[Oneshot Volkacio] Sueño

691 50 26
                                    



Otra copa más, la misma historia de siempre.

Aun pensaba en aquel día donde admitió sus sentimientos abiertamente por aquel comisario que destruyó su corazón, aun así, le dio la opción que abarcar con ellos. Porque no lo olvidaba, aunque hubieran pasado ya doce años, continuaba metido en su corazón y dolía. Dolía saber que no será correspondido ni tendrá de nuevo la oportunidad de intentarlo.

Bebió de su vodka, en su pleno honor y honrando que mañana sería un año desde que aclaró sus sentimientos, pronto un año de su confesión.

—¡Salud por ti! -gritó en medio de su casa, bebiendo a saco y reír.

No tenía a nadie cerca, ni a Ebaristo ni a Dakota, pidió unos días a solas para él mismo y lo agradeció, caminando lentamente por la sala agarrando la botella en mano, bebiendo a sorbos y arrugando su rostro, sintiendo el amargo sabor del licor en su garganta.

Tantas veces que lo evitó, ahora dudaba en dejarlo.

"¿Qué le parece si cuando salgamos de servicio, nos vamos a mi departamento y nos tomamos un vodka, de acuerdo?"

—No me prometiste el vodka, ruso de los cojones. -susurró, volviendo a beber.

Aun tenía su número en sus contactos, se lo había dado Kovacs por simple precaución y dudó, muchas veces, de enviarle un mensaje preguntando cómo estaba y si volverá algún día, y cumplir con su palabra.

Apretó el aparato con su mano, abriendo el chat y escribiéndole sin importarle nada.

H: Volkov, te estraño, t straño mucho vuelbeeee 01:01 am

Volvió a beber, el mensaje no fue leído y lo entendía, seguramente no lo leería jamás.

Buscó la radio de su sala, en busca de una canción que lo animara un poco, disfrutándolo durante los primeros diez minutos, olvidándose de lo que sufría y riendo, tirándose al sofá hasta terminar el vodka. Pronto una nueva canción, para él, empezó a sonarse.

"Vuelves,

en cada sueño que tengo

caigo de nuevo en tu red..."

Horacio abrió aun más sus ojos, sintiendo el nudo en su garganta crecer.

Había veces donde soñaba con él, pero cuando era un alumno del CNP y las cosas eran distintas ahí, Volkov le sonreía, le decía cosas bonitas, lo felicitaba y enseñaba cuando se equivocada, sin importar las veces, él estaba presente ahí sin dudarlo.

Pero eran esos, sueños que nunca fueron reales.

"Yo no quería amarte

Tú me enseñaste a odiarte

Todos los besos que me imaginé

Vuelven al lugar donde los vi crecer"

Se cansó, apagando la radio, no estaba dispuesto a llorar más, suspirando y notando que poco sentía estar ebrio. Solo quería dormir hasta tarde y recuperarse, volver a bromear con Ebaristo, hacer carreras ilegales y ser él mismo.

Su celular vibró, un nuevo mensaje llegó, pero pocas ganas tuvo de alcanzarlo y se dejó caer en el sofá, cayendo profundamente dormido.


Un poco de OS's ✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora