One-shots de Harry Potter

Scorpius (Drastoria)

En el momento en que supo de su embarazo, Astoria no pudo alegrarse. Quiso sentirse dichosa, pero en su lugar, la inundó el pánico. Quiso correr emocionada a contarle a Draco, como la primera vez que recibió esa noticia, pero en su lugar se quedó quieta, escuchando atentamente las mil y una recomendaciones del sanador, sola.

Aquella era la tercera vez que recibía la buena nueva de estar embarazada, sin embargo, ella y Draco aún no tenían ningún bebito. La tragedia truncaba sus intentos de ampliar su pequeña familia, reduciendo sus sueños a añicos y llantos desconsolados...así que, y por el bien de su nonato y el de su esposo, decidió guardarse el secreto hasta que hubiera pasado el peligro de perder el embarazo una vez más...

- "¿No han considerado adoptar? "- escuchó alguna vez a Daphne recomendarle a Draco, creyendo que no ella escuchaba-." ¿O es que en serio despreciarías o un niño que no lleve tu sangre...?"

- "Tonterías, Daphne. Un hijo es lo que queremos, engendrado o adoptado, da lo mismo. Pero un ex mortífago como yo no puede aspirar a eso..."- lamentó el rubio con resignación, quebrando el corazón de su esposa-. "Si hubiera sabido que casarme con ella era condenarla a no ser madre, jamás..."

- "Él hubiera no existe, Draco, y Astoria te ama. No puedes dejarla ahora, la destrozaría..."

- "...Y no pienso dejarla, nunca. Ella es todo lo que tengo, la única a quien amo lo suficiente como para justificar mi existencia..."- aseguró, dejando a ambas hermanas calladas, asimilando sus palabras.

- "...Me alegra que las pérdidas no les haya costado su matrimonio. Y aunque sé que no cambia nada, quiero que sepan que no conozco a nadie que merezca más un niño que ustedes dos. Si hay algo de justicia en esta vida, lo tendrán..."

- "No quiero un hijo si a cambio tengo que perderla a ella"- confesó, su voz rota con el dolor de imaginar aquello-. "Su maldición es muy clara: no quiere que procree, la matara si lo intenta. Casi la mata las otras veces. Y sin posibilidad de adoptar, creo que sería lo mejor buscar el modo de hacerme estéril..." - a Astoria le costó no salir de su escondite a encararlo, pero por suerte Daphne no se quedó callada mucho tiempo.

- "...Pues eso es algo que tienes que discutir con ella, cuñado. Estoy de acuerdo contigo en que un embarazo es lo último que necesita mi hermana...pero conociéndola, ella opinara lo contrario..."- Astoria colocó sus manos en el vientre, como queriendo proteger a su bebé de lo que maquinaban sus familiares-. "Será tu cuerpo, pero como matrimonio, deberían hablar antes de tomar medidas permanentes..."- Astoria se sintió culpable de estar ocultando el embarazo, Pero ¿Quién la podía culpar? Temía que, si lo revelaba, el bebé se iría, como los anteriores...

-..." ¿Cuándo no ha opinado lo contrario, nuestra bella Astoria? Pero yo juré protegerla, y eso haré. La idea de otro embarazo me aterra más de lo que me ilusiona, y si no es el embarazo, será la pena de perderlo lo que termine matándola...y yo puedo evitarlo..."- Astoria no quiso escuchar más.

No, él no podía hacer nada para evitarlo, no ahora. Ella tendría ese bebé...o moriría en el intento. Estaba harta de que la maldición rigiese su vida y su muerte, arrastrando con ella la vida de quienes amaba. De todo lo que pudo haber deseado, ella quería ser madre. Punto. Y haría lo que sea por salvar a su bebé...Incluso ocultarlo.

Pero claro, los meses pasaban y su vientre, para su alivio, crecía, haciendo imposible que lo ocultase para siempre. Al sexto mes, y con un vientre que aparentaba apenas 4, se lo contó a sus familiares, empezando por su esposo.

- Pero ¿Cómo...?

-...Tú sabes cómo...- trató de bromear, pero la expresión de Draco era de todo menos alegría. Parecía aterrado, mirando con incredulidad al apenas abultado vientre de Astoria...