17. Sorpresas de la noche

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Cardigan:

You drew stars around my scars

But now I'm bleedin'

-Taylor Swift


-Sube- Nathaniel me abre la puerta del taxi y luego sube conmigo.

Él le indica la dirección a la que iremos al conductor y tras un asentimiento iniciamos el recorrido.

-Creo que debí cambiarme la ropa.- le digo, ya que traigo lo mismo que en la mañana, un pantalón negro ancho rasgado de los muslos y un suéter rojo encima de una camiseta de tirantes blanca.

Observo mis manos, intentando ocultar mi pena, mis uñas se encuentran un poco largar y pintadas de color rosado con delgadas líneas negras y en mi muñeca aún llevo el brazalete que me regalo Ethan la noche en la que fuimos a la pista de patinaje.

-Estás bien así, América. Te has puesto muy bonita, pero no has crecido.- lo último lo dice con mofa.

-Cállate.

Él ríe y yo lo sigo, su celular suena y cuelga al ver el nombre que no llegué a leer, suelta un bufido y lo guarda.

Busco en mi cartera con la esperanza de encontrar algo que pueda servirme, lo primero que encuentro es mi pequeño espejo circular y me dan ganas de besarlo, pero me contengo. No he revisado lo que tiene dentro, es la que usé hace un par de semanas y no he vuelto a meter nada ahí mas que dinero por si me animaba a salir a algún lado con Luke y Abril. en uno de los pequeños bolsillos encuentro lo que necesitaba, pañitos húmedos, una base liquida para el rostro, un delineador negro y un labial negro que no sé para que lo compré.

-¿Vas a maquillarte?- pregunta él revisando la base, le doy un golpe en sus manos y deja mi maquillaje en ellos- Salvaje

-Sí, me pondré un poco, porque parezco muerto.

-Con el labial negro lo parecerás más.- se burla y le saco la lengua- Eres irritante.

-Es porque me parezco a ti- le doy una sonrisa forzada y el arruga la nariz.

Aprovecho ese momento en el que nos quedamos en silencio para empezar a arreglarme aunque sea un poco, me limpio la cara con los pañitos húmedos, quitándome las pocas sombras de ojos que traía desde la tarde. con mis dedos aplico un poco de base en mis ojeras y las logro ocultar un poco.

-¿No les pesa la cara con el maquillaje?

-No.

Lo ignoro a él y a su estúpida pregunta y continúo difuminando la base en mi rostro, no me he colocado mucha ya que no me gusta usarla, salvo por ahora. cuando observo por mi espejo que la base ya se encuentra bien distribuida y tiene un aspecto natural, procedo a usar el delineador, con cuidado y de manera lenta me lo pongo en mi ojo derecho, temiendo mancharme debido al auto en movimiento, después de unos intentos fallidos y tras ser ayudada por los pañitos húmedos al fin puedo terminar con el delineado en los dos ojos y tras agregar el labial negro he finalizado con mi maquillaje improvisado.

Me veo un poco más pálida de lo normal, pero me gusta, además no traigo más colores para poder usar, el labial se seca casi al instante y me alegra ver que es un afecto mate y evitará manchar todo lo que mis labios vayan a tocar.

-¿Que has hecho en estos años?- me pregunta cuando me ve guardar mis cosas nuevamente a mi cartera.

Trato de pensar y mi mente queda en blanco, pienso en algo interesante que haya hecho en estos diez años y no se me viene nada a la cabeza.

Mientras No Sea Tarde (#1) // COMPLETODonde viven las historias. Descúbrelo ahora