Diferentes [KookMin/TaeGi]

Nada sale bien para Jimin.

Una semana paso desde que Jungkook y Jimin se reconciliaron. Una semana desde que Yoongi y Taehyung se veían a escondidas en la casa de Namjoon y Seokjin. Y una semana desde que Hoseok estaba yendo a comprar chicles al mercado donde trabajaba Haneul. También como por lo general se hacía, hoy, viernes por la noche había una fiesta en el bar donde trabajaba Jimin. Como la mayoría de las veces, quienes trabajarían serian Jimin y Haneul, y como eran muchos los invitados, necesitaban una persona más. ¿Quién sería? Seokjin, ya estaba muchísimo mejor y necesitaba el dinero ya que quería otro tatuaje.

Estaban preparando todo el bar, fajinando vasos, arreglando las mesas, limpiando. Ya se acercaba la hora de abrir las puertas para que poco a poco entraran las personas. Al cabo de un rato, todos estaban en sus puestos, Jimin, Jin y Haneul en la barra y el resto repartidos en sus debidos puestos. Abrieron las puertas y como dicho anteriormente, poco a poco fueron entrando las personas. A los cinco minutos de abrir aparecieron V y Jungkook, obviamente ambos fueron directo a la barra, se sentaron en las banquetas de ahí y comenzaron a hablar con los tres.

- Y... Haneul, ¿Ya te conquisto Hoseok? – Pregunto Taehyung con una sonrisa pícara, los otros tres chicos rieron y luego la miraron curiosos por su respuesta, la chica solo sonrió levemente y bastante roja, a decir verdad.

- ¿De qué hablas...? – Murmuro apenada la chica, todos rieron y Jin palmeo su cabeza con suavidad.

- Pero si Hobi es un caramelo, ¿Cómo no va a caer a sus pies? – Comento Jungkook, Jimin lo miro sorprendido. – No te pongas celoso, Jimin-ssi.

Los presentes soltaron una carcajada y el peliazul se ruborizo para luego besar la mejilla del castaño. Y así fueron pasando el rato, hasta que una mesera llamo a Jimin, él se sorprendió y se acercó a ella con una sonrisa.

- ¿Qué pasa Mai?

- Hay una chica que quiere hablar con vos, le dije que no te interesa... Ella. – Al decir eso soltó una risita y el también. – Pero insiste Jimin.

- Tranquila, yo voy Mai. ¿Qué mesa es? – Mai señalo la mesa y el chico miro en dirección y noto que ahí estaba Naomi, con unas personas más, suspiro y le agradeció a su compañera para luego encaminarse a esa mesa, al llegar todos levantaron la mirada y Naomi sonrió.

- Quiero un Mojito. – Dijo de la nada.

- Lo siento, las bebidas se piden en la barra. – Intento sonar amable el peliazul.

- Oh no modelito, te dije que quiero un mojito, vas y lo haces, lo traes y hasta que yo no lo termino no te vas.

- Oh no arpía, no voy a hacer eso. Atiendo a todos por igual, no voy a hacer una excepción. – Le dijo con una sonrisa e hizo una pequeña reverencia para irse, pero en ese momento Naomi le dio una cachetada, las personas más cercanas a esa mesa escucharon el ruido de la palma de la mano contra la mejilla del peliazul y se giraron a ver.

- ¡¿Quién te crees?! ¡Un busca fortunas no me va a humillar así! – Grito exasperada. Jimin se levantó con una sonrisa burlona, se acercó a su oído.

- Cariño, te estas humillando sola... - Susurro y luego se alejó de esa mesa para volver a la barra.

Al volver a la barra paso por detrás de Jungkook y acaricio su espalda con sus uñas, al estar separados por la barra se sonrieron coquetamente y siguió con su trabajo, pero esa noche no iba a terminar tan bien como todos creían. Jimin se sentía tan bien al haber enfrentado así a Naomi, pero no todo le sale bien a Jimin y a ninguno de sus amigos. Luego de unas dos horas Jin tuvo que sentarse por su dolor de costillas, el había creído que estaba bien pero no era así, esas tres o cuatro horas atendiendo habían sido cansadoras y sus costillas lo soportaron hasta ahí, estaba en una banqueta entremedio de V y Jungkook, unos treinta minutos después llegaron tres chicos a pedir cervezas, Haneul, quien era la única desocupada en ese momento los atendió.