37. Historias con jabón.

246 32 8
                                    

I'm Not the Only One- Sam Smith

"Tu y yo hicimos un voto
P

ara bien o para mal
No puedo creer que me decepciones
Pero la prueba está en la forma en que duele
Durante meses he tenido mis dudas
Negando cada lágrima
Desearía que esto terminara ahora
Pero sé que todavía te necesito aquí"

-¿Como que nuestras cosas no están?- pregunto asustada y me bajo de su espalda con cuidado de no caer otra vez.

Busco por donde dejamos nuestra ropa, pero como él dice no hay nada, no hay rastros de nada más que vegetación, camino casi al borde de la colina con cuidado de no caer hacia el lago, pero no hay nada. No hay rastro de mi chaqueta, ni mi pijama, ni de su chaqueta, ni su pantalón, tampoco de nuestros zapatos. Solo estamos en ropa interior, y yo con su camiseta.

El frio se empieza a sentir más, mi piel se eriza ante la reducción de temperatura y siento mis labios castañear, me cruzo de brazos, intentando darme un poco de calor, pero es inútil, el frío se siente cada vez más mientras el continúa buscando por los lados de la colina.

-¿Que hacemos ahora?- pregunto cuando deja de buscar.

Intento no mirar su cuerpo semi desnudo, y observar a cualquier lado menos a él y sus fuertes brazos junto con su bien formado torso, su lindo trasero, sus piernas musculosas y mucho menos la V que se pierde bajo su bóxer negro en donde algo abultado sobre sale. No, mejor miro los árboles, que no son ni la octava parte de hermosos que Ethan.

-Las llaves de mi auto estaban en mi chaqueta- murmura acordándose al lado mío. 

Me alejo de él, evitando no pensar en su sensual cuerpo ni mucho menos en su espectacular forma de coger, alejo los pensamientos de mi mente y continúo buscando, pero es en vano porque ya no hay nada más que algunos árboles, piedras y plantas.

-¿Quién las pudo coger?

-No tengo ni puta idea, vamos a ver que podemos hacer. ¿Tienes tu celular? El mío lo dejé en mi auto.

-Ahí se quedó también el mío. - me quejo.

Continuar buscando está de sobra, nuestras cosas han sido robadas, o en el mejor de los casos es que se hayan caído y hundido en el lago. Incluso también se lo pudo haber comido un puma, o un león. Aunque dudo que haya animales de ese tipo por aquí.

¿Puede haber un tigre? Estaría genial cantar Roar a lo Katy Perry.

-Sube a mi espalda para bajar ya.- me llama captando mi atención.

-¿Estás seguro?

-Sí, bonita.

Le hago caso y me subo tras él, con el frío mi rodilla herida ya no me duele tanto, pero las piedras me lastiman, y a Ethan seguro también, pero es él quien no quiere que yo camine.

Mientras bajamos, admiro su espalda masculina al contacto con mi piel, los músculos de sus brazos están tensos por yo estar encima suyo. ¿Puedo estar así por siempre? 

Llegamos al puente y nos miramos en silencio, no podemos evitar soltar una carcajada por la situación, aunque nos estemos congelando.

-¿Crees que haya habido alguien más en este lugar?- pregunto cuando miramos los alrededores.

-No lo sé.

-Vamos a ver a tu auto si hay alguna manera para entrar.- propongo.

Él asiente y caminamos por un corto camino hasta llegar ahí, nos acercamos a la ventana al lado del conductor, intenta abrir con las manijas pero se encuentran bloqueadas así que solo observamos por la ventana, siendo muy difícil por la inmensa oscuridad.

Mientras No Sea Tarde (#1) // COMPLETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora