completo. Y además, ahora puedo estar segura de que Peeta permanecerá a mi lado todo el tiempo. El hace que esto sea más fácil, porque seguramente las pesadillas volverán al paso del tiempo y necesito que el este allí cuando eso suceda.

- Que dices si le decimos a Haymitch ya? –Peeta me saca de mis pensamientos-

- Quieres hacerlo ya?

- Por supuesto, quiero que sepan lo feliz que estoy.

- Estamos. –le corrijo y me sonríe-

- Que estamos, claro!

Llegamos a casa de Haymitch y entramos sin tocar la puerta, ya se siente como nuestra segunda casa de todas formas. Localizamos a Effie, Haymitch y Nadia en el salón, la pareja bebe te caliente mientras miran a nuestra hija jugar imparablemente.

- Vaya, miren quienes llegaron… los raros, creo que merecemos una explicación de por qué desaparecen tanto últimamente. –dice Haymitch en modo de queja-

- Si, la merecen y se lo diremos. –dice Peeta- Lista? –me pregunta-

Lista? Para el bebe #2? Para lo que me espera? No puedo negar que tengo miedo, pero esta vez es un poco menos, quizás porque ya sé que toda esta llama se apagara una vez que tenga a mi bebe entre mis brazos y de nuevo me convertiré en madre, en quien soy ahora, una Katniss diferente a quien lucho en la guerra. Deje de pensar solamente en mí, para pensar en Peeta y luego en Nadia, mi hija… quien me alegra la existencia con su sola presencia. Y ahora, también pensare en esta nueva vida que crece dentro de mí, esta personita que llevo dentro y ya amo con toda mi alma. El terror de que cualquier día vengan y me roben lo que más amo en mi vida, no se compara con la alegría de tenerlo junto a mí, y es que la verdad tengo más de lo que jamás imagine tener. Y aquí estoy de nuevo por convertirme en madre junto al hombre que más amo. Así que sí, estoy lista. 

- Si. –suspiro-

- Bien, pues Katniss y yo… -me mira y me levanta la ceja en gesto para que yo continúe-

- Vamos a ser padres… otra vez. –les digo y hay un largo silencio en el que puedo contemplar sus expresiones, Effie levanta mucho las cejas en señal de sorpresa, Haymitch abre la boca y luego la convierte en sonrisa, están felices, tanto como nosotros-

- ¿Qué? –dice Haymitch mientras se pone de pie-

- Sí, estoy embarazada. –Effie se lleva ambas manos a la boca-

- Preciosa, esa es una… una gran noticia! –Haymitch se acerca a mí para abrazarme con mucho entusiasmo- Felicidades. –me ve a los ojos y veo que los suyos reflejan felicidad- Felicidades a ambos. –ahora abraza a Peeta dándole golpes en la espalda- Muchacho, eres un padre excelente y ahora tendrás dos… Qué alegría! –creo que las lagrimas han comenzado a salir-

- Oh mis niños, estoy sin palabras. –Effie llorosa nos abraza a ambos- Estoy muy feliz por ustedes y por nosotros, de verdad que es algo hermoso tener a tu hija a nuestro alrededor y ahora tendremos a otra.

- U otro. –señala Peeta-

- Cierto, puede que este sea el muchachito. –Haymitch pone su mano en mi vientre-

- Ugh, hombres… -dice Effie- No me mal interpretes Katniss, no es que no quiera que tengas un varón, es solo que estos dos siempre alardean por su género.

- Te entiendo. –me rio-

- No es alardear, es que Nadia necesita un hermano que cuide de ella. –puntualiza Haymitch-  

- Bueno, en eso debo darle la razón. –acepto-

- Pues ya va, prepare una cena en honor a esa gran noticia. –dice Effie-

Y entonces pasamos la tarde en casa de ellos, cenando y riendo, hablando de cómo será esta nueva aventura. 

SiluetasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora