Fueron duros y largos tiempos para que Colombia saliera preñado, normalmente habían planeado que en 4, quizá 6 meses lo lograrían, pero ya habían cumplido un año con tres meses.
Se veían algo desanimados frente a ello, hasta creían que el soviético era infértil, pero no se habían atrevido a consultar a un médico todavía.
Pero un día, mientras este se encontraba de visita en territorio ruso, se vio atacado con mareos y ganas de vomitar todo su almuerzo.
Pensaron en qué le había agarrado una viral, así que se pasó sus días en cama tomando algunos medicamentos para gripa, cuando paso una semana entera y no dejó estos síntomas, se preocuparon.
- Llamaré algún doctor. -El soviético acariciaba la espalda del cafetero en forma de consuelo, mientras este estaba tirando por el inodoro todo lo que había sido la cena.
De tanto que había vomitado en ese tiempo, su complexión se había vuelto un poco más delgada y frágil, se sentía bastante débil.
Se lavó los dientes y se metió a la cama apenas terminó de limpiar el desastre que había formado en el baño, tenía unas ganas inmensas de solo dormir.
Pero no le quedó posible.
-Coco no te duermas, la doctora ya llegó. - Rusia le removió con suavidad, sacándolo de ese pequeño trance de cansancio en el que había entrado.
La doctora entro de forma respetuosa y agradable, mientras trataba y revisaba las condiciones del latino. Está mantuvo una voz suave que no impidiera que el contrario pudiera cerrar sus ojos y descansar de a ratos.
-Его тело не проявляет вирусных симптомов, это похоже на интоксикацию, но, судя по тому, что мне сказали, он не ел ничего странного. (Su cuerpo no presenta síntomas virales, parece intoxicación, pero por lo que me dijeron, no comió nada extraño.) - Murmuró a la par que revisaba unos exámenes que le habían tomado hace unas cuantas horas.
- Так что с ним происходит? (Entonces, ¿qué está pasando con él?)-
- Я хотел бы сделать последний тест, я думаю, что это не проблема, и вы можете остаться, чтобы увидеть это. (Me gustaría hacer la última prueba, creo que esto no es un problema y puedes quedarte a verlo.)
Al terminar de hablar rebuscó entre su maletín, sacando una prueba de embarazo común. Despertó con cuidado al paciente colombiano y tras indicarle que hacer, este fue con ayuda del soviético hasta el baño.
Volvieron con prueba en mano, ésta aún no se revelaba, por lo que decidieron esperar unos momentos más.
Mientras que Colombia se metía de nuevo a la cama, Rusia hacía sus notas internas de cuando fue la última vez que lo hicieron, y bueno, no había sido tan reciente, pero si cuadraba un poco.
Levantaron la mirada ( uno de forma perezosa, el otro ansioso) cuando la doctora levantó el pequeño aparato con felicidad.
-Поздравляем, вы станете родителями! (¡Felicitaciones, se convertirán en padres!) - Sonrió con ánimo y pasó la prueba al soviético, que se encontraba más despierto que el tricolor.
El cafetero había escuchado la noticia y había dibujado una suave sonrisa en sus labios, con cierta pereza y cansancio, posó su vista en su pareja, viendo como este miraba esa pequeña cosa (aparato) con tanta emoción y alegría.
A los segundos tuvo al contrario encima, abrazándolo y repartiéndose besos y mimos por el rostro.
Estaba feliz y emocionado, pero vomitar todo el día sí que lo había dejado drenado, no fue raro que terminara profundamente dormido aún así no se hubiera ido la doctora.
A la mañana siguiente, ya despierto y con más energía, removió con cuidado al soviético que dormía a su lado, quería que ahora si le contara todo a fondo.
Este se levantó sin problemas y con un gran ánimo (así no se notara tanto en su normal expresión tosca), regalandole de primerazo un beso y una pequeña caricia en su zona abdominal.
-La doctora dijo que son aproximadamente 4 semanas de embarazo, tus síntomas tal vez llegaron un poco tarde. - Sonrió suave a la par que hablaba, moviendo al colombiano a sus brazos. - Vendrá mañana para empezar los exámenes y algunas medicaciones, pues te has desnutrido últimamente y no es muy sano. - Dió una corta pausa para darle otro beso pero en la coronilla.-
- Marica entonces lo logramos... - El cafetero, que se veía algo aturdido por el amor y la reciente información, terminó de procesar todo y dejó ir un suspiro aliviado, se había sentido preocupado ante el pensamiento de que el contrario fuera infértil.
Decidió acurrucarse más en los brazos del sovietico, disfrutando del calor que estos brindaban y la nueva idea que de había alguien en su interior, y dejó ir suaves risas ante las palabras animadas e ilusionadas que decía el contrario.
Pasaron un rato largo de la mañana en medio de mimos y murmurar como pensaban que sería esa pequeña criatura que nisiquiera tenía el tamaño de un frijol aún. Por recomendaciones de la doctora, el tricolor no pudo atragantarse un desayuno exagerado como solía hacer, tuvo que conformarse con fruta, cereales y apenas un huevo con pan.
- Parce pero si el frijol quiere comer caldo de papa... - Intentó convencer a su pareja por décima vez, sentía que su desayuno estaba incompleto.
-Eso será para el almuerzo, si comes demasiado te dará náuseas. - Advirtió acariciando su mano para darle fuerzas, sabía que este quería comer como camionero.
Dió un leve bufido y siguió comiendo, ésta comida de milagro no lo hizo correr al baño, más bien, le hizo sentir con más fuerza que el día anterior, permitiendo que se levantara (despacio para no marearse) y tomara rumbo al patio.
Estaban en épocas cálidas, por lo que sin problemas se recostó en el piso para tomar un poco de sol y aire fresco.
-Entonces sí lo logramos... - Repitió para si mismo, se sentía extraño lograr esa meta luego de un año, pero estaba igual de agradecido. - Un frijolito Ruso-Colombiano - Sonrió divertido intentando imaginar qué rasgos tendría, cuáles gustos tomaría o qué comidas preferiría.
Rusia se acercó para recostarse al igual que el tricolor, disfrutando del clima cálido y de su ahora pareja embarazada.
- Coco. - Le llamó con su típica voz monótona, ganando un simple "¿mhm? del contrario. - Gracias por todo.
Decir que Colombia no lo esperaba era poco, se atragantó con su saliva y rápidamente dirigió la mirada a su pareja, notando cómo este le miraba con extremo amor y una sonrisa realmente agradecida. En momentos así, su corazón se estrechaba de sobremanera y sentía ganas de llorar, pero era un marica que no lloraba, así que mejor dejó ir risas animadas para luego lanzarse encima del soviético, que lo atrapó en un abrazo y llenó de caricias y palabras amorosas.
Empezaban a formar su familia, ahora solo era cuestión de tiempo.
Fin.
No se lo crean, si quiero describir cómo es toda la cuestión de los culicagados.
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No joda carechimba. [Colombia x Rusia] countryhumans
CasualeCountryhumans [Colombia x Rusia] ¿Quién no ha visto que cuando Colombia se enamora, lo pintan de tiernito, baboso y calladito?, Y más aún cuando menos lo quieren. Pues tranquilos jóvenes, que aquí, mostraremos que Colombia como buen colombiano que...