Mientras No Sea Tarde (#1) // COMPLETO

50. Soy América Bax (Parte 2)

Too good at goodbyes - Sam Smith

"Debes creer que soy estúpida
Debes creer que soy tonta
Debes creer que soy nueva en esto
Pero he visto todo esto antes"

Su presencia me perturbaba, acababa conmigo en menos de un segundo. Lo amaba tanto que me odiaba a mi. Mis ojos se llenan de lágrimas y podría caer a llorar en este preciso instante. Solo quería un poco de su amor, solo quería que me quiera sin mentiras. Yo lo hice, lo amaba tanto y de manera tan transparente que era un infierno. Porque yo lo amaba y él no me amaba a mí.

Fue en ese momento, entendí lo que me dijo hace más de un año, en la piscina de su hotel. "El amor para que funcione debe ser correspondido". Tenía tanta razón que el aceptarlo dejaba una sensación amarga por todo el cuerpo, mi esfuerzo no sirvió de nada por que nunca fue mutuo, el amor que yo le tenía nunca fue mutuo. Y si tal vez lo fue, no de la misma manera. No sabía lo que decía, no sabía que pensar no sabía nada pero di todo de mi.

Ethan me mira con asombro de pies a cabeza, es posible que no entienda lo que sucede, mi cabello ya no es mi cabello, mi ropa ya no es mi ropa y yo ya no soy yo. Soy sola una versión rota de mi, que busca repararse sin importarle que tan egoísta sea la forma elegida. Es doloroso la manera en la que nuestros ojos se conectan y no se pueden separar, pero algo no iba bien. Podía ver que él tampoco era el mismo. De alguna manera, esto nos había afectado a los dos.

Su rostro tenía marcas, en su pómulo izquierdo una mancha morada, lucia como un moretón, su ceja se encontraba con una pequeña banda y en una esquina habían rastros de sangre, su cabello se veía más desordenado que nunca y tenía claras ojeras, además vestía la misma ropa que ayer, el único detalle es que ayer se veía bien a comparación de ahora. ¿Él estaba bien? No lo sabía, no iba a preguntarselo, tampoco.

-¿América?- murmura o pregunta.

1. No sé que demonios hace aquí.

2. ¿Por qué estoy a punto de desmayarme?

3. ¿Alguna vez dejará de doler tanto? Alguien dígame, que yo no lo sé.

-¿Que quieres?- mi voz sale tan calmada que no la reconozco.

¿Como es que sueno tan bien cuando por dentro solo quiero romper todo?

No lo entendía, me sentía como en una cuerda floja, a 27 metros sobre el agua. Pero el posiblemente vea en mi más calma que nunca.

Su ceño fruncido me examina detalle a detalle, como si fuese la primera vez que me ve. Como si nunca antes me hubiera visto de verdad.

Ethan da un paso hacía mí, pero en un gesto involuntario retrocedo, manteniendo la distancia con él. Su gesto solo demuestra lo confundido y sorprendido que está, y yo igual lo estoy.

"Nunca dejaré que te acerques a mí
Aunque signifiques mucho para mí
Porque cada vez que me enamoro, duele
Así que nunca me acercaré demasiado a ti
Incluso cuando signifique mucho para ti
Por si te vas y me dejas en el lodo"

-Tu cabello- murmura confundido.

-Oí que siempre te han gustado las rubias- hablo con amargura- Ya no soy rubia. ¿Ahora me puedes dejar en paz?

No quería que me deje en paz, solo quería que me abrace y me diga que todo estaría bien, que soy el amor de su vida, que me quería a su lado, que era los que más quería y que sin mí no viviría. Quería que me diga que se arrepentía de verdad que se arrepentía de corazón y que aún no era el momento para decirnos adiós. Pero lo conocía, conocía al menos una parte de él, la parte egocéntrica y sabía que por nada del mundo lo haría.