09. Cosquillas

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Acurrucandose en la esquina del sofá, Zayn observó a Liam comer sobre su cama. El castaño había insistido en que se sentara con él pero se había negado a ello. No sabia lo que estaba sucediendo con él pero estaba asustado de las cosquillas que sentía en su estómago cuando el otro lo tocaba, eso no podía ser bueno. Tal vez había comido algo que estaba malo, se dijo a sí mismo pero luego de pensar durante unos minutos, recordó que ni siquiera había desayunado, así que eso no podía ser.

¿Y si se estaba enfermando? Niall había dicho que estaba bien pero tal vez se le había pasado eso. Él se había concentrado en su corazón, no en su estómago. Tenía que llamarlo para que volviera a revisarlo, si, eso tenía que hacer.

Bajando las piernas del sofá con cuidado, se levantó del mismo y se acercó a la mesa de luz, tomando su teléfono. Liam lo miró confuso cuando se dirigió a la puerta -¿A donde vas?

-Tengo que llamar a Niall. –musitó, arrastrando los pies.

-¿Te sientes mal de nuevo?

-No –negó rápidamente al ver la mirada preocupada del castaño-. Es solo que... tengo que hablar con él, ¿si? Ya vuelvo.

-Esta bien. –no parecía muy convencido pero no dijo nada para detenerlo.

Abriendo la puerta, Zayn salió al pasillo y la cerró detrás suyo antes de apoyar la espalda en la pared a un lado, arrastrandose contra ella hasta que su trasero toco el suelo. Colocando sus piernas estilo buda, encendió su teléfono y busco el numero agendado como "Doc". Apretando el botón de llamada, se lo llevó al oído.

-¿Zayn? –la voz de Niall se escuchó preocupada cuando atendió– ¿Qué sucede, cariño? ¿Te estás sintiendo mal?

-Yo... no sé.

-¿Te duele el pecho o tienes falta de aire? –preguntó, pudo escuchar voces ahogadas detrás lo que le dijo que estaba en el hospital.

-Si pero no es malo, no duele.

Mordisqueando la uña de su pulgar, esperó a que el otro dijese algo- Tienes que ser más claro, dime lo que te sucede.

-No sé, Ni –sintió su labio inferior temblar-. Creo que algo malo pasa conmigo, mi panza tiene cosquillas y a veces me falta el aire y mi corazón late muy rápido.

Hubo un segundo de silencio-. ¿Y dices que no te duele nada?

-No, no duele. Es bonito.

-¿Esto pasa cuando alguien en particular te toca o habla contigo? -dijo y Zayn podia escuchar la sonrisa en su voz, lo que hizo que su ceño se frunciera.

-Si –susurró a punto de llorar-. ¿Me pasa algo malo, Ni?

-No, cariño, no pasa nada malo contigo. -rió.

Zayn soltó un suspiro aliviado pero eso no duró mucho cuando se dio cuenta que Niall se estaba riendo de él. No le gustaba eso, estaba preocupado por su salud y su doctor estaba tomándolo como una broma. Esto era serio.

-No te rías de mi. -gruño con sus ojos aun llenos de lágrimas contenidas-. Estas siendo un mal doctor, Niall, esto es serio.

-Tienes razón -se aclaró la garganta aunque aun podía escuchar rastros de diversión cuando hablo-. ¿Quién es la persona que causa estas cosas en ti?

-No puedo decirte eso. -susurró-. Es un secreto.

-Soy tu medico, debo saber todos los detalles. -presionó.

El moreno pensó en ello un segundo antes de sacudir la cabeza- Lo siento, no puedo decírtelo.

-Bien -suspiró–. Pero esta persona te trata bien, ¿no?

Stockholm Syndrome |Ziam|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora