Una Vida Para Amarte- (Ventino) [Makia]

Capítulo 49.

Makis.

- Ya está volviendo?- Olga negó rápidamente.- Está cerca?-

- Ni siquiera llegó a la casa.- Rode mis ojos, dando vueltas de un lado a otro.- Estás muy alterada, relájate aunque sea un poc...- Se quedó en silencio.- Te sientes bien?-

- Si, solo que estoy nerviosa por ella.- No parecía creerme.- Sandra y mi papá juntos son capaces de cualquier cosa.-

- Nada de lo que intentaron hacer en todo este tiempo dio resultado.- Asentí suavemente.- Y Natalia es fuerte, no está sola, si?-

- Si.- Vimos juntas como llegaba a la casa por las cámaras de seguridad, acompañada por dos guaridas, sin esperar que Sandra aparezca sola, teniendo otra de las cámaras donde podíamos ver a papá aún durmiendo.- Era obvio.- Escuché su carcajada, mientras que Natalia parecía discutir con Sandra, hasta que María José apareció.

- Tienes palomitas?- Reí junto a ella, entendiendo que quizás...

- Y si Sandra se estaba por reunir con María José porque la quería secuestrar?- Había comprado cosas características como para amarrar a una persona y no me sorprendería.

- María José está de acuerdo con Natalia porque Nico le dijo la verdad.- Alcé mis cejas.- Aceptó ir a hablar y sabía el plan, mira eso.- La policía estaba en camino, notando como papá se levantó de la nada, completamente despierto, abriendo la ventana de su habitación para salir corriendo.

- En qué se metió ahora?- Busqué mi celular, avisandole a mamá y a los guardias que cuidaban de ellos lo que pasaba.

- Lo siento si te enteras por mi, pero tu padre está metido en el tráfico ilícito de droga y hay algo más, ya nos enteraremos.-

- Quizás mamá lo denunció.- Asintió suavemente.

- Sé que nunca hablamos solas o sobre ciertas cosas, pero es un momento difícil para Natalia y sería bueno que estés para ella de ahora en adelante, si? Que seas sincera con ella.-

- Anoche discutimos, Olga.- Asintió suavemente.- Y no sé qué siente ella pero es difícil para mí.-

- Lo sé, no me dijo todo, pero estaba confundida y demasiado enojada.- Susurró formando una mueca.- En esos momentos cuando Natalia tiene esa clase de ataques es mejor que la dejes estar sola porque por más de que la quieras ayudar, ella te podría decir o hacer cualquier cosa que te duela.-

- Solo dijo algunas cosas.-

- Ella te obligó a ti a que te alejes y por suerte lo hiciste.- Frunci mi ceño.- Bueno, creo que no te lo contó pero después de las operaciones y todo lo que le decían, la expulsaron de varios colegios por golpear a los que se burlaban de ella y más cuando estaba estresada.-

- Si yo no llegaba, era capaz de golpear a Sandra.-

- A cualquier persona es capaz de golpear si es un muy mal momento.- Dejó su mano sobre la mía.- Solo tienes que actuar más rápido que ella, es obvio que la conoces y sabes cuando lo puede intentar.- Asentí suavemente.- Es la falla de fábrica con la que en realidad llegó, no es su corazón.-

Natalia.

Llegué a casa luego de estar horas escuchando a Sandra y al mi abogado, discutiendo por horas con mamá por no decirle la verdad, pero no me esperaba que las luces de la casa estén apagadas.

- Makis? Olgui?- No estaba su computadora, así que podía suponer que Olga ya se había ido.- Makis?- Quité mi corbata, buscándola en las habitaciones pero tampoco estaba, bajando a la cocina para encontrar una nota.

"Ya vuelvo, salí a buscar la cena. Date una ducha y ponte lo que dejé en tu clóset".

Ya me daba ordenes?

Y lo peor es que soy tan gobernada que las cumplí, escuchando perfectamente como ella había llegado y ya estaba cocinando.

- Hola.- Me senté en una de las butacas.

- Hola.- Se acercó lentamente.- Lo haré por ti, tranquila.- Dejó un beso rápido, acariciando mi cabello aún húmedo.

- Cómo estás?-

- Mejor de lo que creí.- Sonreí levemente.- Y tú?-

- Cansada, pero tengo hambre.-

- Me ayudas?- Asentí suavemente, cortando juntas las verduras.- Permiso.- En vez de tomar el camino fácil y pedirme otro cuchillo, me obligó a dejar de cortar para alejarme de la mesada, sin darle tiempo de volver a su lugar que ya había pasado mis brazos para seguir cortando, teniéndola a ella atrapada.

- Creo que tienes que cortarlo así, se ve mejor y se hará más rápido.- Asintió suavemente, dejando sus manos en mis brazos, subiendo y bajando lentamente.

- Creo que ya entendí.- Susurró sonriendo.- Primero largo.- Apoyó su trasero contra mi pelvis.- Y luego rápido en cubos.- La dejé alejarse solo para seguir cortando.

- Y encontraron a papá? Es que a Olga la llamó Andrés algo temprano y se fue corriendo a casa.-

- No, lo siguen buscando pero no llegará lejos, es obvio.- Asintió suavemente, robándome una de las tiras que aún no había cortado en cubos para comer un pedazo y darme el otro extremo, mordiendo su dedo para que ella sonría.

Es una endemoniada y sexy niña pequeña que ahora quiero hacer mía en cada esquina de la casa, así suene como una pedofila.