—Entonces... ¿Me harás el favor o no? —Farid me pico con su dedo índice en las costillas ganándose un puñetazo en el brazo de mi parte.
—Consíguete un motel y asunto arreglado, Farolas —Me aparté de su lado y caminé a la cocina para preparar agua para un café.
—Nahia, esto será beneficioso para ambos —Apoyo su cadera en la barra a mi lado —Tú sales y agarras un poco de color, porque, Dios, pareces un zombie...
—Si esa es tu manera de querer convencerme, pues... —Dejé la frase al aire y contorneé los ojos hacia él.
—Y yo al fin descargo toda este energía que he acumulado —Dio una sonrisa superficial —Todos ganan.
—Dios, ¿cómo es que esa chica sale contigo? —Giré los ojos y di unos pasos para tomar una taza de la alacena —¿Ni siquiera me la vas a presentar antes?, al menos, dime cuál es su nombre.
—¿Por qué haría eso? —Junto sus cejas confundido.
¿Podrían los hombres ser más estupidos?
—Es tu novia, ¿no?
—No —Se cruzó de brazos y bufó.
—¿Porque tú no quieres o porque ella no quiere? —Inquirí alzando una ceja.
—Ella sabe que no es nada serio —Se encogió de hombros y después chasqueo la lengua —¿Lo harás o no?
—No —Serví el agua caliente en la taza y después agregue el café —Farid, no tengo nada que hacer afuera, ¿crees que me quedaré sentada en un parque sola por quince minutos solo porque tú quieres coger?
—Yo diría que serían más de quince minutos —Formó un morro con sus labios —¿Cual es la diferencia de estar sola en tu habitación a estar sola en un parque?
—El internet —Me alejé de la barra y me dirigí a la sala con mi hermano siguiéndome detrás.
—Te pagaré —Lo miré por encima del hombro más interesada en el asunto —Diez dólares y regresas a las diez.
—Treinta y regreso a las nueve —Me senté con cuidado en el sillón gris y él imitó mi gesto sentándose en el sofá de a lado.
—Quince y a las diez —Contraatacó.
—Veintinueve y a las nueve y media.
—Bien —Alargó la palabra de mala gana —Pero tendrás que desaparecer de aquí a las cinco.
—De acuerdo, pero le pagarás antes de que me marche —Dije antes de tomar de la taza, cuando hizo ademán de alegar volví a hablar —Si tengo que distraerme durante la tarde necesitaré dinero.
—Te odio —Se levantó y caminó hacia las escaleras —Dejaré el dinero en tu habitación.
—Me amas, lo sé —Canturreé.
Sabía que Farid había comenzado a salir con una chica, fue obvio durante esos días, pegado a su celular, encerrándose en su habitación para hacer llamadas que no quería que yo escuchará, saliendo por las tardes y volviendo por las noches con olor a perfume femenino en lugar de alcohol u otras mientras, pero se negaba a hablarme de ella o siquiera decirme su nombre, se ponía nervioso y a la defensiva, su papel de chico idiota y eso de "ella sabe que no es nada serio", me lo pasaba por el culo, eso no era algo casual, solo faltaba que él lo aceptara.
Llevé la taza al fregadero cuando me terminé su contenido y después subí a mi habitación, sobre mi tocador se encontraba algo de dinero que Farid ya había llevado, definitivamente estaba ansiado porque yo saliera de la casa, me dejé caer a la cama boca abajo y tomé mi celular, tal vez podría visitar a la abuela y pasar el día con ella, o hacerlo con mis otros abuelos, llevaba tiempo sin mirar a ninguno, Michi entró a la habitación y se recostó a mi lado, me miró con sus grandes ojos dorados y maulló para después acomodarse mejor y dormir, maldito gato, yo quería esa facilidad para dormir al segundo, suspiré y volví al celular, entre a los mensajes aún debatiéndome con cuál de mis abuelos iría, ¿maternos o paternos?, gran debate, los paternos eran dulces, pero normalmente no entendía la mayoría de lo que me contaban y tenía que fingir no estar agobiada, con la materna no hablábamos mucho, nos limitábamos a mirar la televisión y ella me ofrecía comida que preparaba, cuando se la negaba era como hacer enojar a Hulk.
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BREATHE ME (BORRADOR)
Fiksi RemajaAra Loveall se siente atrapada dentro de su propio cuerpo; como en un cuarto oscuro, incapaz de avanzar. Y en su último año de preparatoria esa sensación no hace más que empeorar, pues ahora todo se inunda a su alrededor y lucha por respirar. "¿Pued...