¿Amor a primera vista? TE VEO CON EL CORAZÓN

XLV

Christian consiguió tranquilizarse en cuanto le confirmaron que sus guardias y Anastasia estaban fuera de peligro. Aunque la golpiza que ella recibió fue muy fuerte según lo descrito por Mia y Kate, que fueron las que encontraron a Ana así.

Los Grey cerraron filas y todos estaban en el hospital para darle tranquilidad a Christian y apoyando a Anastasia.

Elliot y Jack se mantienen apartados del resto reflexionando qué pudo haber sucedido para que a Ana la atacarán de esa forma tan violenta y cruel, pero después de darle mil vueltas al asunto, no llegaron a ninguna conclusión.

***

Welch está por saber de lo sucedido...

—Welch...
—¡¿Quién carajos estaba a cargo de la seguridad de mí mujer?!— escucha una furiosa voz que lo interrumpe al responder el teléfono.

Se aparta el auricular del oído y ve en la pantalla el nombre de Christian Grey.

—Sus hermanos asignaron a los guardias. Muy recomendados todos por mí, claro está— responde Welch, incómodo por esa pregunta.
—¿Ah sí?
—Si, ¿porqué, señor?
—Porque están hospitalizados con heridas de bala y mi mujer, Anastasia está también internada por una golpiza que recibió, ve tú a saber por quién...
—¡¿Qué?!— chilla azotado por lo que escucha.
—¡Si, Marcus! Y voy a querer la cabeza de él o los hijos de puta que hicieron ésto en una bandeja...
—Señor, necesito que se tranquilice y me explique con calma...
—¡¿Qué coño quieres que te explique, Marcus?! Mi hermana y Katherine Kavanagh fueron a visitar a Anastasia a su casa y la encontraron en su sala, atada de pies y manos y golpeada hasta quedar irreconocible, a tus hombres heridos y ocultos en el porche y ¡¡¡quiero respuestas ahora!!!

Escucha como se corta de golpe la llamada.

Pocas veces ha escuchado iracundo a Christian, pero esa vez no solo estaba furioso, estaba aterrado y deseoso de venganza.

Ni siquiera cuando supo del accidente en el que quedó invidente y casi muere estaba así.

No por nada estaba como agente del FBI, estuvo a lado de Raymond Steele y de Franklin Lambert en el ejército cuando fueron a combatir en Siria, y sabía bien cuando un hombre exigía justicia y cuando exigía retribución. Y Christian estaba exactamente en la segunda categoría.

Se habían metido con lo que más valora y ama Christian, y eso no lo iba a permitir. Naturalmente exigía venganza, pero necesitaba todos los detalles, porque no tenía idea de dónde comenzar... O más bien, sí sabía, pero no por ello, será fácil.

***

—Bruce Dikens, director general— responde Franklin en el interno de su despacho en la oficina de Seattle del buró.
—Soy Marcus— le responde con voz sombría.
—¿Qué tal?
—De puta madre...— responde con ironía Welch.

Estaba confundido. No se tenía conocimiento de quién o porqué atacaron a Anastasia, pero es seguro que a Franklin le haría ninguna gracia.

—¿Y eso?
—Te tengo novedades, y no querrás saberlas.
—Marcus, por favor.
—Es sobre tu hija.
—¡¿Qué?!
—Lo lamento, Frank, pero Anastasia fue atacada a golpes en su casa...
—¡¿Qué dices...?!
—Fue encontrada junto a los guardias que asignamos por órdenes de Christian Grey y todos muy mal heridos... Los internaron a todos en el Victoria Mason.
—¿Es broma?!
—No, y tú yerno quiere venganza.
—Somos dos.

Franklin toma su chaqueta y sale disparado al centro médico. Tiene que hacer lo que debió de haber hecho desde que nació su hija.