No joda carechimba. [Colombia x Rusia] countryhumans

Extra

Y volvimos al principio, pero con algunos cambios.

Era una mañana soleada,con niños riendo, pájaros cantando, y las hermosas flores de verano en su total resplandor.

Pero nadie podía salir a aprovechar ese hermoso clima, porque debían estar presentes en la reunión de ONU.

Cómo en un inicio, Colombia chismeaba con Chile y México,  Rusia atendía la reunión comentando en ciertos momentos y todos estaban repletos de papeleo de su territorio. Sí, todo parecía como en un principio.

Pero recordemos esos pequeños cambios.

Cambio número uno: Colombia y Rusia eran pareja ya hace 27 años, que se vieran igual de jóvenes ya era cuestión de su casi inmortalidad country.

Cambio número dos: Sus frijolitos, Rusk y Kosru ahora participaban en las reuniones ONU y eran mayores de edad.

Cambio número tres: Estos eran un pequeño desmadre en las reuniones y siempre debían de reprenderlos.

Hoy no era día de reprender, pero sí de revolución.

-Rusk, según papeles que me enviaron recientemente, le has declarado la guerra a una ciudad de China, más específicamente ShenZhen. - ONU, levantó una ceja inquisitivo, dirigiendo su mirada a la joven de cabellos largos, que se encontraba sentada al lado de su padre ruso.

La mirada del soviético mayor tampoco tardo en llegar, observando a su hija de forma curiosa, pues normalmente ésta era tranquila para las reuniones.

-Le está tirando los perros a mi  родной брат (Hermano). - Soltó simple, logrando que la sala se quedara en completo silencio por meros segundos antes de que la parte latina, en especial los amigos cercanos al colombiano, se echaran a reír por lo que acababa de decir la hija de este.

Tras carraspear con fuerza, para lograr callar a todos, la relativamente joven country siguió.

-Y he notado que el mayor China, aleja a los  pretendientes de sus ciudades por medio de métodos agresivos y devastadores. - Su voz era seria y fuerte, similar a la de su padre de cabellos claros.- No esperaré a que dañen a mi hermano por дерьмо (mierda) de una ciudad insensata.

Antes de que la potencia diera respuesta, el cafetero se hizo notar en la sala, a punta de chiflidos y aplausos, animando a su "pequeña" bebé.

- ¡Eso mi vida!, ¡No te dejes de ese chino carechimba! - Gritaba desde su lugar con felicidad, logrando sacar bajas risas a su pareja y a la menor.

-Dejando esa pequeña interrupción de lado... - El de alas, como siempre, mantenía la postura, pero si que miró mal al tricolor - Los espero a todos cinco al final de la reunión, para charlar de lo sucedido.

Y sin más problemas, volvieron a centrarse en los temas típicos de la reunión. Luego de dos horas y media más de sufrimiento, finalmente todo finalizó.

Como indicaron, los cinco se quedaron en sala, siendo estos el cafetero, el soviético, las dos bendiciones y el chino.

-Empecemos por conocer la opinión del implicado y quién según la señorita Rusk, se encuentra en peligro. - Dió la palabra al mellizo, que había ingresado tarde a la reunión por problemas climáticos en su territorio.

-Pues... - Kosru se sentía algo intimidado por el... ¿Padre?, del coqueto muchacho que últimamente se le acercaba de más, pero tragó saliva y decidió hablar. - Sí me he visto implicado en situaciones peligrosas por el señor China. 

-¿Podrías expresarnos que tipo de situación? -

-Me intentaron secuestrar, torturar y... Un día me dejó amarrado a un poste. - Empezó a enumerar de forma baja, sentía la pesada mirada por parte de la potencia.

La fuerte mirada hubiera seguido encima del muchacho, pero está fue literalmente desviada por una patada en la cara al mayor.

No, no es broma, Colombia le lanzó una patada a China en la cara luego de escuchar todo lo que le intentaron hacer a su pequeño. Y hubiera seguido, pero ONU lo detuvo, porque bueno, su pareja no lo hizo. Este en cambio  aprovechó que este cayó atontado al piso para agarrarle igualmente a golpes.

Cuando por fin lograron separar a ambas "bestias" de la potencia, estaba más que apaleado, pero conciente y escuchando todas las groserías bilingües que salían de parte de ambos tricolores.

Eran, claramente, el ejemplo a seguir de sus hijos.

- Papá ya puedes dejarlo... - Korsu intentaba calmar al soviético, que no paraba de mandar viejas maldiciones rusas a la descendencia del de cabellos largos.

- Tu no papi, tu sigue hijueputeando a la madre del man. - Rusk, pues ella apoyaba a su padre cafetero que estaba más que insultando la existencia de la potencia.

Tocó llamar una ambulancia, la policía y un juez, pero decidieron que el Chino no volvería a intentar lastimar al menor de los mellizos, de lo contrario, recibiría más que juete en ese culo.

¿Qué por qué no lo alejaron completamente?, El pequeño Kosru le gustaba esa coqueta ciudad conocida como ShenZhen, por lo que decidieron no darle su primer corazón roto.

Con las cosas  ya "arregladas", Rusk acompañó a su mellizo hasta el territorio ajeno, donde se encontraría con la ciudad que anteriormente había amenazado casi de muerte.

Decidieron verse en un parque, el mellizo menor pedía varias cosas a su hermana (como que no fuera a golpearlo o a escupirle) y está asentía de forma distraída, finalmente se encontraron con un joven alto, de ojos oscuros y cabello largo completamente negro.

Cuando sus miradas  se conectaron, de inmediato brillaron con emoción, logrando que se acercarán con más rapidez al otro para saludarse con una pequeña reverencia.

- ShenZhen te... - Su cabeza hizo "Click" al recordar que el contrario no entendía Español ni Ruso, por lo se corrigió y empezó con el inglés. - This is my sister Rusk, the one who threatened you ... Esta es mi hermana Rusk, la que te amenazó ...)

Su mirada cayó al piso de forma apenada por lo último, no sabía cómo reaccionaria el contrario ante eso, y si era sincero, le daba algo de miedo.

-Rusk... - Repitió asintiendo, y sin problemas le ofreció un apretón de manos, demostrando que iniciaban en buenos términos.

Su hermana, por su parte, se vió bastante decente y aceptó el apretón.

Tomaron una mesa del parque y charlaron un rato más, la mayor se veía algo aturdida al ver las constantes muestras cariñosas del asiático hacía su mellizo, pero finalmente suspiró con una sonrisa, solo estaban enamorados y ella no lo entendía.

No porque no supiera que era el amor, sino porque ella se consideraba Arromantica y Asexual.

Cuando llegó la noche, los hermanos se retiraron a un hotel, tomándose la noche para hablar y llamar a sus padres, contándoles el amorío del menor y como este casi babeaba ante la sonrisa del más alto.

Si bien estos ya eran mayores, nunca dejarían de ser esos pequeños frijolitos que un día simplemente aparecieron.