Chocolate - SooKai

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Una semana después...

Marzo había llegado, el cumpleaños de Beomgyu se acercaba y hace menos de dos días que había regresado a la preparatoria con una venda en la cabeza y una rodillera en su pierna izquierda la cual no se podía quitar en ningún momento. El maestro había cambiado de lugar a todos dejando a Soobin del otro lado del salón, separado de Beomgyu, quería hablar con él pero sabía que era mejor dejarlo así.

A la hora de la salida Soobin tomó sus cosas para ponerse su mochila y salir lo más rápido que podía, sabía que Beomgyu no podía caminar mucho por su rodilla y su mamá iba por él a la salida así que no quería toparse con ninguno de los dos. Al pasar por el tablero escolar pudo ver la foto de desaparecida de Giselle sobre el de Hueningkai, estaba satisfecho.

Subió a su auto yendo hacia una pizzería pues le había prometido a Hueningkai que le llevaría cada viernes. Algo raro que notó era que Hueningkai se había vuelto pediche aprovechando que Soobin le había prometido dar lo que quisiera con tal de vivir cómodo con él tanto así que llegó a pedirle un celular y una tablet de dibujo los cuales no les resultó nada barato.

—Aquí está la pizza Huening —dijo mientras dejaba la caja en la mesa.

—Gracias Soobinie —dijo sonriente dejando un beso sobre su mejilla.

También se había vuelto más cariñoso dejando besitos sobre su mejilla o robandole cortos besos, incluso a veces llegaba hacia él mientras hacía cualquier cosa para hacerle una mamada lo cual Soobin disfrutaba pero a la vez no ya que no dejaba que lo tocara o que le hiciera una mamada, así como Huening a el.

—¿Qué pintaste mientras no estaba? —preguntó Soobin tomando una rebanada.

—Una granja, solo hice las vacas porque no tenía tanto espacio.

—Seguro te quedó muy bien.

—Obviamente me quedó muy bien, soy Kamal Huening —dijo con una gran sonrisa.

—¿Qué quieres hacer mañana?

—Mh...podíamos ver películas juntos.

—De acuerdo, ¿y hoy en la noche?

—Dormir.

—Ja ja que lindo. ¿Y si te pones de nuevo el traje que te com-

—Quisiera tomarle fotos a la luna, ¿podemos salir al patio trasero?

—¿Al patio?...claro, nadie te reconoce con ese corte de cabello.

—Yeiii.

Continuaron comiendo en silencio acabandose la pizza, a Huening le tocaba lavar los trastes usados mientras Soobin salía a tirar la caja de la pizza, al entrar de nuevo quiso abrazar a Huening por la espalda y besar su cuello para tal vez iniciar algo pero al llegar a la cocina se encontró con los trastes limpios y la cocina vacía, supuso que había ido a su habitación. Fue hasta su cuarto encontrándose con Huening de espalda acomodando sus pinturas, en silencio, fue hasta él para abrazarlo por la espalda.

—Huening~ hay que divertirnos un poco.

—¿No tienes que estudiar para tu examen?

—Si pero-

—giró, quedando frente a frente—Entonces ve a estudiar, yo haré el resto.

Dijo para luego irse. "¿Yo haré el resto?", ¿a qué se refería con eso?, se preguntaba Soobin un tanto dolido pues su pequeño enamorado lo había rechazado pues aún no eran novios, no había encontrado la situación perfecta para confesarse, tal vez podía hacerlo en la noche, sería muy romántico. Fue al baño para lavar sus dientes, luego regresó a su habitación encontrando a Huening bajo su escritorio, sabía qué hacía ahí.