Liam parpadeo rápidamente, su mente estaba algo ida y aun podia sentir el tenue aroma dulce rondando su nariz y algo molesto sobre su boca. Cuando intento alcanzar su nariz para alejar el molesto aroma junto con la sensación, se encontró con que no podia hacerlo. Mirando sobre su cabeza, con un poco de trabajo, observo en shock las corbatas atadas a sus muñecas. Alejando lo que quedaba del sueño en sus ojos, jaló con toda sus fuerzas de las cuerdas sin lograr nada.
Luego de un par de intentos observo como su piel comenzaba a colorearse de forma horrible. Con un suspiro se dejo caer sobre las almohadas y miró a su alrededor. La habitación era pequeña, habia algunos posters de cantantes aquí y allá y un pequeño escritorio con un portatil encima de un escritorio a pocos metros, un closet en un rincón y una alfombra morada en el suelo. Él no conocia ese lugar, de eso estaba totalmente seguro.
Recordaba haber estado escapando de los periodistas luego de que lo siguieran a un motel donde se habia encontrado con uno de sus amantes. Se habia escurrido lejos de sus malditas camaras con flashes gracias a un callejón cercano pero en el momento que habia respirado con alivio, un paño con aroma dulce habia sido colocado sobre su boca y nariz. Aunque jamás lo habia experimentado antes, sabia que habia sido drogado con cloroformo y al parecer, secuestrado. La pregunta era ¿por qué y para qué?
Una figura delgada, sosteniendo una bandeja demasiado grande para su pequeño tamaño, traspasó el umbral de la puerta logrando arrancar a Liam de sus pensamientos. El cabello lacio, de un tono tan oscuro como una noche sin estrellas, cubria el rostro del chico mientras cerraba la puerta detrás de su espalda con una patada y caminaba hacia Liam. La cabeza subio y los ojos marrones, rodeados de abundantes pestañas oscuras lo miraron con sorpresa.
-Oh, estas despierto. -la voz era dulce y baja cuando el chico hablo. Liam miró con atención como el joven dejaba la bandeja sobre una mesa cercana y se acercaba a él, mirando con el ceño fruncido sus manos-. Intentaste desatarte, ¿verdad? -alcanzó sus muñecas y rozó la zona con la punta de sus dedos-. Lo siento mucho pero si las aflojo tu te irias y yo me meteria en problemas.
Liam intentó hablar pero la cinta cubriendo su boca se lo impidio. Miró a su captor con el ceño fruncido y vio con asombro como la mano del chico temblaba mientras se acercaba a su rostro.
-Te quitaré la cinta, ¿si? -susurró-. Pero, por favor, no grites.
Liam asintió en respuesta y jadeo de dolor cuando el niño tomó la cinta por un extremo y la jaló con rapidez.
-¡Jodida mierda!
-Lo siento, lo siento, lo siento -el chico dio un par de pasos hacia atrás, mirando a Liam con los ojos inundados de lagrimas y una oscura expresion de horror, como si este fuera a ponerse de pie y golpearlo en cualquier momento-. Era la única manera de quitarla, si lo hacia lento te hubiese dolido más. Lo siento.
-Lo sé, esta bien -hablo con voz suave, de repente desesperado por calmar al chico tembloroso frente a él. Frunció el ceño ante ese pensamiento, recordandose que el chico era quien lo tenia secuestrado, despues de todo-. ¿Donde estoy? -el moreno movio su peso de un pie a otro y dirigio su mirada al suelo, sin decir nada. Liam decidio que intentaria con algo más basico:-¿Como te llamas?
-Zayn. -mustió.
-¿Zayn? Es un lindo nombre -aceptó-. ¿Puedes decirme donde estamos?
Zayn miró a los lados con el ceño fruncido, como si estuviese pensandolo antes de decir:-. En mi casa.
-¿Por que estoy en tu casa, Zayn?
-Mi... -apretó los labios juntos y miró la punta de sus pies.
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Stockholm Syndrome |Ziam|
Hayran KurguAutora: @Always_nina Quiero aclarar que esta historia NO es mía, es de Always_nina así que todos los créditos son para ella. Me comuniqué con ella y me autorizó subir sus anteriores historias, l@s invito a que vayan a su perfil y lean sus nuevas his...