Soobin ahora estaba nervioso, sabía que su padre lo conocía y sabía cuando mentía o cuando ocultaba algo pero fingía estar molesto teniendo la excusa perfecta para discutir con su padre y probablemente hacer que se fuera pero al parecer tenía razón, su padre había cambiado un poco, pues conociéndolo le hubiera pedido disculpas o hubiera pedido una explicación sobre el porqué había reaccionado así.
—Soobin —lo llamó con la vista al frente.
—Mh.
—¿Tu madre no te ha dicho sobre porque no me deja ver a tu hermana?
—No, ¿pasó algo que no me enteré?
—Prefiero que tu madre sea quien te lo diga.
—Entonces le llama-
—No, no , no, ahora no —dijo un poco alterado—, mejor...espera a que me vaya, no quiero que me aleje de ti.
—¿Por qué lo haría?
—Solo...—suspiró— Espera a que me vaya, por favor.
—Bien.
—Y...lamento lo que dije, no se de donde se me salió decir que eras el secuestrador.
—Descuida...tuve que soportar eso por un par de semanas en la preparatoria, pero todo está arreglado gracias a que tuve novio.
—¿Cómo se llama?
—Beomgyu —suspiró—. Lo siento...
—¿Por qué te disculpas? —preguntó confuso.
—Porque tu al igual que mamá querían nietos, y que me casara con una hermosa chica pero ahora...estaré junto a un chico, y no te daré nietos.
—A mi me importa un carajo con quien te cases, me des nietos o no, si tu pareja es fea o hermosa, solo me importa el que seas feliz junto a esa persona, y que esa persona sea feliz junto a ti.
—lo miró—¿De verdad?...—preguntó sorprendido.
—Claro, solo quiero que seas feliz hijo, incluso junto a otro chico.
—Oh...gracias papá, seguramente mamá diría todo lo contrario.
—Lo sé, será mejor que no le digas y te cases en secreto —dijo sonriente—. Aunque si tengo una duda.
—¿Cuál?
—¿Das o recibes?
—¿Doy o...¡papá!❝ ❞
Días después...
Era la mañana del veinticinco, a Soobin le preocupaba que su padre descubriera a Huening mientras no estaba aunque sabía que no lo haría pues estaba en el sótano con miles de cerraduras, lo que si podía pasar era que Huening pidiera ayuda y lo atraparan.
—¿Estás seguro de que estarás bien? —le preguntó en susurro mientras acariciaba levemente su mejilla.
—Lo estaré Soobinie —respondió Huening bajo las cobijas.
—Lamento mucho que Taehyun no pudiera venir a escondidas y que pasaras tiempo con él, pero mañana papá se irá y podrás subir de nuevo.
—Lo sé descuida, el calentador no está tan mal.
—Bien —suspiró—. Te traje tu traje, cuando llegue quiero que lo tengas puesto y nos divirtamos un poco, ¿que dices?
—Quedamos en que te provocaría.
—Bien entonces me vas a provocar.
—Entonces te estaré esperando a partir de las doce con el traje puesto, ¿te irás a las siete no?.
—Y llegaré a las doce con treinta, si es que no hay tanto tráfico.
—De acuerdo.
—Bueno me voy, papá no tarda en despertar.
—Esta bien, hasta luego Soobinie.
—Hasta luego chocolate —dijo sonriente.
Pero antes de que pudiera dejar un beso en su mejilla Huening le robó un pequeño beso sobre sus labios provocando un ligero sonrojes por parte de Soobin quien se quedó helado por unos segundos, pues era la segunda vez que Huening le daba cariño.
—Diviértete.
Este le sonrió una última vez, salió de su cama para salir del sótano, poniendo cada cerradura, pero cuando dio media vuelta su corazón casi se detiene pues su padre estaba del otro lado del pasillo, algo adormilado— Buenos días —Dijo Soobin yendo hacia la cocina, tratando de actuar normal.
—¿Qué hacías en el sótano?.
—No salía agua caliente y verifique el boiler, tenía un pequeño problema pero lo arregle. ¿Quieres desayunar algo?.
—Lo que sea está bien.
—De acuerdo. Por cierto, en la tarde iré a una fiesta con unos amigos y te dejaré solo unas horas.
—Está bien, diviértete, pero no tanto.
—¿Seguro?.
—Claro, creo que este año has cambiado mucho, te has vuelto más directo, más seguro, más social y tienes novio, disfruta tu juventud antes de llegar a la adultez.
—Lo haré.
Dijo sonriente para acercarle dos platos y la caja de cereal. Ambos desayunaron en silencio, Soobin estaba concentrado en su cereal con pequeños trozos de chocolate mientras su padre, en veces lo volteaba a ver, analizándolo, y es que ese año iba a visitarlo por dos razones, una, su ex esposa le había prohibido ver a su hija y no quería que le prohibiera ver también a su hijo por la estupidez que hizo, dos, porque dos jóvenes que parecían tener la edad de Soobin lo habían convencido en investigar su casa y analizarlo, preguntarle sobre Huening ya que como era su padre sabrían que no le mentiría.
—Por favor señor Choi, es nuestra última opción para descubrir a Soobin y meterlo a la cárcel —replico el de cabellos castaños.
—Pero es mi hijo, no puedo hacer eso, aparte, ¿cómo confiar en usted? par de mocosos.
—Señor...—dijo el de cabellos largos con mechones rubios, llamando su atención quien soltó un leve suspiro—. No quería decirlo...pero soy pareja de su hijo —sus ojos se abrieron como platos al escuchar eso— y a mi también me duele el que se vaya a la cárcel pero desde que lo conocí y fui a su casa no me deja entrar al sótano.
—Creemos que Huening está ahí —dijo el castaño—. Por favor señor, solo queremos salvar a Huening...
—Descubrimos que Soobin es chocohólico, y Hueningkai huele a chocolate, tal vez quería probarlo o...hacerlo suyo, algo peor, y Hueningkai está sufriendo.
—¿Por qué tú lo llamas Huening y tu Hueningkai?.
—Yo era su novio —respondió el castaño—, de cariño le decía Huening.
—Y yo porque le agradaba que le dijeran Hueningkai —dijo el de cabellos largos.
—Entiendo...—dijo para soltar un gran suspiro— Entonces...quieren que vaya con mi hijo, le pregunte sobre el desaparecido y si sospecho de él les digo, entro a su sótano a como de lugar para investigar y si es necesario le digo que sé que tiene a Hueningkai.
—Si —dijeron al unísono.
—No puedo creer que les haga caso...—dijo llevando sus cabellos hacia atrás.
—Luego de esto no volveremos a molestarlo, ni a usted ni a Soobin —dijo el castaño.
—Esta bien, pero primero necesito saber sus nombres.
—No pode- dijo el de cabello largo, pero el castaño lo interrumpió.
—Yeonjun y Beomgyu, un placer señor Choi —respondió.
Intentó hablar respecto a la desaparición de su compañero, pero lo único que obtiene de parte de su hijo era un ¿podías no hablar de eso? me entristece para luego cambiar de tema y seguir como si nada, sonriente, pero era su padre y lo conocía, sabía cuando mentía y cuando ocultaba algo y su hijo si que ocultaba algo. Ambos luego de desayunar comenzaron a jugar toda la mañana hasta la tarde, en donde Soobin tenía que irse.
—Bueno papá, en la alacena junto al microondas hay varias botellas de alcohol y vino por si quieres.
—¿Por qué tienes eso?
—Porque a veces bebo, pero se controlarme. Me iré a cambiar para ir a la fiesta.
—Está bien.
Soobin fue hacia su habitación, dejándolo solo en la sala. Tenía solo una misión, ir hacia el sótano y buscar al chico desaparecido pero su pequeña adicción le ganaba. Se puso en pie yendo hacia la cocina para abrir la alacena que Soobin le había dicho para abrirla encontrándose con cinco botellas llenas sacando una de ellas para abrirla y beber un poco, sabía que estaba mal, sabía que tenía que ir ahí por otra cosa no por beber pero su aducción le ganaba.
—Diviértete Soobin —decía su padre sonriente mientras se despedía agitando su mano en forma de despedida.
—Por favor no bebas tanto, y no hagas un desastre —le dijo antes de subir al auto.
—Lo que digas hijo, yo hip cuidaré de tu casa.
—Por lo menos deja una botella para la cena.
—Si, si, si ya vete bye bye~
Huening vio la hora en el reloj de muñeca que Soobin le había dejado, notando que ya eran las siete con treinta eso significaba que se había ido y estaba solo con su papá, era su oportunidad, su gran oportunidad. Pensó en su madre, en cómo había reaccionado aquella vez que se abrazaron por última vez.
—Creí que no volvería a verte querido Ning —decía entre lágrimas mientras lo abrazaba.
Se abrazó a sí mismo, sentado en la cama, recordando el calor corporal de su madre al abrazarlo, el tacto de sus dedos en su piel, sus manos tomando su cara, los besos que le dejaba siempre en la mañana a la hora del desayuno, quería volver a verla.
—Mamá, estoy bien, ¿de acuerdo?, mírame, estoy sano, estoy bien, estoy completo...no me pasará nada, te prometí algo.
—Oh Huening...—lo volvió a abrazar, dejando un beso en su mejilla— te amo Hueningkai....te amo sin importar nada, y haré lo posible por que llegues a casa.
—Casa...—murmuró Huening entre lágrimas.
Solo tenía que ponerse en pie, acercarse a la puerta y pedirle ayuda al padre de Soobin pero tenía miedo a que le hiciera daño, no lo conocía, ¿y si era como Taehyun?, ¿y si era como Soobin?, ¿y si era peor que ambos?, era mejor esperar a que sus lágrimas cesaran y pensarlo mejor.

ESTÁS LEYENDO
Chocolate - SooKai
Fiksi Penggemar-¿Porque...haces esto? -preguntó entre lágrimas. -Porque eres mi chocolate favorito. -Yo no soy un chocolate! -exclamó entre lágrimas. -Hueles como uno -tomó de su quijada pasando su cálida lengua por su cachete-. Y sabes cómo uno...-le murmuró al o...