Chocolate - SooKai

🤎; 08

—Huening~ —dijo mientras bajaba las escalera.

Este puso pausa al juego para voltear a verlo.

—La comida está casi lista, ¿te gustaría comer arriba?

—Si por favor.

—Bueno ven.

Se acercó a él. Este dejó el control de lado para ser cargado por Soobin, salió del sótano apagando las luces. Camino hasta el comedor para sentarlo en la silla que había recorrido para luego acercarse a la estufa para terminar de hacer la comida

—Huele muy rico —dijo Huening

—Gracias.

Se quedaron en silencio. Lo único que se escuchaba era la música clásica que se reproducía en el estéreo en la sala, Huening miraba la cocina detenidamente, buscando algún arma para defenderse de Soobin y por fin salir de ahí ya que sus piernas funcionaban un poco mejor, sin que Soobin supiera, había intentado caminar en la madrugada momento en el cual Soobin se encontraba durmiendo. Poco después, el timbre de la casa sonó, Hueningkai estaba sorprendido y asustado, no sabía quién era y quería saber. Soobin tomó un cuchillo para ir hacia la entrada.

—Cierra la boca o cortare tu garganta —amenazó a Huening.

Este se quedó en silencio, escuchando los pasos de Soobin irse cada vez más y más. Quería pararse para ir a la puerta y que lo vieran, quería gritar y pedir ayuda pero no quería que Soobin lo tocara de nuevo, no quería ser tocado de nuevo. Escucho como Soobin conversaba con alguien, era ahora o nunca pero antes de que pudiera gritar, la puerta se cerró, su oportunidad se había ido.

—Hueningkai  —alzó la vista.

Al lado de Soobin había un chico de ojos grandes y cabello rubio.

—Ayuda por favor... —murmuró.

—Por supuesto, si es que me descubren y me ofrecen mucho dinero.

—¿E-eh?... —sus ojos se cristalizaron.

—Quiero presentarte a un amigo mío el cual nos acompañará a comer, se llama Taehyun.

—Ho-ola...—cabizbajo.

—Oww pensó que lo iba a salvar —dijo sonriente—, tal vez no te has dado cuenta pero Soobin jamás te dejará ir, diga lo que diga.

Los tres se encontraban sentados en el comedor comiendo de su plato. Huening comía sin ánimos, enserio quería morir, quería pedir ayuda, quería tomar un cuchillo y salir de ahí, pero no era lo suficiente fuerte como para hacerlo.

—¿Solo será un día? —pregunto Taehyun.

—Así es, cuando la policía se haya ido iré por él.

—De acuerdo.

—¿Me dejarás con el?...—pregunto Huening mientras miraba a Soobin.

—Solo será mientras la policía inspecciona la casa ya que tu noviecito lo propuso.

—¿Tienes novio? —lo mira.

—lo mira— Si...bueno, tenía porque al parecer no lo volveré a ver.

—Un completo idiota, ¿sabes cuantas veces me a amenazado?

—¿Por qué no lo amenazas igual?

—Porque no quiero que sospechen de mi, por suerte no lo hacen y soy inocente pero si hago algo sospecharan de mi.

—Mm...¿y porque no le pones algo más en las muñecas? —miró las muñecas de Huening—, terminarás dejándolo sin manos.

—Para eso están las vendas.

—También debes dejar de sedar sus piernas.

—Bueno mira el que lo tiene secuestrado soy yo cuando tu secuestres a alguien hazle lo que putas quieras, ¿si?

—Solo decía...

Se quedaron en silencio. Huening fue el primero en acabar pues de verdad tenía hambre, Soobin le preguntó si quería más y este asintió. En total, Huening comió tres platos llenos. Mientras Taehyun y Soobin hablaban sobre el trato Huening los escuchaba en silencio, se sentía como un objeto, como un juguete, podía portarse mal para que Soobin lo golpeara hasta la muerte, o matarlo, como tantas veces lo dijo, pero...¿porque esperar?, podía hacerlo ahora.

—Auxilio...—murmuró cabizbajo llamando la atención de ambos.

—¿Qué dijiste? —preguntó Soobin.

—lo mira— ¿Es cierto que me vas a matar?

—Si, así que no intentes nada.

– Jhm... —sonrío de lado— veamos si es cierto —se tiró hacia atrás junto a la silla para gritar con todas sus fuerzas—. ¡Auxilio soy Hueningkai!

Soobin se acercó a él para cubrir su boca con una de sus manos pero cuando lo hizo, Huening lo mordió con fuerza sacándole un poco de sangre, este quitó su mano momento en que Huening le soltó un golpe y comenzó a arrastrarse lejos.

—¡Ayudaa! —gritó con todas sus fuerzas.

—Je, te esta retando —dijo Taehyun sin hacer nada.

—Maldito idiota.

Caminó hasta él para estrujarlo de la camisa, levantándolo un poco haciendo que lo viera.

—¡Ayu-...

Soobin lo golpeó en la cara, haciéndole un rasguño en este, dejando su cachete rojo.

—Ayuda...por favor...—dijo con la voz rota para comenzar a llorar.

—Huening, cállate.

—lo miró— ¡Mátame de una maldita vez! —dijo alzando la voz.

Le soltó otro golpe, haciendo que su labio se abriera un poco. Lo soltó y se paró para bajar al sótano, fue por la bola de tela y la cinta. Le metió la bola en su boca para luego ponerle cinta alrededor de su boca.

—Es tiempo de que te vayas.

—¿Tan rápido?, quiero ver como los oficiales vienen y te preguntan de quién eran los gri-

—¿Quieres tu maldito dinero?!

—soltó una carcajada— Claro que sí.

—Bueno cierra la boca y sube al puto auto.