La hija pérdida de la Mafia✔+18

Capitulo 22

El abuelo se fue y me dejó aquí tirado limpíandome las lágrimas y con un nudo en la garganta.

Habían pasado casi 5 minutos en los cuales había tirado agua a mí  rostro espabilando un poco las lágrimas que salían sin mí permiso.

Salí del baño caminando a paso lento perdido en mis pensamientos, no había llorado por las muertes de mis tíos, el abuelo fue el detonante, todavía no puedo procesar lo que el abuelo me dijo , primero el asesinato de la tía Isabella la desaparición de mí prima después la muerte de la abuela ahora John que  muere junto al tío y mí abuelo con cáncer.

Mis ojos se llenan de nuevo con lágrimas así que rápidamente las limpio . Al llegar a la sala de espera exclusivo para nuestra familia me adentro encontrando solo a mí papá y al abuelo.

—Caleb esperanos dentro del auto —papá ordenó mientras miraba su reloj—en media hora nos llevaremos a Alex —adentro su mano en el bolsillo del pantalón sacando unas llaves las cuales las tiro en mí dirección .

Pongo los ojos en blancos , está claro no quieren que escuche la conversación en fin ni me importa.

Me toca sacar el carro , salgo de la sala para dirigirme al ascensor.

En el transcurso algunas dudas llegan a mí cabeza será que papá y mis tíos sabían  que el abuelo tiene cáncer , en mí boca se forma una mueca .

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Ha pasado más de media hora y me he  empezado  a inquietar .

Mí reloj marca las 17:30Pm

Salgo del carro y entro nuevamente al hospital con la frustración en mí rostro, la seguridad había echado a la prensa.

Al llegar a la sala puede escuchar varios disparó lo primero que pensé fue en el abuelo.

Las puertas de la sala se abrieron con fuerza de este salió papá.

En el camino encontramos algunos hombres que abrieron fuego hacia nosotros.

— Mierda, no traje la puta arma—las palmas de mis manos empezaron a picar, mí padre me dio una mirada reprochando mí descuidó.

Al terminar llegamos a la habitación de a Alexa dónde se escuchaba a una persona llorando.

Mí corazón empezo a bombear con fuerza cuando escuché la voz del tío Roy.

El médico de la familia el abuelo lo acogió desde pequeño y lo crío.

Papá soltó su arma y entro.

Las puertas quedaron abiertas lo que me daba una imagen clara el abuelo tendido en el suelo y a su alrededor una gran charco de sangre  la cabeza del tío estaba apoyada en en su cuerpo soltando varios quejidos  sujetando al abuelo con fuerza.

Mí papá se puso de rodillas sujetando la mano  del abuelo y rompió en llanto.

—Esta vivo verdad Roy el está vivo—fueron las primeras palabras que salieron de mí boca al ver su cuerpo pálido, mire la camilla y gracias a dios Alexa está ahí aún inconsciente

—Gracias a Dios lo está solo se desplomó está sangre no es de él es mía, me rozo una bala en la pierna, pero se llevaron a Alex, el no estaba muerto—dice mientras revisa al abuelo

—Mierda, Roy explícate como que Alex no está muerto—indaga mi papá.

—Fui a buscar el cuerpo de Alex y aún respiraba en ese momento me escondí a escuchar unas voces, no tenía una arma estaba totalmente desprotegido, el maldito de Jeremy se lo llevo yo lo ví con mis propios ojos—responde poniendose de pie.

—Todo se Jodio.

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Santa  Maria madre de dios ruega por nosotros los pecadores, ahora y en la hora de nuestra muerte .

A medida que recitan, me levanto de la silla me acerco a la caja, deposito una rosa blanca en ella.

Me arrodillo sobre el suelo y reposo la mitad de mí cuerpo encima de la caja, dejo que mis lágrimas salgan.

—¡P papá porque, papá!—grito entre lágrimas.

—¡Papito, porfavor tu no no puedes estar muerto!,—siento mí garganta arder, algo que ignoro.

—¡¡Porque me dejaste!!—un vacío inexplicable se instala en mí pecho.

Teníamos tantos planes juntos, celebrar juntos mí cumpleaños, celebrar juntos tu cumpleaños aunque no te agrede, cocinar juntos, reír, llorar, ir  a la playa.

—¡¡ALEX dijiste que ni la muerte te podía llevar!!—escucho el grito de mis primos.

También recuerdo esas palabras, que no hace mucho me lo dijiste entre bromas.

—¡¡Porque dime porque!!—los muchachos sujetan a Paul por los brazos quien ha perdido el control.

No puedo controlar las lágrimas que siguen saliendo siento que no puedo controlar mí cuerpo, golpeó la caja y grito cosas incoherentes, porfavor llévame también pido entre gritos.

Ya no puedo aguantar más, primero mi tío Jhon y ahora tu,unas manos sujetan mí cuerpo, Paul me abraza por atrás mientras llora sobre mí hombro, quien es el causante de todo esto lo va apagar y muy caro.

Me quieren ver destruida lo han conseguido, mis sentimientos me están matando.

Me quieren ver loca de dolor.

Mi cordura pende de un hilo.

Aprieto con fuera mis manos, acomodo las gafas negras que reposan en mí rostro , miro la rosa negra que Lucio deposita en mí mano la colocó encima de la caja de mí papá.

—Padre no te preocupes descansa en paz —susurro —Voy  arreglar, todas las malas desiciones que he tomado en esta vida—las manos las adentro en mis bolsillos —Tenias razón es un error confiar hasta en tu propia sombra.

—Nos  hemos quedado quietos en estos meses , no hemos movido ni un dedo—expresa Caleb con la voz ronca — Es el  turno de la familia Black — estiró las comisuras de mis labios —Verdad Abuelo.

Me doy la vuelta avanzando hacia al auto los demás vienen detrás de mi, desde donde estoy puedo escuchar los sollozo de la gente.

Al lado de mí auto veo  apoyado al padre de max mi tío.

—Ya es hora de que regrese nuestra pequeña diablita —le ordena a Caleb mientras ingreso a al auto, quiero irme aquí esto me asfixia.

—La tía Rebecca no sabe nada—musita Caleb enmarcando las cejas.

—No, ya es hora de que regrese la segunda avispa negra de la familia—escucho decir al tío Marco.

Cobraron venganza sin imaginarse qué eso traería muchas consecuencias.

Me estoy volviendo loca gracias a el .

Solo tengo que matarlo es la única forma de que me dejen en paz , para poder vivir una vida tranquila.