EL INICIO

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Washington, Estados Unidos.
9 de marzo de 2012

Pike Market Place, Departamento 7

-Ana, suéltalo. - Kate le pide a su amiga que se aparte de su padre para que lo lleven a la morgue.
-¡No! ¡Papá, por favor despierta!- gime Ana y abraza el cadáver inerte de Raymond.
-Ana, ya se ha ido. - Le insiste su amiga y logra apartar a su amiga.

Tras diez minutos, entran los servicios de emergencia para levantar el cadáver de Raymond Steele y seguir el procedimiento de rigor antes de despedirle para siempre.

-No estaba lista...
-Nunca se está listo, pero saldrás adelante.

Kate le responde con franqueza a Ana. Por doloroso que sea, lo mejor es la verdad.

Ana se abraza a su amiga como si no hubiera un mañana y la admira por su fortaleza.

Kate sabe bien lo que es una pérdida.

Salen las dos abrazadas. Se encuentran con John y Ethan en la puerta del edificio y se disponen a comenzar. Horas difíciles se les aproximan.

• • •

Centro médico Virginia Mason

-¿Christian, hermano, estás bien?- Elliot se acerca a la cama al ver que su hermano ha despertado.

Christian trata de ver lo que tiene frente a él, pero todo está oscuro.

-Lelliot, enciende las luces. No sé por qué las apagas- protesta furioso Christian.

Elliot se acerca a él y le hace muecas y gestos obcenos. Hasta que escucha cómo golpean el suelo unos zapatos. Se gira y ve a su madre en el umbral de la puerta.

-Hola, ma...- le saluda tratando de disimular la vergüenza.
-Muy bonito, Elliot- le dice su madre en tono reprobatorio.
-¿Grace, estás ahí?- Christian llama a su madre.
-Si, hijo. ¿Qué pasa?
-Dile al idiota de Lelliot que encienda las luces.

Grace mira a Elliot confundida y él solo se encoge de hombros.

-¿Qué dices hijo? Las luces están encendidas.
-¿Porque no puedo ver? Madre, ¿qué me pasa?.

Ella al escuchar a su hijo tan asustado mira a su otro hijo que traga saliva preocupado.

-Mamá, creí que me quería jugar una broma...- se excusa Elliot.
-Esperen aquí, llamaré al doctor Crowe.

Grace sale corriendo de la habitación y Elliot le estrecha con fuerza la mano a Christian, que a tientas lo buscaba.

Muchas personas llegan al mundo todos los días...
También muchas personas se van...
Pero,
hay quienes reciben otra oportunidad.
La clave está en saber distinguirlas y aferrarse a ellas con ambas manos.
Este capítulo lo dedico con mucho cariño a mi querida @Luz-Grey.

¿Amor a primera vista? TE VEO CON EL CORAZÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora