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NIGHT WITH THE WOLFS

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NIGHT WITH THE WOLFS

LYRA.
Ya habían pasado algunos días y hoy por fin era luna llena, Jackson y Camille me habían ayudado a llevarme con algunos de la manada pero aún no conocía al alfa, tenía intriga de saber quién era en realidad. Jackson y Camille venían a dejarme a la salida trasera de la escuela para que fuera con los demás.

— Debemos advertirte, los lobos pueden ser un poco rudos si no los conoces y ten cuidado cuando se transformen, olvidan hasta a sus propios amigos —decía Camille.

— Una vez salí con un hombre lobo, son buenos para algunas cosas pero también agresivos —comentó Jackson.

— ¿Y eso que tiene que ver? —le pregunté.

— Sólo era un comentario —se encogió de hombros.

— Eres un asqueroso, Jackson —se rió Camille.

— Este asqueroso —Jackson se señaló a sí mismo y nos miró— es tu mejor amigo.

— Pueden dejarme hasta aquí, gracias chicos —les dije sonriendo.

— Camille quería ir a ver al alfa —se burló Jackson codeando a Camille, ella se puso roja como un tomate.

— No es cierto —se quejó golpeando el brazo de Jackson.

— ¿Maximus? —arquee una ceja.

— Si, pero no te retrasamos más, ve a conocer a la manada —Camille palmeo mi espalda y se fue junto a Jackson.

Bien, supongo que no me quedará de otra, ya no puedo acobardarme. Camine hasta lo que parecía la manada, quería suponer que era la manada. El primero en notarme fue un chico alto, de tez media morena y cabello entre lizo y con algunos rizos, se comenzó a acercar a mí.

— ¿Buscas algo? —me preguntó.

— Más bien a alguien, el alfa de la manada —dije.

— Hola, soy Maximus Connor, llámame Max —se presento.

— Lyra Black, es un placer —estreche su mano y lo solté.

— El señor Michelson me aviso qué tal vez vendrías a la manada, tribrida, ¿no? —dijo, asentí.

— Si, pero sólo vine a conocer a la manada, no me transformó esta luna llena —avise, frunció el ceño.

— Ah claro, el señor Michelson me dijo de tu condición, en ese caso podrías ayudarme a repartir la poción —Max me sonrió, asentí.

— Por supuesto —comenzamos a caminar al grupo.

Cuando estuvimos más cerca del grupo, Max dio un silbido provocando que todos nos miraran, habían tantas chicas como chicos, incluso reconocí a algunos magos y brujas por ahí.

𝐓𝐑𝐈𝐁𝐑𝐈𝐃 #𝟏Donde viven las historias. Descúbrelo ahora