Los vampiros, brujos y lobos se han mantenido en secreto durante siglos, según ellos, nada podría hacerlos cambiar de opinión. La academia Haywood resguarda a seres mágicos y los ayuda a para su futuro, aunque todo parece cambiar luego de la llegada...
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A LITTLE BIT
LYRA. Di el último remate haciendo un punto y dando por terminado el partido. Apenas habíamos podido ganar, ambos equipos estábamos 24 a 24. Me acerque a Eddie.
— Buen partido, juegas bien —le dije.
— Gracias, tú también juegas increíble, Lyra —me sonrió.
— Ahí siento una tensión increíble, ¿la ves? —pude escuchar a Jackson susurrarle a Ethan y Anne.
— Sí, se nota a kilómetros —Ethan le susurro de vuelta.
— ¡No puede ser! —Jackson susurro sorprendido—. Grandulón, la bebe Lyra tuvo sexo con el chico Michelson.
— Silencio —volteé hechizándolos a ambos, Anne me sonrió.
— ¡Gracias! —me dijo divertida.
— ¿Que ocurre? —Eddie me preguntó.
— Oh nada —me acerque a su oído—. Sólo que están empezando a sospechar de lo qué pasó anoche.
— Oh —Eddie sonrió—. Los chicos también, es especial George, dijo algo de la felicidad y cosas así, no lo escuché bien.
— Entonces —Dylan nos llamó a todos, nos acercamos—. Entran Smith, Michelson, Watson, Wheeler y Black, gracias a todos por participar y les sugiero que lo intenten para representar a las casas.
Mire a Eddie, él me sonreía ampliamente. Dirigí mi mirada a las gradas, Ethan y Jackson me hacían señale para que les quitara el hechizo, moví mi mano y les lance el contra hechizo, me acerque a ellos.
— Se los advertí —les dije.
— ¿Y nos lo vas a negar? —Ethan arqueo una ceja.
— Sí, se los voy a negar —dije cruzándome de brazos.
(...)
— No lo puedo negar, es lindo —le dije a Camille.
Ambas estábamos en mi habitación, le estaba contando a Camille la actividad "extraña" de anoche, ella rió.
— Es sin compromisos, no le veo el problema —dijo sin preocupación.
— Eres a la primera persona que se lo digo —murmure, la sonrisa de Camille se agrandó.
— ¡Eso es mucho mejor! —Camille se levanto de mi cama—. Míranos, dos amigas echando chisme de las porquerías que hacen la otra.
— Porquerías ni nada, tú lo hiciste con Max —me defendí haciendo que Camille se sonrojara furiosamente.
— Estamos hablando de ti, no de mí, tonta —Camille sacudió su cabeza y me miró—. Mi punto es que, no veo el problema de que hayas hecho... cosas con Edward, además de que parece un excelente chico.
