28. Enseñarle

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Liam sonrió a su hermana, observándola parlotear sin sentido sobre una vendedora que quiso cobrarle más dinero del necesario por una camiseta mientras intentaba comer su comida sin hacer un desastre de sí misma al mismo tiempo. El cuchillo se resbaló de sus dedos por quinta vez consecutiva cuando se dispuso a cortar la carne de su plato. Frunciendole el ceño a la comida, soltó un bufido.

-¡A la mierda, seré un cerdo! -aseguró, tomando la carne con los dedos y comenzando a comer sin ningún tipo de modal.

-Mamá te arrancaría la cabeza si te viera hacer eso, mal aprendida. -la reprendió suavemente.

-¿Por qué Zayn puede hacerlo y yo no?

Miró a su lado, viendo que Zayn estaba luchando con su propio trozo de carne y tenía todo el rostro manchado de salsa-. Bebé, estás haciendo un desastre de ti mismo.

-Uh -esos grandes ojos ámbar parpadearon hacia él mientras su lengua salía a lamer el lío sobre sus labios-. Está rico, Li.

-Me di cuenta -rió suavemente, tomando una servilleta cercana y limpiando un poco su rostro antes de dejar un dulce beso en sus labios.

-Ow... ¡Lucy también quiere amor! -su hermana golpeó las manos sobre la mesa, lloriqueando falsamente-. Mi vida es cruel.

-¡Yo te daré amor! -Harry aseguró, arrojándose hacia ella y rodeandola con sus brazos.

-Tu eres gay. -le recordó con el ceño fruncido.

-Los gays también podemos dar amor -enmarcando su rostro con sus grandes manos, le planto un beso en los llamativos labios rojos-. ¡Ahí tienes tu amor!

-¡Hey, esa es mi hermana! -se quejó Liam.

-Tranquilo, bro -Lucy le guiñó un ojo, apartando al rizado-. Harry es solo un prostituto de besos, no te preocupes.

-¿Uh?

-Harry le da besos a todo el mundo -explicó Zayn, chupando sus dedos mientras miraba a Liam-. Hasta besó a Niall -sacudio la cabeza suavemente en desaprobación-. A Niall no le gustó eso y golpeó a Harry.

-¿Tenías que contarles eso?

Zayn parpadeo hacia el rizado-. Lo siento, ¿puedo contarle cuando intentaste besar a Lou y te arrojo su soda en la cara?

-Ya lo hiciste -bufó-. Mal amigo.

El moreno le enseñó la lengua desde el otro lado de la mesa pero no parecía realmente arrepentido de haber soltado aquello. Liam rió entre dientes, dejando más servilletas al alcance de Zayn pero esta vez no detuvo al chico de ensuciarse, era simplemente imposible pero no le molestaba. Además, Lucy estaba haciendo exactamente lo mismo del otro lado.

Harry suspiró de pronto, su mirada perdida en el espacio-. ¿Como puedo conquistar a un chico hetero?

Los demás en la mesa se miraron confundidos, Lucy habló-. Cortatela.

-Ja, ja, graciosita -ironizó antes de mirar a Zayn-. Tú, enano, dime cómo conquistaste al grandote.

-Hey, no te metas con mi estado físico -se defendió Liam-. Y yo no soy hetero, nunca lo he sido.

-¿Qué pasa con Maia, Veronica y Meghan?

-Amigas -Zayn pellizco su brazo, logrando que se diera vuelta para ver su ceño fruncido, el hecho de que estaba embarrado en salsa solo lo hacía verse adorable-. Son amigas, bebé, lo juro. Nunca fueron más que eso.

-Eso está bien. -dijo sin quitar el ceño fruncido. Liam sonrió y besó la punta de su nariz.

-Pequeño celoso.

Stockholm Syndrome |Ziam|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora